Capitulo 34

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-Creo que es demasiado- exclamé mientras observaba el hotel que habían reservado. Era muy elegante, y no es que nunca haya estado en un lugar así, pero siempre lo han pagado mis padres.

-¿Esto?- preguntó Alex -Si vamos de vacaciones nos tenemos que dar todos los gustos, sin excepciones- tomó las maletas de su novia y las de Nicolas y empezó a ponerlas en el carrito de equipaje. Me di vuelta para hacer lo mismo con mis cosas, pero ya Julian se había adelantado.

-Gracias- sonreí a este y Julian solo me devolvió la sonrisa.

Se preguntaran cómo ha sido el viaje despues de que me dijera que yo era su dueña, pues, bien. Julian es una persona con la que puedes hablar libremente y eso me encantaba, era una faceta que yo no conocía de él.

-Malas noticias- exclamó Alex quien había vuelto de pedir las llaves de las habitaciones -Solo tienen dos habitaciones disponibles- hizo una mueca de disculpas y se rasco la nuca.

-¿No habían resevado?- pregunté enoja y mi tío negó. Si será idiota.

-Yo puedo dormir contigo- me habló Jenny. Estaba bien, podía dormir con mi mejor amiga, eso sería genial.

-No, yo dormiré contigo- se quejó -Y Nicolas también dormira con nosotros- Lo miré a mi tío con ganas de querer matarlo.

Si será desgraciado ¿Cuándo se habia convertido en alguien tan liberal con su sobrina?

-O sea que tengo que dormir con Julian- dije muriendo de vergüenza, no quería hacerlo, me tendría que ver durmiendo y eso era algo super incómodo para mi.

-Si- inquirió Jenny que podría decirse estaba que saltaba en un pie -A no ser que a Julian le moleste- dijo mirandolo fijamente a Julian. Este por su lado solo miraba hacia al frente.

-No, claro que no- respondió, me miró y me guiñó un ojo. Patalie en mi lugar. Ahora tendria que hacerlo.

-No te pases, Julian- exclamó Alex serio -No, mejor si, anda a dormir con Oriana- le dijo mi tío a su novia. Jenny lo miró furiosa y lo golpeó fuerte.

-Ahora no quiero- dijo enojada tomando las llaves -Mejor que me sigas Alex Sabatini- gritó mientras caminaba.

Alex sin saber que hacer miraba a su novia a mi y a Julian reiteradas veces. Cuando iba a hablar, Jenny vuelve a hablar.

-Y Nicolas también viene con nosotros- avisó e hizo que Nicolas la siguiera sin quejarse.

Mi tío al escucharla cerró los ojos y suspiró lentamente. Podía sentir la paronoia crecer en su interior. Quise reir con todo esto, pero sería para peor. Miré a Julian y este se reia de él sin importarle nada.

-Vamos, Oriana- dijo Julian tomando las llaves de la mano de Alex -Pasaremos una muuuy agradable noche- agregó y mi tío ahogó un grito pero de inmediato se fue hacia su habitación.

-No deberías haber dicho eso- me quejé a su lado -Ahora vamos a tener a Alex a nuestras espaldas siempre- empecé a caminar junto a Julian hasta el ascensor. Al entrar, allí habían dos muchachas de nuestra edad que al ver a Julian se volvieron como locas. Sin descaro una de ellas se colocó detrás de Julian y empezó a hablarle coquetamente.

Ya estaba más que nerviosa, no me agradaba para nada que esas dos chiquillas se acercaran a él. Lo peor es que Julian les contestaba amablemente. No sé si lo hacia a propósito o si no se daba cuenta de nada.

Con las mayores de las fuerzas de mi cuerpo, y seguramente que después de esto querría cortarme la cabeza, hice algo que sabía que alejarian totalmente a Julian de esas niñas.

Mi niñero preferidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora