PERDIDA

CAPÍTULO 13

El resto de la fiesta nos la pasamos bailando, evitando a los borrachos, intentado parecer como ellos durante tan solo unas horas.

Y ser como ellos es horrible.

Llegan las doce de la noche, y es hora de despedirme de mis amigas. Ellas se marchan y me quedo sola. Completamente sola. Ahora que pienso, Josh y Claudia viven en la misma casa, así que supongo que deben irse a la misma hora... Era una excusa de Claudia para irse. Que simpática ella...

Me encuentro de repente con Lara, que me coge de la muñeca y me lleva a una habitación donde se encuentra toda la gente que decía que iba a jugar a este juego tan estúpido. Se encuentra Jake, el chico extraño, está Josh, quien no podía faltar para hacer este juego todavía más odioso. Luego se encuentra Claire, una amiga de Lara, Diana, una chica muy mona y que es amiga de todo el mundo, quizás podría llegarse a decir que es más popular que Lara, y en otras circunstancias no habría tardado en atacarla, pero estando así de borracha, Lara no está para insultos. Tamién está presente Ross, un chico rubio que lleva el pelo alborotado como Jake, pero en rubio, y por último está Vane, una víbora como Lara. 

Me suelta y con la mirada me indica que avance y que me siente dentro del círculo. Incluso en esa habitación hay gente a parte de nosotros, todo el mundo de la fiesta se cuela por donde puede, buscando algún hueco libre intentando no ahogarse en la muchedumbre. Me siento, y no puedo evitar sentirme incómoda teniendo todas las miradas del círculo en mí. Una vez sentada, Lara también busca un sitio para sentarse.

-¿Quién empieza? -Pregunta Lara.

-Ya lo hago yo si queréis -responde Josh. Cómo no...

-De acuerdo Joshie... -dice Lara. Este nombre me recuerda al personaje de Mario Bros, e intuyo que este nombre no le entusiasma a Josh, ya que en el mismo momento de decirlo ha puesto los ojos en blanco.- ¿Prueba o verdad?

-Prueba. -Contesta Josh con firmeza. Lara empieza a pensar. Si ya de normal le cuesta pensar el doble que alguien con un coeficiente intelectual medio,  ebria creo que le debe de costar el triple.

-Te reto a que te bebas un cuarto de la botella de tequila en veinte segundos -dice con una media carcajada. Josh coge la botella,  en menos de quince ya lo ha hecho. Vaya, no creía que Josh sería así. Josh se seca los labios con el pulgar.

-Me toca -dice. Empieza a mirar por toda la sala hasta encontrarse con mis ojos. Se le esboza en los labios una media sonrisa. Oh no, a mí no, pienso. 

-Nina, ¿prueba o verdad? -me dice. Me saca de quicio.

-Prueba -contesto. A Josh se le sale una sonrisa de malicia. 

-Te reto a... a decirme todo lo que pienses de mí en treinta segundos.

Ahora me toca sonreír a mí de maldad.

-Empieza en tres, dos, uno... -cuenta atrás Ross- ¡ya!

Tomo aire.

-Creo que eres un tío prepotente cualquiera, que por una extraña razón se cree el mejor. Crees que puedes hacer lo que te da la gana y conseguir lo que quieras con chasquear solamente los dedos, y lo peor, te crees que puedes jugar conmigo. Pues no es así, porque yo soy mucho más madura que tú y valgo mucho más la pena que para dejarme llevar con alguien que ni siquiera sabe quien es en realidad. Porque no lo sabes, Josh. Vas perdido intentando encontrarte entre las demás chicas de una sola noche, pero yo no quiero una noche. Mi vida no es una noche. Así que espero que se te bajen un poco los humos porque fuera de tu mundo increíble de prepotencia se encuentra la vida, y no creo que te guste cuando te dé una bofetada al encontrarte con ella cara a cara.