-¿Sigues molesta por lo de esta mañana? -preguntó irritado. -Era lo justo.
Me volteé para mirarlo. - En realidad no quiero qué me toques. -declaré.
Frunció el ceño. -¿Estás segura de eso? -preguntó incrédulo.
-Muy segura. -confirmé. -La verdad es qué el único hombre que quiero que me toque es Harry, Mi novio.
Su mandíbula se tensó, y su mirada fue a otro lugar. -Vale. -asintió y caminó hacia el escritorio.
Suspiré profundo y lo miré, mientras revisaba su maletín, en busca de algo.
-¿Y porqué no tragues bragas? -preguntó de repente con voz gruesa, parecía dolido.
Su mirada estaba fija en mí, causándome sensaciones incontrolables.
-Mi nana...-suspiré. -Cuando mi nana fue a buscarme para avisar que habías llegado, yo...Estaba desnuda. Así qué, me levanté de la cama y busqué mi vestido, me lo puse y salí para atenderla, y ella me trajo aquí casi obligada, impidiéndome regresar por las bragas.
Asintió, se veía desilusionado.
¿Acaso pensó qué lo había hecho para provocarlo?
-Siéntate, te haré un pequeño examen. -declaró seriamente.
Asentí y caminé hacía la silla, me senté y lo miré.
-Responde las preguntas que vienen aquí, en esta hoja. -dijo, entregándome la hoja. -Tienes cinco minutos.
-¿Solo eso? -le pregunté sorprendida.
-Al contrario, es mucho tiempo para unas preguntas tan fáciles. -me fulminó con la mirada. -¿O no prestaste atención a nada de lo qué dije?
Lo miré por un momento.
-D-Digamos que sí. -contesté nerviosa.
-Digamos que sí. -me imitó. -¿Entonces para qué quieres que te dé clases si no vas a aprender nada? Me preocupa estar perdiendo mi tiempo con alguien que solo piensa en estupideces durante la clase.
-No tengo la culpa de que no seas paciente. -contesté. -¿Se te olvida que dijiste qué tendré buenas calificaciones? -alcé una ceja.
-¿Qué? -exclamó.
-Cuando me follaste y me sacaste de tu casa como a una perra, me dijiste qué tendría buenas calificaciones. -me levanté.
-¿Eso quiere decir que no piensas estudiar? -preguntó irónico.-Eso quiere decir qué tendré buenas calificaciones este mes. -me acerqué y le di un rápido beso en la mejilla. -Usted es un buen profesor. -di un paso atrás con la intención de alejarme de él.
Él me agarró del brazo rápidamente. -Me estás chantajeando. -no fue una pregunta, fue una afirmación.
Le miré a los ojos por uno momento, Ojos qué mostraban furia. Miré su nariz y su boca. Esos labios... Profesor Payne. Tan besables y provocativos.
<Bésalo> Gritaba mi subconsciente.
-Tómalo cómo quieras. -susurré, aun deseando sus labios.
-¿Sabes algo? -me acercó más a él. -Empiezo a creer que todo lo planeaste desde un principio. Seducirme, llevarme a la cama y al final chantajearme.
-En realidad no. -miré su barba, Oh, cómo quisiera besársela. -No quería chantajearte.
-Soy un profesor con principios, no lo olvides. -susurró. -Y aunque algunos de mis principios se fueron al carajo, no pienso permitir que hagas esto.
-¿Y qué vas a hacer? -lo miré desafiante. -Demostrarme lo hombre qué eres, seguro. Oh, se me olvida, eres tan hombre pero tan hombre que ni siquiera eres capaz de follarte a una chica hasta tener un orgasmo.
Su ceño se frunció, y su mano apretó con más fuerza mi brazo. Me quejé.
-Lo hice porqué te lo merecías. -contestó iracundo. -¿Eso es lo que te tiene así? -preguntó.
-No. -fruncí los hombros. -Me dio igual. Porqué, en cuanto llegué a casa, mi novio Harry me hizo el amor. -confesé. - Se me olvidó decirte que, en eso no lo superas en conocimientos.
Se quedó mirándome.
Definitivamente estaba que ardía de la rabia. Le di en donde más le duele.
-No te digo lo qué te mereces por qué no quiero perder más tiempo. -declaró, soltándome el brazo y alejándose.
¿Qué era lo que me merecía? Sus palabras me dejaron con la intriga.
-¿Otra follada incompleta? -pregunté burlona.
No tenía idea de el porqué seguía desafiándolo.
Paró de caminar en seco, y me miró, respiraba pesado.
-¿Acaso no piensas dejarlo? -preguntó entre dientes.
Sonreí.
Miré el reloj. Ya era hora de que las 'Clases' Terminaran.-Ya es hora de que se vaya. -declaré rápidamente.
Él caminó hacía el escritorio y guardó las cosas que le pertenecían.
Todo estaba en silencio.
-Ah, Señorita Walter. -comenzó a decir. -El sábado no podré venir, avísele a sus padres. -caminó hacía la puerta y abrió. - Es el cumpleaños de mi novia. -informó, antes de cerrarla.
¿Su novia?
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Seduciendo a mi profesor - Liam Payne
Hayran KurguValerie Walker estaba dispuesta a hacer lo qué fuera necesario para meter al profesor Liam Payne bajo sus sabanas.