Sin Ancla

Había Esfumado

Sabina lucia increíble, tenia un pantalón ajustado -Primera vez que la veía con uno- una blusa de brillo gris y una chaqueta de cuero, su pelo estaba ondulado y su maquillaje era negro y de brillo plateado, sus labios rojos carmesí, junto a ella habían dos maletas, sus cejas perfectamente maquilladas estaban alzadas y no se si sonreía divertida o pensaba en como matarme.

Caminó hacia mi y pude escuchar sus tacones altos, unos zapatos negros con los tacones mas altos y finos que he visto en mi vida, Sabina cerro la puerta detrás de ella y puso la llave sobre una mesa, por un momento pense que me iba a asesinar pero solo rio, y vi sus ojos cristalizarse por las lagrimas.

"Me gustan los recuerdos ¿Sabes?" Dijo mientras giraba una pulsera de plata en su muñeca "Los colecciono, me gusta quedarme con un poco de los lugares a donde voy, de la misma manera que me gusta dejar algo en los lugares que visito, algo de mi, que me recuerden" Sonrió "¿Que te recordaría a mi si me voy?"

"Todo, tu eres todo eres el aire, eres el sol, la luna, las nubes ,las estrellas, eres el té que acompaña mis libros y el lienzo sobre el que pinto, eres la inspiración y la musa, eres todo sin ser nada, eres mucho en lo que es poco. Pero de nuevo, eres todo"

Camino hacia mi "Ahora debes irte, y recuerda" Coloco la sabana donde estaba "El Lago de los Sueños" Beso parte de mi labio y se alejo a la cocina, dándome entender que mi oportunidad de descubrir sus secretos se habia esfumado.