The Story Of Us ♥

Decepcionada

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Cuando abrí los ojos, de nuevo me llegó la ilusión de que el estuviera aún a mi lado, juntos como si nada más importara. Pero no. El ya no estaba y lo único que me quedaba por hacer era continuar como si nada hubiera pasado. Solo me quedaron sus recuerdos de la noche anterior. Sus besos y sus abrazos me llevaron al cielo, hacia otra galaxia mucho mejor que ésta.
¿Es que acaso fue un sueño? ¿Y si todo lo que ha pasado fue un sueño y el solo es mi amigo, o seguimos peleados? No, no quiero pensar eso. Sé que esta mal lo que estamos haciendo, pero no quiero dejarlo, no quiero dejar de sentirme así de especial, como únicamente el sabe hacerme sentir.
Sigo pensando eso mientras me pongo un pantalón azul y una blusa amarilla a juego con unos Converse para ir a clase. Cepillo mi cabello y salgo a esperar a Sheyla.

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Narra Nicola
Cuando me desperté la vi ahí, a mi lado. Con una leve sonrisa en los labios, serena y relajada. No puede existir algo tan bello en este mundo, aun no lo creo y la tengo justo en frente de mí. Ella. Angie. ¿Por qué ella? Es decir... en todo el tiempo que llevo de conocerla, (debo recalcar que en si, es toda la vida) no me había sentido igual que ahora.
Tengo a Francesca, la chica que siempre he deseado tener, es toda para mí y no me siento completo. No me siento bien junto a ella. En cambio con Angie todo es tan divertido y tan tranquilo al mismo tiempo... me estoy volviendo loco.
Busqué una hoja de papel y le escribí: "Tu y yo... Sábado... palomitas en el cine a las cuatro. No lo olvides". Salí rápidamente de su habitación hacia la mía para prepararme a ir a clases, no era muy temprano y prometí a mis padres ya no irme tan tarde. Creo que ya no lo voy a cumplir. No me gustó dejarla ahí, a Angie sin avisarle que ya me iba, pero tampoco me gustaría despertarla y borrar esa sonrisa de su rostro.

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Pasaron las clases rápidamente y Angie no fue a ninguna. Resoplé de cansancio cuando terminó la última hora, metí unos libros a mi casillero y me di la media vuelta para irme directamente a casa. Hoy no estoy de humor para hablar con nadie, pero ellos parecen no captar mi estado de ánimo porque siento que alguien me toma del brazo. Volteo bruscamente y me encuentro con la sonrisa de Francesca. No hay nada con el poder de hacerme sentir mejor que esa sonrisa.

-Hola chico extraño- dijo aún con la sonrisa en la cara- ¿Por qué no fuiste a desayunar conmigo hoy?
-Lo siento, es que no me he sentido bien.- contesté bajo de ánimos.- Lo siento, hoy no podré llevarte a tu casa. Tengo que pasar por Jaz a casa de una amiga de mamá.
-Está bien, pero nos vemos el sábado a las tres de la tarde en el centro comercial. Te tengo una sorpresa.- me dio un beso y con la misma sonrisa, se aleja.-

No hay nada mejor que la sonrisa de Francesca... pero luego recuerdo a Angie su piel, su aroma, su sonrisa al dormir, sus besos... y de pronto ya no estoy seguro de nada.

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Sábado. Mi aniversario con Francesca. Ahora entiendo a las chicas cuando dicen que no tienen nada que ponerse para un día especial. Esta vez yo estoy igual con la ropa. Opto por algo normal, camisa negra con cuello en "V" y un pantalón del mismo color. No estoy de luto, pero es lo mejor que encontré. Unos Vans iguales de color y estoy listo.

Cuenta Angie
Hoy es mi cita con Nicola en el cine. Me alisto bien. Un pantalón morado, una blusa blanca con un saco de mezclilla. Unos zapatos sin tacón color morado, pelo alisado y del perfume que se que le encanta. ¿Quién sabe? Todo puede pasar.

Cuando llego al cine, me siento en una de las mesas esperando a Nicola. Checo la hora y son las cuatro con veinte. Llegué un poco tarde. Me pongo a rebuscar a Nicola por todo el lugar y ni rastro de él.

Cuenta Nicola:
Francesca se tardó casi una hora en llegar. Se ve hermosa. Fuimos a comer en su restaurante favorito y después paseamos por el lugar. Es divertido estar con ella. Esta vez optó por traer zapatos sin tacón, lo que me impresiona.
Llegué a dejarla a su casa y antes de bajarse me dio un beso lento y tierno. Ella es así. Tierna. Me gusta.

-Lástima que Angie no quiso ayudarme a elegirte un regalo- dijo ella- ¿Pero esto es más que suficiente no?
-Si, claro...

¡Mierda! Olvidé por completo a Angie, nuestra cita. Francesca dijo adiós y yo al ver que desaparecía detrás de la puerta, pisé el acelerador mientras marcaba rápidamente hacia el teléfono de Angie.

Cuenta Angie
Estuve cerca de hora y media ahí, esperando. Sola, sentada en la mesa como una total estúpida. Suspiré por milésima vez y me puse de pie. Me largo. Me voy a casa.
Después de un largo camino sintiéndome como basura, llegué a casa y me puse a leer un libro. No estoy enojada, no estoy triste... por alguna razón sabía que lo haría. Es decir... hoy era el aniversario de el con Francesca y claro, lo olvidó. Pero eso no justifica lo que me hiso. Lo necesito, estoy completa cuando está a mi lado. Pero me hace más daño que beneficios. Esto no va a funcionar.
Estoy a punto de quedarme dormida cuando mi teléfono suena con la melodía que solo me avisa que es él. Me quedo viendo la pantalla varios segundos y la llamada termina. Estoy a punto de dejar el celular en mi buró y vuelve a sonar de nuevo.

Continuará...