3. Can You Hear Me Calling? *En Español* (Tokio Hotel/Tom Kaulitz Fanfiction)

Capítulo Catorce. Esto No Será Para Siempre.

Es largo y tiene un poco de todo... creo... 

Una disculpa por no subir, estoy un poco descontrolada intentando terminar ésta (ya saben que la escribo en inglés porque no me sale en Español, así que aunque la termine deberé traducir ._.)  y también terminar Memorias... Que por cierto también actualizaré hoy. 

¡Aprovecho ésta nota para desearles una feliz navidad y agradecerles por su eterna paciencia, son las mejores!

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Tom

El avión finalmente aterrizó y por fin pude pisar suelo alemán. Las últimas 24 horas más o menos habían sido algo así como una pesadilla; Jo no había respondido a ninguno de mis mensajes en toda la tarde, supuse que estaba demasiado ocupada con el cumpleaños de Günther. Mamá dijo que todo estaba bien cuando la llamé y me pasé todo un día en Nueva York a la espera de que pasara la maldita tormenta para poder abordar el siguiente avión a Alemania.

No hubo vuelos directamente a Alemania así que tuve que hacer una escala en el aeropuerto Charles De Gaulle. Estaba perdiendo la paciencia con rapidez; todo lo que quería era estar en casa.

Miré mi reloj mientras esperaba a que mi maleta apareciera en la banda transportadora. Era tarde en la noche y yo todavía tenía que hacer un largo viaje a la casa. Recogiendo mi maleta la arrastré detrás de mí para llegar a la salida. Cerca de las puertas estaba un hombre con un cartel, yo no sabía que habían enviado a alguien a recogerme.

- ¡Hey! – Le dije al hombre y me estrechó la mano.

- ¿Kaulitz? - Preguntó, sin saber cómo se veía la persona a la que estaba recogiendo. Asentí. - Vamos a llevarte a casa.

- Así que ... - El hombre me mostró el camino a una SUV negra, ya estaba acostumbrado a todo esto, pero no podía recordar la última vez que había estado en casa tan tarde y me había sentido tan desesperado por ponerme en marcha. - ¿Quién hizo la llamada?

- No estoy seguro, pero no sabía a qué hora iba a llegaría. – Él me dijo, su acento era fuerte y su r sonaba áspera y dura, supuse que era del sur.

- ¿Has estado aquí por un tiempo, entonces? - Le pregunté mientras abría la puerta de atrás y cogía mi maleta. Él asintió con la cabeza. - Lo siento, amigo, ha sido el peor de los viajes.-

- Sí, casi todos los vuelos fueron cancelados con la tormenta. - Señaló antes de que me metiera al coche.

Por lo menos la gente sabía acerca de eso ... El resto del camino de vuelta a casa no hablamos mucho; yo estaba cansado y lo único que quería era estar en la cama con Jo, tal vez al día siguiente me gustaría hablar con el pequeño hombrecito. Las calles estaban todavía muy ocupadas, pero llegamos en un tiempo récord y cuando la camioneta se fue, abrí la puerta de la casa. El calor me golpeó en la cara y también había un olor agradable que venía desde adentro. Alguien había estado horneando allí; Jo no lo hacía mucho, así que adiviné que Maura había horneado para su nieto.

Todo estaba en silencio; tiré de la maleta para que las ruedas no hicieran ruido en el suelo. La bajé en la sala después de asegurarme de que la puerta estaba bien cerrada con llave, Jo nunca parecía estar demasiado preocupada de cerrarla correctamente.

La vista en el sofá me hizo suspirar al darme cuenta de que finalmente estaba aquí. Jo estaba durmiendo en el sofá con una almohada entre sus brazos. Me quité mi chaqueta y la dejé caer en otro sofá antes de ir hacia Jo. Tan pronto como alargué la mano para tocarla ella se movió y abrió los ojos, parpadeó un par de veces antes de darse cuenta de lo que había visto. Le sonreí, podríamos estar igualmente cansados, pero al menos ahora estábamos juntos.