Egoísta (James Sirius Potter)

Capitulo 17. Sirius

La acalorada discusión que tenía lugar junto a ella fue lo que le impidió continuar durmiendo y la obligo a abrir los ojos.

La luz le daba directa en la cara, calentándola agresivamente.

Sentía el sudor correr por su frente y la sabana, completamente empapada, pegada al cuerpo, incomodándola increíblemente.

-¡Es que solo a ti te puede pasar algo tan estúpido!- escucho y cuando se giró para saber que rayos había pasado se topó con Albus que miraba mal a Rose. -¡Si la Directora hubiese querido que ella se rompiera algo en vez de ponerle una tutora la habría lanzado directamente con una escoba al vacío!

-¡Ya te dije que lo siento!- respondió la chica mientras se pasaba una mano por el rostro denotando incomodidad -¿Cuantas veces esperas que lo repita?- No. La culpa no era para nada suya.

-Albus...- la voz de Gemma apenas fue un murmullo pero logro hacerse escuchar sobre las voces de los primos que discutían que de inmediato se dieron la vuelta para encararla.

-Gemmy- sonrió el chico de ojos verdes mientras se inclinaba sobre ella para encararla. La chica no llevaba los lentes así que le costó algo de trabajo enfocar su rostro -¿Cómo estás?

-Sudorosa- respondió ella sonriente, tratando de relajarlo. -No sé a quién diablos se le ocurrió poner esa lámpara aquí ¡Me siento como en un maldito Sauna!- la carcajada de Albus libro la incomodidad del ambiente. Lucia mucho más tranquilo de lo que ella se había imaginado que estaría.

-La enfermera dice que no es solo la caída- una sombra de furia cruza sus ojos verdes, opacándolos por un segundo y dejando completamente impactada -Dijo que tienes fatiga crónica y que el calor va a hacerte sentir mejor- murmuro el antes de volver a ponerse derecho y encarar a Rose.

-Apenas vea a la directora voy a decirle que...

-Albus- lo llamo Gemma -Yo fui la que le pidió a Rose que se marchara.

-Sigue siendo su culpa- gruño el sin volver la mirada atras -Voy a acusarla.

-¿No crees que esa es mi decisión, Albus?- gruño Gemm haciendo a Albus soltar un gemido de frustración. Aun de espaldas a ella Gemma fue completamente capaz de ver como este se llevaba una mano al rostro y como se la pasaba de arriba abajo de manera desesperada.

-Entonces yo me voy. A veces me exasperas- con esto el chico simplemente llego de un par de pasos largos a la salida, abrió la puerta y la azoto detrás de él apenas salió. Estaba molesto y nadie necesitaba ser súper inteligente para saberlo.

-Te dije que no podías hacer esto sola- murmuro Rose después de un segundo haciendo a Gemma llevar la mirada hasta ella. Lucia totalmente furiosa.

-Cometi mi error y ambas fingiremos que jamás paso- afirmo Gemm mientras se daba la vuelta en la cama y cerraba los ojos. En serio que quería seguir durmiendo -Nadie te acusara, diremos que fue un simple accidente y continuaremos con nuestras vidas... Hare que Albus se tranquilice.

-¿Eso crees?¿En serio crees que puedes?- sonaba totalmente burlona pero Gemm fingió no escucharla, simplemente no tenía sentido discutir con ella porque jamás iba a escuchar lo que Gemma tuviera para decir -Se nota que no conoces a mi primo.

-¡Ya vete!- gruño Gemma y apenas dos segundos después escucho a la chica darse la vuelta y caminar hacia la salida y seguido azotar la puerta tras ella, haciendo temblar el edificio.

Se quedó quieta y en silencio un segundo hasta que un aroma suave y muy conocido para ella la alcanzo, era apenas perceptible en el aire pero ella lo sintió con fuerza. Se sentó sobre la cama de golpe y miro a su alrededor tratando de captar el punto desde el que provenía. No había nadie, estaba totalmente sola.