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–No tío, aún no hemos tenido sexo– mi tío y su obsesión con el sexo.

–¿Cómo es eso posible? Se conocieron hace más de tres semanas.

–Tío, ese es el punto.

–Por favor. Tu tía y yo nos acostamos la misma noche en que nos conocimos. Eres demasiado conservador.

Quizá tiene razón. Pero, creo que debo dejar que las cosas fluyan.

–No es eso tío. Simplemente no se ha dado una oportunidad. Y eso no es exactamente lo que quiero de ella. La quiero... la quiero de verdad. Solo estoy esperando que llegue el momento.

–Bueno, tres semanas son más que suficientes.

–Nunca hemos estado lo suficientemente en privado.

La realidad es que sí. Pero, no había sido el momento.

–Bueno, ya llegara ese "momento"– se burló.

Mi tío es demasiado burlón. A veces ciento que es menor que yo.

–Nos vemos luego, ¿sí? Voy a bañarme.

–Perfecto. Llega temprano– ahora se ha puesto serio. Siempre quiere que llegue lo más pronto posible a su casa.

–Si tío. Nos vemos.

–Adiós.

Termino la llamada.

Javy me está mirando desde la cocina. Yo estoy sentado a la barra.

–Sabes... te entiendo...– dice.

–¿Qué?

–Zara y yo tardamos un mes. No quise apresurar eso. Ella es diferente.

Al menos mi mejor amigo me entiende.

–Lo sé. Te entiendo perfectamente– hay silencio por unos segundos.– Me voy a bañar. No quiero hacer esperar a Alice.

Javy asiente y luego se dirige a la sala.

–Mi domingo será de video juegos– anuncia mientras yo me levanto.

–¿Con Zara?– pregunto extrañado. Que yo sepa, a Zara no le gustan los video juegos.

–No. Pasará el día con unas primas.

–Que mal por ti.

–No, la realidad es que no está mal un día para mí y mi Play Station.

Es cierto, desde hace mucho que no lo veo jugando, y el pasaba horas, incluso perdía días enteros en esa consola. Cosas de "gamers", pero, Zara y el Sr. Gonzales lo han cambiado todo.

–Pues, espero que pases un lindo día con tu otro amor.

–Créeme, será tan placentero como un orgasmo después de seis meses en sequía.

Me hecho a reír, y me dirijo al baño.

Después de pasar por Alice, nos dirigimos al pueblo de Orocovis.

–¿Alguna vez has ido?– le pregunto.

–He ido varias veces. La última vez fui a "Toro Verde".

Rosas Blancas y CaféDonde viven las historias. Descúbrelo ahora