Embarazada de Draco Malfoy《EN EDICIÓN》

UNA VIDA JUNTOS

<<Castaña tengo sueño, quiero dormir, deja ese estúpido libro>> se quejó Hyperion.

<<Déjala estudiar, no seas quejumbroso Hyperion>> Scorpius regaño a su hermano.

<<tengo mucho sueño, los movimientos de Hermione no permiten que duerma, deja de leer Hermione por favor>> suplico.

—Deberías de hacerle caso — hablo una voz arrastrada, acortando los escasos centímetros que los separaban.

—Malfoy —Hermione aparto la vista del libro de transformaciones que leía, deteniéndose a observar el caminar elegante y erguido del rubio.

Al igual que ella, Malfoy aun llevaba puesto su uniforme de Slytherin y su fino bolso de cuero negro colgaba de un hombro.

— ¿Porque no me sorprende encontrarte a estas horas en la biblioteca? —Frunció el entrecejo —Dumbledore nos citó a las 18:00 pm en su despacho —observo su reloj —y  vamos tarde —informo mostrándole su caro  reloj de pulsera. Las doradas manecillas marcaban las 18:03 pm.

—Vamos —ordeno abandonando la biblioteca unos segundos antes que Hermione ya que esta se quedó situando los libros en su lugar.

Los dos caminaron por los no tan silenciosos pasillos sin dirigirse la palabra.

<<Pansy está embarazada>> declaro Scorpius después de unos instantes.

— ¿enserio? no lo sabía —dijo Draco sin ningún atisbo de sorpresa.

<< ¿Es tuyo?>> pregunto Hyperion.

<<Tendremos un hermanito>> dijo Scor con una nota de felicidad reflejada en su voz.

Malfoy se detuvo en seco, al llegar  al pasillo que daba a la entrada del despacho de Dumbledore. Una horrible Gárgola de piedra custodiaba ese pasillo.

—no, el supuesto hijo que espera Pansy no es mío, no estuve con ella desde hace 5 meses ¿Cómo saben que está embarazada?

<<Su aura, su olor revela que tendrá un hijo y no cualquier hijo, será un niño poderoso>> predijo Hyperion.

—Pues no es mío, suficiente tengo  con cargar con dos mini –demonios —cucurucho de cucarachas —dijo la contraseña y la horrible gárgola se apartó, dejando al descubierto una escalera en forma de caracol.

La puerta de roble de la oficina de Dumbledore estaba entreabierta mostrando a Harry y Dumbledore de pie al centro de la redonda sala.

—Harry —llamo Hermione entrando a la redonda sala — ¿Qué haces aquí?

Harry giro la cabeza posando sus dos ojos verdes en ella.

—Yo…. —titubeo observando a Malfoy — ¿tú qué haces aquí con él? —señalo al ojigris.

—yo los envié a llamar Harry debemos tratar algunos asuntos —informo Dumbledore —bueno, ya debes irte —lo echo amablemente.

—Si ya me iba —dijo lanzándole una mirada desdeñosa a Malfoy.

—Nos vemos luego Harry —se despidió Hermione antes que abandonara la oficina de Dumbledore.

— ¿trajiste el diario Draco? —pregunto Dumbledore, este extrajo el diario de su bolso negro.

—excelente, los dos pongan las manos en el —ordeno.

Hermione obedeció, pero Draco no.

—Vamos joven Malfoy hágalo —lo animo.