9:15 a.m.
Empece a despertarme un poco aturdida.
Los rayos del sol entraban por las cortinas que aún se encontraban cerradas.
Me levanté con un poco de dificultad y me dirigí al baño. Antes de entrar, me detuve en el espejo de cuerpo completo que tenia.
Hijo de pu...
Mi mirada se detuvo en mi cuello. Esa marca morada, ese chupetón, iba a llamar la atención en cuanto saliera a la calle.
Robert Downey, me las pagarás.
...
Minutos después, me encontraba solo con una toalla que apenas alcanzba a cubrir mi trasero.
Estaba tan entretenida escogiendo que lencería ponerme, que no me di cuenta de la persona que estaba recargada en el alumbrado de la puerta.
- Robert... - dije casi sin aliento, no se si era por el susto, o por el simple hecho de tenerlo en el departamento.
- Amber... - dijo sin quitarme la mirada de encima. Fue ahí que me di cuenta de que sólo tenía conmigo una toalla.
- ¿Cómo supiste que vivo aquí? No, más bien, ¿Cómo entraste? - dije un tanto alterada.
-No fue nada difícil. Verás, Marcus me dijo que te hospedabas en el hotel California, pero conociendo a mi sobrino, tuve que pasar por uno de sus interrogatorios, le dije que habías olvidado que firmara unos documentos. Así que, llegué aquí buscando a la señorita Palmer. La recepcionista me dijo que estabas en esta habitación y... Aquí estoy. - dijo finalizando con una de sus ardientes sonrisas.
Entonces, Robert empieza a caminar y se detiene a centímetros de mí. No apartaba los ojos de los míos. Levanta la mano, aciendome creer que me empezaría a tocar, pero no, agarra uno de mis sujetadores negros del cajón y lo observa a detalle.
- Uff... Y pensar que estuve a punto de ver esta belleza. - dice para luego pasar su mirada a mí.
¡No!
Esta ves no me iba a dejar llevar por los juegos de este hombre.
Le arrebate el sujetador de sus manos.
- ¡Vete de mi departamento! - dije entre dientes y levantando la barbilla.
- Y si no qué. - dijo apoyando su brazo en el tocador y acercando su cara a la mía. Solo era cuestión de que con un solo movimiento de los dos, nuestras bocas se unirían. Su mirada bajo a mi toalla.
- Pregunta... - cierra los ojos y con su dedo me señala - ¿Tratas de provocarme? - abrió sus ojos color avellana.
- Carajo...
No soporte más y lo bese. Lo bese con deseo y excitación. El me correspondió y no tardó en posar sus manos en mi cadera.
- Sí... Tratas de provocarme.
Sonaba excitado. Y eso me ponía aún más excitada.
- Cállate.
Y lo volví a besar.
Su mano arranco mi toalla. Pero yo no me quedé atrás. Le quite el saco y en seguida su corbata.
Acto seguido: la cama.
Él quedó encima de mí. Dios... Su aroma, me volvía loca. Su aroma era como un imán. Me atraía demasiado. Hacia que lo deseara más.
Pasaba sus manos por todo mi cuerpo, explorando cada parte de mi ser.
Quite su camisa blanca y sus pantalones, lo único que faltaba eran esos boxers. Él me evito el trabajo y sin más se deciso de ellos.
- Hazlo ahora... - dije con el poco aliento que me quedaba.
-...
-¡Hazlo ya Downey!
Y lo hizo. Doloroso pero placentero a la vez.
En cuanto entro en mí, ese momento no importaba nada, solo me perdía en sus gemidos y en los míos, me perdia en el placer que aquel idiota me daba.
Yo pasaba mis manos por su cabello castaño, mientras que el las pasaba por mis costillas y por mi pecho.
Sus besos, sus caricias, me hacían sacará hasta el último gemido.
Entre más rápido lo hacía, más rápido llegaría al clímax. Y así fue, ambos llegamos al punto final.
Agotados y sudados, el selevanto y empezó a vestirse. Yo seguía algo perdida por lo que acababa de pasar. Todo volvía a la realidad y jale un sabana para poder cubrirme.
Termino de vestirse y se acercó a mí.
-Gracias por este momento.
Me dio un beso en la nuca y salió.
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El Peligro De La Atracción. (Robert Downey Jr y Leighton Meester)
FanfictionAmber tiene un plazo de cuatro meses, pero nunca se imagino lo que le podría pasar. Ella se considera una mujer lista y atrevida, teniendo una fuerza que acaba con cualquier problema que se le atraviese. Entre familia y trabajo, el camino le abrió l...