ㅡCAPÍTULO XXXVㅡ

17.8K 1.7K 873
                                    

1 mes después...

ㅡTráeme agua.

ㅡNo soy tu empleado.

ㅡLo eres.- Maldije por lo bajo a JiMin en todos los idiomas que conocía -que no eran muchos en realidad- y recién fui por su maldita agua. JiMin era tan... indecifrable. Nisiquiera yo sabía cómo describirlo, durante todo el mes de reposo que debía tener JiMin, nos habíamos besado siete veces, no era como que las haya contado... pero bueno, ese no era el punto. Habían días en los que JiMin me besaba e incluso acariciaba mis mejillas con sus manos, y cabía recalcar que me sentía en las nubes cuando lo hacía; sin embargo habían veces en las que parecía que yo no existía, que era sólo uno más de sus empleados y nada más. Me lastimaba el que fuera de esa manera conmigo, parecía como si todo es fuese un simple juego para él. Estaba completamente enamorado de ese pequeño ogro gruñon de ojos pequeños ¿Y él sentiría algo más por mi a futuro? Me he hecho esa pregunta tantas veces, pero yo no podía responderla, sólo JiMin lo haría pero temía hacerlo, si no llegaba a decir lo que yo esperaba... destrozaría mi corazón.

Ten.-Le tiré la botella de agua en su estómago y él me miró con mala cara, si le dolió que se aguante. Yo no le hice caso y me quedé parado al lado del sofá en el que él, estaba recostado viendo un partido de Basquet, ¿Ya mencioné que no hacía deportes, no? No entendía nada y JiMin no despegaba ni un ojo del televisor. Mi rutina diaria era: ni bien salía del trabajo, ir a ver a JiMin. Vaya pérdida de tiempo... ¿No me vas a decir nada? ¿Qué tiene de interesante ese deporte? Sólo son un par hombres de más de dos metros corriendo detrás un balón. Que interesante Park.

Bufé algo fuerte para que JiMin siquiera notara que no era el único en su habitación, pero nada. Okey, nunca podré competir contra su amado basquet. Agarré mi mochila y la puse sobre mis hombros, tosí falsamente logrando así irritarlo y que me prestara un poquito de atención.

Ya me voy.

Vale.- ¿Vale? ¿¡Sólo dirás eso!? Fruncí el ceño aguantándome las ganas de darle un golpe con mi mochila por ser tan idiota.

Estúpido bipolar.-Murmuré por lo bajo y salí de ahí berreando y maldiciendo de nuevo. ¿Estás jugando conmigo, cierto? Y yo como el cabezón que soy... te creo todo.

[...]

¡Oppa! .-Mi pequeña TaeYeon saltó a mis brazos ni bien crucé la puerta de entrada a mi casa, de inmediato tuve que quitar la cara rezongona que me estaba cargando desde que salí de casa de JiMin.

Princesa.-Besé su frente sin muchos ánimos y la llevé hasta la cocina, necesitaba beber un vaso de agua.

Oppa... ¿El chico lindo vendrá hoy?

¿Chico... lindo? -La cuestioné dudoso.- ¿TaeHyung?

Noo, JiMin Oppa.

ㅡAh...-Y mi rostro se desfiguró al oirle. No quiero volver a oír su nombre por un par de años. Él es sólo un maldito jugador.- No Tae, él...

¡Jeon JungKook! .-Antes de poder reaccionar, ya estaba tirado en el piso debajo de TaeHyung, le dí un par de golpes para que se quitara de encima pero mi amigo no me hacía caso.

Quítate.

Ñee...-Me sacó la lengua y comenzó a pellizcar mi estómago y caderas, yo no paraba de removerme como un gusano y aún así, eso no era suficiente.- Que mal humor te cargas hoy.

❝in your body❞ | мιηggυк [ƒαηƒιᴄ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora