Capítulo 19

966 67 21
                                    

(Rated M)

Emma abrió el cuaderno de Henry y se encontró con una nota que no esperaba. En el colegio les estaban pidiendo a los padres de los niños que vayan a una clase a contar sobre sus trabajos. Emma sintió que algo se partía en su interior, siempre lo sentía cuando se trataba sobre temas de padres porque Henry no tenía un padre. Ella en algún modo se sentía culpable de que Henry no tenga un padre presente en su vida, se sentía culpable por haber confiado a Neal y se sentía culpable de que Henry tenga que cargar con ese dolor cada vez que alguien intentaba conocer algo sobre su padre.

- Peque, no me contaste lo de la mañana de padres que va haber en el colegio. – Dijo ella sirviéndole un plato de comida.

- Ah, cierto. – Dijo él despreocupado. – Lo había olvidado. – Comentó agarrando el plato de comida.

- ¿Queres que vaya yo? – Ofreció ella. – No seré un padre, pero soy una madre y tengo un trabajo. Puedo hablar de mi trabajo. – Explicó ella.

- No, no hace falta. – Rechazó él. – Le pedí a Killian y él dijo que si. – Informó y luego se llevo un bocado de comida a la boca.

- ¿A Killian? – Preguntó ella escupiendo el agua que estaba tomando.

- Si, a Killian. – Respondió él.

- ¿Y dijo que si? – Preguntó ella algo molesta.

- Si, dijo que si. – Aseguró él.

Emma estaba enojada. No podía creer que había pasado algo como eso y ella no se había enterado. ¿Desde cuándo Henry y Killian arreglaban cosas a sus espaldas? Se sintió furiosa, como si la hubieran traicionado. Sabía que no tenía sentido nada de lo que se estaba planteando, pero era lo que sentía y no podía evitarlo. Por eso decidió dejar a Henry en lo de Jefferson, con la excusa de que tenga un pijama party con Grace, y se fue a casa de Killian.

- Hola Emma. – Dijo él abriendo la puerta sorprendido. - ¿Qué haces acá? – Preguntó con una sonrisa.

- Tenemos que hablar. – Informó ella y entró a paso firme a la casa.

- ¿Pasó algo? – Dijo él notando el estado en el que se encontraba ella.

- ¿Por qué me hiciste esto? – Preguntó ella mirándolo acusadoramente.

- ¿Qué hice? – Preguntó él sin entender.

- No te hagas él que no sabes. – Reprochó ella cruzándose de brazos.

- Si no me decís que es lo que hice, no puedo saber de lo que estás hablando. – Dijo él comenzando a frustrarse con la situación.

- Aceptaste ir a la mañana de padres en el colegio de Henry. – Dijo ella seriamente.

- Si, acepté. – Dijo él recordando cuando Henry se lo pidió.

- ¿Por qué aceptaste? – Demando saber ella.

- Porque Henry me lo pidió. – Respondió él honestamente.

- ¿Vas a aceptar cada cosa que Henry te pida? – Preguntó ella irritada.

- No. – Respondió él. – No entiendo estos planteos, Emma... - Comenzó a decir, pero ella lo interrumpió.

- ¿Por qué no me lo consultaste? ¿No creías que mi opinión valía en el asunto? – Cuestionó ella comenzando a levantar la voz y caminando de un lado a otro. - ¡No eres su padre Killian! – Explotó.

- ¡¿Crees que no lo sé?! – Preguntó él enojado porque las reacciones de ella lo habían agarrado desprevenido. – Yo no estoy intentando reemplazar a su padre, ni nada del estilo. Solo accedí a algo que me pidió. ¡¿Por qué tenes que armar tanto drama?! – Explotó también.

New York City SerenadeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora