𝐸𝓃𝑒𝓇𝑜
Tauro siempre ha sido el tipo de persona que esconde sus sentimientos para no salir dañada; el amor que siente hacia su mejor amigo, Escorpio, no es correspondido.
Escorpio, en cambio, intenta alejar sus sentimientos por ella.
Por este...
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Narra Tauro
La música llena mis oídos, mientras que juego con las manos inquieta. Ahora que tengo novio, algo que me parecía imposible, todo me inquieta. El hecho de que alguien me demuestre su amor en público se me hace algo extraño.
Siempre observaba a las demás parejas, deseando obtener eso que ellos tenían. Pero, ahora que lo tengo, se me hace extraño. Digamos que me había imaginado que Escorpio no sentiría esto por mi y que acabaría sola.
Supongo que nunca creí en los cuentos de hadas, aun que me los han contado una y otra vez sin parar de repetirme y recalcarme que siempre aparece un príncipe azul.
Lo que pasa, es que ellos no contaron con que mi pequeña cabeza de niña de 5 años, cambiaría radicalmente cuando llegará a tener más conciencia.
Nunca he buscado un chico de ojos azules, de cabello rubio, de radiante sonrisa y mucho menos, que me salvase de un terrible fin. Simplemente, buscaba a aquel chico real,quien me hiciste ver el mundo desde otra perspectiva. Y Escorpio sí lo hace.
Aun que, no puedo negar que yo haya estado en apuros y él me haya salvado, como un príncipe azul. Pero, yo nunca he sido una princesa, solo alguien que ama comer y que lee cosas reales.
Dicen que mi signo, Tauro, es un signo realista. Y acierta en ello, ya que casi me doy por vencido aquella semana donde Escorpio no me hablaba. Sin embargo,mi signo también es calmado y siempre espera.
He esperado al momento adecuado y ahora, todo parece una de esas novelas de adolescentes.
- Tauro, ¿vamos?- me dice Escorpio delante mio.
Sonríe ampliamente, enseñando una hermosa sonrisa. Asiento mientras que dejo la música a un lado para vivir la realidad que ahora amo.
Al levantarme, siento como la mano de Escorpio atrapa la mía y eso hace que la hermosa sensación que llevo sintiendo desde el momento que ambos decidimos ser algo más, aumenta por segundos.
Sonrió inconscientemente, mientras que agarro con más fuerza su mano y dejo que mi cabeza se apoye por unos segundos en su hombro. Lo miro de reojo, observando sus ojos posados en la nada y su rostro tranquilo y sereno.
Al poco de hacerlo, me mira de reojo y sonríe.
- ¿Qué miras?- me pregunta divertido.
- Lo hermoso que eres.- susurro.
Escorpio sonríe ampliamente, para luego detenerse en medio de la calle, girarse hacia mi y depositar un tierno y rebelde beso en mis labios.
