Asustada

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Hola,otro capitulo,no falta mucho para el final,espero les siga gustando el desenlace de esta historia.

Thomas y yo bajamos para ver a los extraños que irrumpian en nuestro hogar.Los hombres forzaron la puerta de entrada que no tardo mucho en ceder.Luego entraron,la mujer los seguia detras.Cuando la vimos entrar los dos nos quedamos perplejos.

Era Edith?no podia ser,pero lo parecia.Las mismas facciones,el mismo cuerpo,solo su cabello castaño oscuro la diferenciaba de ella.Mire a Thomas,el contenia una emocion que yo no llegaba a comprender.

Desde un costado de la escalera,los mirabamos,uno de los dos hombres hablo con la mujer.

-Muy bien señorita Robins ya la trajimos a la casa,la abrimos,ahora...esta segura que quiere pasar la noche aqui?yo no lo recomendaria.Hay muchas escalofriantes historias sobre esta lugar,y lo peor es que todas son ciertas.

-No te preocupes Joshua-respondio ella-Yo se bien lo que hago.Muchas Gracias.

El hombre asintio y saludandola con la gorra salio junto al otro que lo acompañaba.

La joven observaba todo con interes,parecia muy emocionada de estar ahi.De repente la vimos fruncir el seño y mirar en nuestra direccion.Rapidamente nos escondimos dentro de la pared,y ella luego de mirar un momento mas desistio y comenzo a revisar unas cosas.

Salimos de donde estabamos y traspasamos la puerta a otra habitacion.

-Quien sera ella?-le dije a Thomas conmocionada-Es igual a ...

-Edith-dijo Thomas en un murmullo.

-Si a Edith-continue yo-y lo  notaste Thomas? ella nos percibio,nos vio.Como puede ser posible?.

-No lo se...-respondio el con tristeza-pero se que Edith tambien lo hacia,antes de irse... ella me vio.

Si,lo recordaba perfectamente.Como recordaba el pesar que me producia el amor entre Thomas y ella.

La joven paso la noche en nuestro cuarto,por lo cual,nosotros nos quedamos en la biblioteca.

-Crees que deberiamos contactarnos con ella?-le pregunte a un muy pensativo Thomas.

-No lo creo Enola,para que lo hariamos?-respondio el.

-Para saber quien es?¿Que quiere?-dije yo.

-Solo lograriamos asustarla a muerte-me respondio Thomas.

-No...-dije pensando-Y si nos mostramos de la otra manera.Como nos veiamos antes,como lo hacemos cuando estamos...juntos.

-Podria ser-respondio el-Podriamos tomarnos de las manos y permitir que nos vea asi.

La idea parecia muy buena,asi podriamos saber quien era aquella misteriosa joven que rondaba Allerdalle Hall.

A la mañana siguiente,estabamos preparados para acercarnos y hablar con ella,con la Señorita Robins.

Thomas tomo mi mano,y al hacerlo recuperamos nuestra antigua apariencia.
Luego me sonrio y  se acerco mas a mi.

-Para la buena suerte-dijo el y me regalo un pequeño y dulce beso en los labios.

Luego bajamos por las escaleras.Alli la joven se encontraba comiendo una barra de algo y escribiendo unas notas.

Levanto su mirada en ese momento y nos vio.

Sus ojos se abrieron grandes,pero no se asusto,ni siquiera se sobresalto.

-Esperaba verlos...a los fantasmas de Alerdalle Hall,pero no pensaba que ellos vendrian a mi-nos dijo.

Luego se acerco sin temor a nosotros,hasta quedar a solo unos metros.

Eres Sir Thomas Sharpe-dijo ella mirando a Thomas con fascinacion-Eres tal cual ella te describio.Pense que exageraba...pero ahora veo que no.

Yo me moleste por sus palabras,ni aun muerto las mujeres lo dejaban en paz.

-Yo soy Enola Sccioty-le dije-y si ,el es Sir Thomas Sharpe.Pero la pregunta es¿Quien es usted?.

Ella me respondio sin dejar de mirarlo embelesada,me senti tentada a soltarlo para que lo viera como un anima blanco.¿pero quizas igual le gustaria¿Que les pasa a las mujeres con Thomas?.

-Soy Rebecca Robins-respondio y me miro al fin-Mi abuela me hablo de ustedes,se que la conocen se llamaba Edith Robins,asi se apellidaba mi abuelo...o Edith Cushing como la conocieron ustedes.Ella murio hace 10 años,siendo ya muy anciana.Pero antes de hacerlo me encomendo algo y eso es lo que he venido a hacer.

La sorpresa cubrio nuestras facciones.

-Y que es lo que Edith le encomendo Señorita Robins?-pregunto Thomas.

Ella volvio su mirada a el,completamente cautivada otra vez.

-Pues ella me conto desde niña su historia.Todo lo que sabia de Alerdalle Hall,las muertes,su gran amor hacia usted...un par de años despues de escapar de aqui,ella se caso con mi abuelo,ella lo queria,pero por la forma en la que hablaba...creo que ella nunca lo olvido.Bueno, antes de morir ella me dio una carta y me hizo jurar que la entregaria en sus manos
Sir Thomas.

-Pero como sabia ella que usted nos podria ver?la mayoria no lo hace-le pregunte.

Rebecca me miro y sonrio antes de responderme.

-Creo que lo hizo porque sabia que ella y yo compartiamos el mismo don...poder ver a los muertos.

Me sorprendio su relato,pero parecia real.

-Aqui la tengo...dijo señalando un bolso-a la carta.Pero antes quiero pedirles un favor,una vision me ha inquietado durante bastante tiempo,yo no llego a entenderla y quizas ustedes sepan que significa y ya no me atormente.

-Claro- respondio Thomas-Simplemente cuentelo.

-Es sobre una mujer muy blanca,y delgada,su cabello es ta recogido,y usa un vestido oscuro antiguo,esta sentada frente a un piano tocando una melodia.De pronto unas llamas la cubren,la queman ,la atormentan, y mientras sufre  ella grita un nombre... pero nunca lo entiendo.

Thomas y yo entendimos su sueño,era como un mensaje del mas alla...uno muy tetrico.

Lo mire y pude ver como le habia afectado ese relato,lo entendi fuera lo que fuera Lucille era su hermana.

-Es mi hermana-contesto Thomas ante mi sorprendida mirada-Ella causo mucho dolor y muerte,cuando estuvo viva.Lo que usted vio Señorita Robins,seguramente... fue su final.

-Oh claro mi abuela la menciono,pero no sabia como era...yo lo siento,lo siento mucho.No era mi intencion causarles mas dolor.

Luego Rebeca se acerco hasta su bolso,tomo un sobre y volvio con nosotros.

-Tome-dijo dejando sobre la mesa aquella correspondencia-Mi entrega ya ha sido hecha.

Luego con una sonrisa y un saludo con su mano Rebecca Robins se iva para siempre de Allerdalle Hall.

Thomas me solto de la mano y al mirarlo pude ver el tormento que guardaban sus ojos.

-Porque Enola?-me dijo-Si yo fui tan culpable como ella,porque ella tuvo ese destino...y yo no.

-No lo se Thomas-le dije-Quizas es porque te arrepentiste,porque te redimiste al salvarlos,o porque hay alguien en el cielo que puede ver mas alla de tus acciones...tu corazon.

Ese dia Thomas se recosto en mi regazo y se durmio,mientras yo acariciaba su cabello,y contenia su dolor.

En mi corazon habia un temor que crecia minuto a minuto y la razon era esa carta,porque no queria perderlo,porque conocia el poder de la redencion.

Thomas: Amor después del amor, vida después de la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora