Save my heart (Harry Styles)

Capítulo 16

-¿Te apetecería conocer a mi madre?-pregunté temerosa de oir un no. Aunque si lo decía lo entendería.

-Me gustaría conocer a mi futura suegra.

Lancé una risita y me levanté,alargué la mano para ayudarle a levantarse, pero rechazó mi ayuda.

-Se supone que tendría que ayudarte yo, ¿o no?-dijo alzandome el mentón.

-Supongo.-contesté separándome de él.

Caminé en silencio, Harry iba detrás de mi. Entramos en mi casa y la primera persona a la que nos encontramos fue a mi madre.

-Ho... hola mamá.-balbuceé. Estaba muy nerviosa. Sin embargo, Harry sonreía alegremente, con sus hoyuelos asomando en sus mejillas. Parecía seguro de sí mismo.-¿Te acuerdas de Harry?

-¿El que te engañó?

-¡Mamá! Fue todo un malentendido.-expliqué algo molesta.-Harry, está es mi madre, mamá este es Harry.

-Encantado señora Williams.-Harry se acercó a mi madre y besó sus mejillas, los cuales mi madre correspondió.

-Igualmente señorito...

-Styles.-sonrió y asintió mecánicamente con la cabeza.

-Lo hemos arreglado todo.-dije yo, radiante de alegría. Parecía que me había tocado la lotería, y en parte, había pasado. Harry era lo mejor que me había pasado, nada ni nadie podía arrebatarmelo.

-Has tenido suerte, cariño. Harry es un joven de muy buen ver.

Miré a Harry, él me miraba a mi, con una avergonzada sonrisa en los labios.

-Me he dado cuenta.-respondí sin dejar de mirarle.

Mi madre lanzó una pequeña risa y se dirigió a la cocina.

-Harry.-le llamó.-¿Has desayunado ya?

-La verdad es que no.-sus ojos brillaron.

-Siéntate y come algo.-animó.-Puedo hacer más tortitas.

-Muchas gracias pero no hace falta que se moleste.

-No es ninguna molestia.-habló de espaldas, preparando las tortitas.

Coloqué una mano sobre el hombro de Harry y le invité a sentarse.

-Te ganarás a mi madre.-susurré.

Harry asintió y se sentó, yo me senté frente a él.

-¿Cuántos años tienes, Harry?-preguntó mi madre, colocando un plato lleno de tortitas frente a Harry.

-Diecinueve.-se llevó un trozo de tortita a la boca. -Está muy bueno.

-Dos años mayor que Cecily...-murmuró.-Gracias.

-¿Qué pasa si es mayor que yo?-pregunté entrecerrando los ojos.

-Nada, cariño.-miró el plato de Harry: vacío.-¿Quieres más, Harry?

-No, gracias, estoy lleno.-se llevó las manos al estómago. Se levantó y colocó la losa en el fregadero. Hizo amago de fregar los platos, pero mi madre le hizo apartarse.

-Eres un invitado, los invitados no fregan los platos.

-La próxima vez entonces.-sonrió Harry.-Cuando termine me gustaría hablar con usted.

-¿Conmigo?-repitió confundida.

-Ajá.-comentó y me miró de reojo con una picarona sonrisa en los labios.

-Ven conmigo. Cecily, no te muevas de aquí.-me señaló con el dedo y me encogí de hombros. Me quedé sentada a esperar.

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-Muchas gracias.-oí decir a Harry.

-No hay de que, le encantará.-dijo mi madre con una cómplice sonrisa en los labios.

-Iba sobre mi.-puntualicé.

Ambos rieron y se miraron mutuamente. Harry lanzó una mirada de súplica para que mi madre no contara nada.

Se acercó a mi, todavía con una sonrisa. Me agarró de la mano y me obligó a caminar junto a él.

-Haz la maleta.-sus ojos brillaban de la ilusión.

-¿Qué?-pregunté creyendo que había oído mal.

-Nos vamos de viaje. Hay que aprovechar que todavía nos quedan un par de días para que termine el verano.

Le abracé impulsivamente, le besé y entonces le miré intrigada.

-¿A dónde vamos?

-Es una sorpresa.-soltó una risita socarrona.

-Es muy raro que mi madre te haya permitido que me lleves de viaje. Cuando tengo diecisiete años.

-Casi dieciocho, vas a ser mayor de edad. No podrán prohibirte lo que antes hacían.

Le abracé nuevamente, sin poder creérmelo.

-Gracias, gracias.-dije mientras no podía parar de reír.-¿Qué ropa llevo: de invierno o verano?

-Ambas.

Sonreí y corrí escaleras arriba para empezar a hacer la maleta. Harry subió más calmado tras de mi.

-Al menos podrías darme una pista.

-supliqué de espaldas a él.

-No puedo, es una sorpresa.-se rió y me abrazó por detrás, colocando la cabeza sobre mi hombro.

Me giré en sus brazos y le besé con pasión.

-Estaremos mucho tiempo solos.-dije con una mirada pícara.