Era el cumpleaños de mi abuela, y fui con Sabina, mi familia no sabia que salía con ella, sabían que salía con alguien, así que cuando me vieron entrar de la mano con la legendaria Sabina todos se paralizaron un momento antes de saludarme. Paso un rato antes de que Sabina de sintiera cómoda, se pegaba a mi mientras todos me abrazaban aun mirándola a ella y la sorpresa en sus rostro no tenia precio, tal vez porque soy la persona que menos oportunidades de salir con ella tenia.
Mi abuela amó su vestido blanco.
Mis primas pequeñas trenzaron su pelo corto, pero aun hermoso
Mi madre adoro sus manos y uñas pintadas de rojo carmesí.
Y el resto, simplemente la amo.
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Sin Ancla
Short StoryRecuerdo que mirarte dolía Como si me robaran el alma Recuerdo que sonreírte dolía Como si me succionarán la esperanza Recuerdo que tocarte dolía Como si me quemaran la piel Recuerdo que amarte dolía Sin embargo mas dolía no hacerlo Eras como la b...