𝐸𝓃𝑒𝓇𝑜
Tauro siempre ha sido el tipo de persona que esconde sus sentimientos para no salir dañada; el amor que siente hacia su mejor amigo, Escorpio, no es correspondido.
Escorpio, en cambio, intenta alejar sus sentimientos por ella.
Por este...
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Narra Tauro:
- Tienes que dejar de hacer eso, Escorpio.- le digo aun mirando el suelo con el rostro serio mientras que caminamos.
A pasado una semana desde que Escorpio y Virgo rompieron, todo por culpa de un mal entendido, o eso he escuchado por el instituto.
- ¿Por qué dejarlo?- me pregunta él como si fuese tan obvio. Lo miro de reojo, frunciendo el ceño.
Me mira de la misma manera, provocando que ambos tengamos uno de nuestros típicos enfrentamientos de miradas asesinas.
- ¿Vas a estar engañándola siempre?- le pregunto aun sin romper el contacto visual.
- No estoy engañándola, que yo sepa fue ella quien me engaño a mí. Yo solo he decidido ir a por otra presa.- dice ahora sonriendo de lado.
Escorpio había visto, hace una semana, como Virgo y Sagitario se besaban delante de todo instituto. Presiento que no lo ha sido un buen golpe para él, aun que no me lo diga.
Puede que no sea de esos chicos que hablan de sus sentimientos, y que en vez de hacerlo, se lo guarda para aquellos que si merecen su atención y sus opiniones más profundas.
Y ahí, es cuando entro yo. Su mejor amiga, esa soy yo. Solo una "mejor amiga", a la cual también puede substituir cuando quiera. Pero, eso aun no ha sucedido y estaré aquí para bajarle esos humos durante un buen período de tiempo.
Harta de escuchar como me habla la voz de su ego, aparto la mirada y empiezo a caminar más rápidamente, dejándolo solo. Empieza a llamarme a gritos desde atrás, pero no le presto atención y camino con más rapidez.
Al entrar en la clase diviso los primeros asientos que encuentro, empezando desde el fondo. Me siento dejándome caer junto a otra silla vacía.
Al sentarme me doy de cuenta de que Escorpio aun no ha llegado, por lo que lo busco con la mirada por toda la clase, hasta encontrármelo sentado junto a Libra, la cual ríe animadamente.
Frunzo el ceño provocando que un dolor de cabeza me venga de repente. Dejo de mirarlos y me cruzo de brazos, haciendo que tome una posición un tanto infantil.
"Libra es muy guapa. Seguramente Escorpio intentará ligar con ella." Pienso. Eso no me calma, si no que aumenta mi dolor de cabeza. "Que pena que a Escorpio no le guste las chicas tan altas." Pienso de nuevo sonriendo de lado.
"Que malvada eres, Tauro." Grita mi inconsciente asustado.
Los segundos pasan y sigo sola en esta mesa, junto a una silla vacía. Una ligera ilusión de que Escorpio se levantará y vendrá a sentarse junto a mí se me pasa por la cabeza, pero eso nunca pasa. Por mucho que me duela admitirlo, Escorpio no despreciaría una nueva oportunidad de conseguirse a otra chica.
