17. "¡Ya basta!".

17K 1K 21
                                    

                  

17. "¡Ya basta!".

|Narra Megan|

Sabía que mi hermano no había tenido una noche tranquila. Siempre se levantaba temprano. En parte me alegraba por él. Por ambos. Por otro lado, hacerme la idea era un poco asqueroso.

Me acerqué a Ethan y le di la pequeña mochila azul de Nick.

-Toma, por si se te olvidaba que tienes un hijo. –Me miró mal y rodó los ojos-.

-¿Qué deduces? –Dijo con un tono suave-.

-Nada, ¿Qué podría estar pensando? –Sonreí sin poder evitarlo y me di la vuelta para ir por Nick-.

-Yo no... estaba con Mia. –Dijo-.

Claro, eso le había dicho por teléfono. La verdad no me molestaba, de hecho me alegraba por él. Lo único que me molestaba era esto:

-No me trajiste mi pantalón negro. –Le guiñé el ojo y me vio sorprendido y sonrojado. Se rascó la cabeza y estaba a punto de justificarse, pero lo corté con mis palabras-. Hermanito, no me molesta, me alegro por ti. Solo no te desconcentres tanto.

°

|Narra Ethan|

Llegué a la casa con Nick, luego de ir a comprarle un helado. Abrí el apartamento y lo encontré en completo silencio. ¿Se había ido?

-¿Mia? –Pregunté alto, con el ceño fruncido-.

Nick había corrido a mi habitación. Lo vi al fondo del pasillo y me calló poniendo un dedo en sus labios. Me acerqué y encontré la habitación acomodada y a Mia durmiendo boca-abajo encima de las cobijas perfectamente estiradas. Sonreí y me acerqué en silencio. Me agaché a la altura de Nick.

-Despiértala suavemente. –Le susurré y el asintió emocionado-.

Nick se subió a la cama con cuidado y la abrazó por la espalda, no pude evitar sonreír.

-Despierta, Mia. Vamos a almorzar. –Le susurró cerca del oído-.

Mia se removió sintiendo el peso de Nick encima. Abrió un ojo y lo vió. Sonrió y nos miró. Nick se quitó de encima de Mia con una sonrisa viéndonos a ambos.

-¿Cómo estás, dormilona? –Pregunté acercándome-.

Dejé un beso en su boca y luego alcé a Nick para bajarlo de la cama.

-¿Cuánto dormí? ¿Hace cuánto llegaron? –Dijo adormilada, sentándose en la cama-.

-Acabamos de llegar y no tengo ni idea de cuánto dormiste.

-Duraron mucho. –Frunció el ceño-.

-Mi papi duró mucho en ir a la casa de mis abuelitos. –Dijo Nick cruzándose de brazos. Mia se mordió el labio sonrojándose, yo reí-. Voy a jugar, papi. –Dijo antes de salir del cuarto al suyo-.

Se acercó a mí poniendo sus manos en mi pecho y poniéndose de puntillas para besarme. Aún era más alto que ella así que me tuve que inclinar.

-Veo que te pusiste algo lindo. –Dije en sus labios-.

-Pensaba salir. –Dijo guiñando un ojo. Fruncí el ceño-. Contigo, tonto. –Me besó mordiendo mi labio, gemí-.

-Nick está aquí. –Sonreí travieso en su boca-.

-Lástima. –Dijo de manera seductora en mi cuello-.

Le mandé señales a mi miembro para que no hiciera ningún movimiento.

Papá de Repuesto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora