Sede A

1: Pilar Baen

8:00 AM

Siempre he dicho que son mis caderas o mis piernas las que podrían hacerme resaltar o hacerme parecer gorda. Realmente no me interesa el comentario de los demás en relación a mi cuerpo, pero vamos, me encantaría saber que me haría resaltar entre las multitudes. Con una sonrisa me aparto del espejo, el tiempo está pasando, tengo cosas importantes que hacer, incluso pensar, ordenar la ropa, lavarla, secarla, organizar la alacena, el refrigerador, pero por ahora tengo que desayunar, y cuento con 20 minutos para hacer todo eso.

Hice dos emparedados, el otro es para cuando mi hermana despierte. Me lo comí con té de manzanilla, amo el té, es mi bebida favorita, no importa si es frío o tibio, simplemente adoro el resultado de la infusión de agua con plantas. Mientras me devoraba el emparedado veía las noticias. No había nada nuevo, solo más y más violencia, claro y política. No me sorprende.

Ya terminado mi desayuno, miro el reloj, sí justo a tiempo, salgo de casa hacia el Instituto. Llamo a un taxi, y mientras espero, les explicaré un poco de mi vida. Supongo que llega en menos de 20 a 25 minutos. Vivo en un sitio un poco lejano.

Soy Pilar Baen, estoy cursando el último año en mi Instituto, tengo 17 años, mis padres están separados, vivo con mi madre, nos llevamos bien, hay confianza, con mi padre la relación sigue igual de estable, se separaron desde que era muy pequeña, no tengo secuelas de ello, pero para mi hermana Emily, fue un golpe bajo, ver como papá se iba de la casa formando una nueva familia sin nosotras fue demasiado para ella, la comprendo. Le costo mucho volver a confiar en él, en cualquier persona, creo que sigue teniéndole rencor, bueno, muy en el fondo de su ser, en su inconsciente quizás. 

Sigamos, suelo ser muy independiente, bueno hasta donde pueda sin tener trabajo (sigo en busca del empleo de medio tiempo ideal, nótese mi exigencia) no ocupo a mis padres casi nunca, sé que mamá tiene gastos y por ello, yo cuido y aseo la casa. Hago la cena, el desayuno para Emily, no para mamá, ella hace el almuerzo antes de irse a trabajar, entra en la tarde al trabajo y sale aproximadamente a las 1 o 2 de la madrugada, es gerente de un bar. Yo tenía que estar en casa antes de que ella se fuera, porque debía cuidar a mi hermana, aunque para mi ya era tiempo de que supiera cuidarse sola, no solíamos dejarla mucho tiempo, tendía a meterse en problemas con: familias, vecinos, compañeros, profesores, animales, casas, edificios, es decir, todo. Emily tenía una vida muy interesante.

Me considero una chica algo controladora, necesito tener calculado el tiempo, no soporto los eventos inesperados, no disfruto trabajar bajo presión, pienso siempre antes de actuar. Un aspecto en mi vida al que más le invierto mucha atención son los sentimientos. Inteligencia emocional sería mi segundo nombre, bueno, quizás Lady control. No permito que cualquiera tenga el poder de controlar lo que puedo llegar a sentir. No estaré en el piso por nadie.

En fin, ya llego el taxi, luego continuamos. Miro el reloj, 15 minutos, mierda, calcule mal.

Puedo ver cuan inmenso es mi Instituto, dentro de 6 meses saldré de aquí y aún no sé qué estudiaré en la Universidad, es algo que debo pensar bien, quizás hoy cuando llegue a casa investigare sobre las profesiones, tal vez entre a una página de test vocacionales, puedo hablar con mi mamá, es excelente consejera, ya me esta entrando la inquietud, qué sucede si no existe profesión para mi, bueno, creo es algo improbable, pero estoy en negación. No quiero vivir una vida trabajando en algo que no me apasiona, no me quiero perder en la cotidianidad. ¿Sería mucho pedir amar lo que hago?

Estoy segura que son 30 minutos a mi Instituto con tranques. Hoy no había tranques.

Uno de mis choferes privados gracias a las agencias de taxis, llamó mi atención, le di el costo del viaje, me bajé rumbo a mi clase. No espero nada de nadie, me refiero a que no espero a alguien que me abrace o me bese en la mejilla diciéndome te extrañe este largo fin de semana, ¿saben por qué? porque no tengo amigos. Tengo compañeros, muchos son agradables, cada grupo, tiene algo que los define, no existen populares, para mi solo están los más sociables o extrovertidos, aquellos que todos conocen, porque son divertidos, visten bien, son físicamente agradables, están en muchas actividades, y aquellos que no hacen mucho para resaltar o simplemente pasan desapercibidos. Pienso que hoy día eso se mide por los seguidores en redes sociales, pero no pretendo entrar en detalles.