Tauro y Escorpio

[ Capítulo 14 ]

Narra Tauro

La última clase de la mañana se me hace eterna.

Tengo un revoltijo de mariposas en el estomago, danzando torpemente, al igual que siento sudores fríos en la espalda. Cada vez que pienso en lo que voy a decirles, se me crea un nudo en la garganta. Supongo que el miedo a meter la pata no se va a ir por el momento, y también está el hecho de que no soy alguien que expresa sentimientos así como así. Pero, no me queda opción. No puedo dejar que esto continué. Debo dejar el pasado enterrado, para construir un futuro.

"No pienses tanto, solo hazlo." reflexiono, adoptando una firmeza en mis decisiones, que no quiero que se vaya.

Miro el móvil por debajo de la mesa, contemplando la pantalla para distraerme. Lo guardo y vuelvo a mirar hacia delante. Al hacerlo observo la espalda de Géminis delante mía.

En esta clase no lo tengo al lado, ya que cada uno tiene un compañero desde el inicio del curso. Escorpio, está mucho más adelante, junto con Sagitario, quien está profundamente dormido. Al menos él si tuvo la suerte de sentarse con alguien "normal". Yo, en cambio, tengo una barbie rubia teñida al lado mio.

Es desesperante. Hasta un árbol sería mejor compañía.

Ruedo los ojos, mientras que me apoyo en la mano derecha. Elevo la mirada observando lo que hay más allá de la cabeza de Géminis. Él es bastante alto. Unos segundos que le presto atención al profesor, me dan para reflexionar sobre lo peculiar que es su letra.

Al sonar el timbre, todos empiezan a recoger más rápido que nunca. "Parece como si fuera viernes, pero en realidad aun es lunes." pienso.

Recojo las cosas con la misma rapidez para luego desaparecer por la puerta.

Camino hasta salir del instituto, sin apenas haberme cruzado con alguien y que me hiciese caer o que me detuviese. Algo extraño, ya que es bastante peculiar que algún alumno de algún club te detenga en medio del pasillo para hablar de su magnifico club. Al único club que me apuntaría sería el que tuviese como fin dormir toda la tarde.

Salgo de instituto caminando como un rayo hasta llegar por fin a la parte de atrás del instituto, donde hay un intento de parque infantil.

En su momento era un parque infantil, pero ahora mismo parece un conjunto de estructuras pintarrajadas oxidadas. Vamos, que no es un parque infantil ni mucho menos.

Me dejo caer en un banco, el cual también esta cuidadosamente pintado. En su momento me habría dejado la espalda de algún color, pero ahora al haber pasado más de dos meses, ya no ocurre eso.

Suspiro para luego concentrarme. Me hecho hacia delante, dejando mis codos apoyados en mis piernas para así dejar que mi cabeza descanse en mis manos. Miro el suelo con el ceño fruncido mientras que espero.

...

Pasan más de 20 minutos, y ninguno de los dos aparece. Me extraña, ya que ahora mismo no hay ni un alma caminando por el instituto. Bueno, mentira, estoy yo.

"No puedo creer que se hayan ido." pienso frunciendo el ceño.

Me levanto con la ira a flor de piel. Ahora mismo los veo y les digo cuatro cosas. Unas de las cosas que más detesto, y Escorpio lo sabe perfectamente, es que me hagan esperar. Pienso que este tipo de gesto es como si me estuviesen ignorando.

Al levantarme, me encuentro con que dos pares de pies corriendo hacia mi.Detrás de esas pisadas, escucho como Escorpio me grita, llamándome. Me giro para mirarlo y en segundos Escorpio cambia su expresión serena, por el ceño fruncido. Claramente, no tengo intención de darle las buenas tardes, en cambio, tengo ganas de gritarle.

- ¿Se puede saber por que llegáis tarde?- pregunto una vez que han llegado. Escorpio me mira serio, mientras que Géminis desvía la mirada. Mi voz suena dura y eso es lo que intento. Me han dejado 20 minutos aquí, sabiendo que eso me molesta y más cuando es hora de comer. No se juega con el horario de una torita, no señores. Es puro peligro.- ¿Vais a contestarme?- inquiero como si fuera su madre.

- Estábamos en el castigo.- contesta Géminis rápidamente.

Observo a Escorpio, quien se rinde y relaja la expresión de la cara. Suspiro para luego relajarme también.

- Esta bien.- digo. Un silencio se extiende por el ambiente y lo rompo.- Tenemos que romper esta burbuja.- comento. Ambos me miran confundidos.- Es estúpido que vosotros os peléis cada vez que uno de vosotros está conmigo. No soy un premio.- confieso.

Géminis aparta la mirada, al igual que Escorpio. Pero a diferencia del primero, este aprieta la mandíbula.

- Tienes razón, esto es un estupidez.- confiesa Géminis.

- Nunca me ha gustado verte a su lado, nada más.- dice Escorpio.

Lo miro elevando una ceja, como si estuviese diciendo con la mirada "¿de que vas?". Ambos captan mi mensaje.

- Esto tiene que terminar, chicos. Soy amiga de ambos, no soy de nadie. Y aun siendo novia de alguien, no quiero que me marque.- sigo. Géminis asiente acompañado de Escorpio.- ¿Algo que objetar? Luego no quiero malos rollos.- pregunto.

- ¿Por qué...por qué no te gusta que esté con ella?- pregunta Géminis dudoso.

Escorpio reacciona.

- No quiero que ella se separe de mi lado.- susurra.

Mis mejillas cogen un color rojo intenso, las cuales oculto mirando hacia otro lado. Carraspeo atrayendo su atención.

- Sé que en el pasado hice cosas que hicieron daño a Tauro, pero me arrepiento de ello. A parte de nunca tuve intención de ocupar el sitio que tú tenias. Tauro siempre me ha dejado claro que nadie ocupará ese sitio. Te aprecia mucho.- confiesa Géminis.

- Cada uno de vosotros tenéis un sitio especial a mi lado.- Les miro con una sonrisa en el cara.- Nadie ocupará vuestro lugar.

Géminis sonríe.

- Supongo que desde lo ocurrido, tú has ganado más puntos.- dice Escorpio.

- No, Tauro siempre ha estado pendiente de lo que pasaría. Le ha dolido que no estuvieses para ella, pero yo nunca he querido ocupar tu lugar.- sigue diciendo Géminis.

- Lo siento.- susurra Escorpio.

Géminis sonríe ante su gesto. Se acerca a Escorpio, para luego extender su mano. Escorpio hace lo mismo y la estrecha con la suya, dando por zanjado el tema. Sonrío por los dos.

- Ahora me permitirás decirte que en ningún momento me ha atraído Tauro.- confiesa Géminis. Escorpio frunce el ceño, al igual que yo.- Soy gay.- finaliza.

Abro los ojos en expresión de sorpresa. En cambio, Escorpio sonríe ampliamente.