Peligroso Reencuentro (Eternidad Solitaria #2)

Capítulo 6

-¿Qué demonios haces tú aquí?- preguntó Jack a la vez que Dylan desataba las cuerdas que mantenían prisionero a Lucas.

-Tampoco es que quiera. Me secuestraron junto con mi hermana- explicó él levantándose de la silla con una mueca de dolor y acariciándose las muñecas rojas por las cuerdas.

-¿Tienes una hermana? ¿Está buena?- preguntó Dylan con los ojos brillantes. Lucas y Jack lo miraron mal, pero el primero quería asesinarlo de todas las maneras que conocía.

-Es preciosa y tiene nueve años.

El brillo en los ojos del rubio desapareció y fue sustituido por un azul que poseía tonos escarlatas haciendo que sus ojos parecieran violetas, eso no pasó desapercibido para Lucas, lo que le llevó a saber que si Scarlet era un vampiro los demás también lo serían.

-¿Es verdad? ¿Sois vampiros?- preguntó Lucas mirándolos seriamente.

Jack y Dylan se miraron sorprendidos y entre los dos intentaron hacerle creer que todo era una mentira, pero fue inútil.

-¿Desde cuándo lo sabes?- le preguntó Jack.

-Desde hace unas semanas. No me lo creí al principio, después vino Ashley me dejó esto en el cuello- dijo mientras giraba el cuello a un lado dejando ver la marca de los colmillos.

Dylan y Jack gruñeron.

-No es aconsejable enseñarle la yugular a dos vampiros sedientos- comentó Jack-. ¿Y dices que te lo hizo Ashley?

Lucas asintió.

-¿Desde cuándo Ashley es un vampiro?- le preguntó Jack a Dylan esta vez. El segundo se encogió de hombros.

-No tengo ni idea. Lo más importante ahora es encontrar a Amy y Blaine y largarnos de aquí.

-¿Y dónde sugieres que vayamos?- preguntó Jack-. No podemos quedarnos en Rusia. Dmitri conoce cada roca y montaña de este país.

-Blaine tiene una casa incomunicada en Escocia.

-Escocia está muy lejos de aquí.- Jack miró entonces a Lucas-. Ahora que sabes de nuestra existencia es muy importante que lo mantengas en secreto. Ya sé que te resultará difícil pero tienes que confiar en nosotros.

-¿Por qué debería hacerlo? Ya me mentisteis una vez- soltó Lucas con brusquedad.

-¿Y qué esperabas?- dijo Dylan-. "Hola, Lucas, encantado de conocerte. Me encantaría que fuéramos amigos, por cierto soy un vampiro"- continuó con el sarcasmo.

Lucas le miró mal.

-Sé que es difícil, pero si quieres salvarte a ti y a tu hermana tienes que venir con nosotros y permanecer con vida.

Dylan puso una mueca de fastidio y desapareció por el pasillo con el fin de salir de una vez de allí.

-¿Qué le pasa?- preguntó Lucas mirando el sitio por donde se había marchado Dylan.

Jack le dio un golpe amistoso en el hombro y le animó a seguir al otro vampiro.

-No es nada. Solo está celoso. Tú has conseguido en menos de cinco meses lo que él no ha conseguido en quinientos años. Vamos.

Los tres vagaron por los eternos pasillos de la cárcel sin hallar rastro de vida ni la salida. Lucas se horrorizaba cada vez que veía un cadáver en el suelo pero intentaba que no se le notara, aunque también aterrorizaba la forma que tenía Jack de caminar como un zombie. No fue hasta unos minutos después que Dylan sostenía a Jack entre sus brazos.