-Bueno, quieres dar un paseo? Tengo que recoger unas cosas en el centro... - dijo mirándome fijamente.
-Vale. - dije sin pensármelo dos veces ya que no había salido aun de la casa y tenia curiosidad.
-Pues... vamos. - dijo comenzando a subir las escaleras.
En la entrada, Haru se paró y me miró de arriba a abajo con la mano en la manilla de la puerta. Yo estaba comenzando a sonrojarme de nuevo. Depronto, se quitó la sudadera que llevaba y me la dio serio.
-Afuera hace frio, pontela. - dijo el mirándome fijamente.
-Pero... y tu? - dije preocupada.
-Yo estoy bien... - dijo con vergüenza.
Me puse la sudadera y sentí su cálido olor. Me venía un poco grande pero abrigaba. Haru abrió la puerta y un viento frio nos golpeó no con mucha potencia. Se giro hacia mi y me hizo un gesto para que saliera. Nada más salir, quede asombrada. Delante nuestra, se extendía un gran prado que parecía no tener fin. Se divisaban unas pequeñas casas en una parte del horizonte. Todo aquello era hermoso. El cielo azulado como nunca lo había visto y al fijarme bien me di cuenta de que tenía dos soles. Sin duda estaba en otro mundo.
-Dikhi, así es como se llama este planeta creado especialmente para los Shikus... - dijo Haru amablemente.
-Construido? - dije sorprendida.
-Nuestros antepasados Shikus, los cuatro elementos, crearon este mundo escondido a los ojos de los humanos, para que nos tuvieran controlados. La jefa de la organización es una de los cuatro elementos de la generación pasada, es la única vía de esta generación y se ocupa de todo esto. Por eso es tan importante encontrar a todos los Shikus de esta generación, por un bien común ya que algunos pueden despertar su poder enseguida y acabar con el mundo de los humanos y con Dikhi... - dijo el seriamente si casi pestañear.
-Entiendo... - dije pensativa.
-Bueno, dame la mano. - dijo extendiendo la suya.
-Co... mo? - dije con vergüenza.
-El pueblo está lejos andando, iremos volando. - dijo sonriente.
-Volando? - dije sin entender nada.
-Si, no lo recuerdas, yo controlo el sonido y con práctica, conseguí volar con las frecuencias de sonido. - dijo mirándome fijamente.
-Ah... - dije aun asombrada.
Le extendí la mano pero el rápidamente me cojio con sus brazos. Rápidamente comenzamos a elevarnos en el cielo, esto me asustaba un poco y me agarre con más fuerza a el. Notaba el viento ondear mi largo cabello rubio. Enseguida, Haru me dejo en la plaza de lo que parecía ser el centro del pueblo.
-Bueno, este es el centro del único pueblo de Dikhi ya que es un planeta pequeño... - dijo mirándome sonriente.
-Es hermoso, parece la edad media... - dije muy sorprendida.
-Si... no se ha avanzado en las casas por dar más sitios verdes y libres de personas. Por tener más biodiversidad. - dijo sin quitarme sus ojos de encima.
-Todo lo contrario a la Tierra. - dijo suspirando.
-La tienda a la que tengo que ir, no está muy lejos de aquí, así que en cuanto antes nos pongamos a andar en dirección a ella antes llegaremos. - dijo comenzando a caminar.
-Si. - dije obedeciendo.
Yo andaba a unos 2 metros detrás de él. Levantaba la vista, y cada dos por tres, veía a Shikus que iban saltando de tejado en tejado, hablando con pájaros, luchando con espadas, niños corriendo por las paredes de la calle...
Todo estaba lleno de tanta magia que casi parecía un auténtico sueño. Era hermoso como ver que una cosa que en mi mundo parece imposible, aquí es totalmente normal.
Depronto, un grito, arruinó la felicidad que tenia con migo. Un montón de gente echo a correr en la dirección contraria a la que íbamos Haru y yo. Cada vez se escuchaban gritos de más personas y el miedo y la preocupación comenzaban a apoderarse de mi mente. Haru se puso delante mía haciendo un gesto para que no avanzará, pero en cuanto escuche a una niña grita el nombre de la que parecía su madre, eche a correr en la dirección de los gritos dándole, sin querer, un empujón a Haru.
Fui corriendo entre la gente y vi que la niña de pocos años, estaba sujetada bruscamente por un hombre, la niña no paraba de llorar y tenia una cuantas heridas. La calle se quedó vacía en segundos y solo habían unos 5 hombres con una túnica negra y encapuchados que comenzaron a pegar a la poca gente que habían cogido.-Basta! - grite con desesperación.
-Eh? Que has dicho? - dijo el que parecia ser el cabecilla del grupo.
-He dicho que pares! - grite de nuevo.
-Como te atreves. - dijo en tono de burla.
Todos comenzaron a reírse y a burlarse de mi. Esto me comenzó a cabrear bastante y yo no tenía mucha paciencia. Cerré los puños y rápidamente le pegue un empujón al que tenia a la niña, haciendo así que yo la cogíera.
-Pero que te has creído mal nacida. - dijo levantándose muy cabreado.
-Ven si te atreves. - dije dejando a la niña en el suelo y poniendome delante de ella.
-Como? - dijo furioso levantándose del suelo.
-Qué pasa, me tienes miedo? - dije en tono de superioridad.
En ese instante notaba como mis muñecas transportaban un calor hacia mis dedos. La misma sensación que tuve en el sótano. Mi puños cerrados comenzaron a rodearse de una potente y brillante llamarada de fuego. Iba a ser una pelea justa...
CONTINUARÁ EN EL CAPÍTULO 13.
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Cuerpo Helado...
FantasyEn una tormentosa noche de nieve, una persona aparecerá a los pies de nuestra protagonista. Podría ser alguien que solamente se había perdido, pero al rescatar a dicha persona comienzan a surgir cosas muy extrañas que asombran a la chica. Una intrep...