Mr. Vólkov

C a p í t u l o E x t r a

3 meses después.

ALEXEY

Volví a leer el artículo del periódico con una gran sonrisa donde informa acerca de mi boda con mi ahora esposa, Zoe , Zoe Vólkov.

- ¡Alexsey!, ¿qué tanto lees? -Exclamó entrando del balcón con esa bata roja pegada a su cuerpo que me daban deseo de quitársela.

-El artículo de la boda. -Cerré el periódico y volví a mirarla.

- ¿Enserio? -Asiento.

Ella se acerca y toma el periódico para luego inclinarse en la mesa dejando su precioso trasero a mi vista, le doy una palmada y ella se sobresalta.

-Animal. -Dice aún mirando el periódico.

-De tu especie favorita. -Me levanto y ato el cinto del albornoz.

- ¿Eso crees? -Ella deja el periódico en la mesa y yo me dirijo a nuestra habitación de hotel con ella detrás.

-Sí. -Alzo una ceja en su dirección y me siento en la cama. - ¿No lo soy?

Ella me miro y sonrió, comenzó a caminar sensualmente hacia a mí hasta colocarse en el medio de mis piernas. Acaricié sus piernas con mimos y mordí su cintura a través de la bata.

Seguí acariciando sus piernas, largas y hermosas piernas que son sólo mías.

-Eres hermosa. -Bajó sus labios hasta los míos sin pegarlos. -Gracias por hacerme feliz.

-No tienes nada que agradecerme.

Juntó sus labios con los míos en una danza jodidamente sensual.

A veces no entendía el por qué sentirme tan jodidamente bien con ella, el por qué de mi corazón latir rápido y furioso cuando ella está cerca, hasta que entendí que ella había conseguido enamorarme como nadie más lo había logrado.

La senté en mis piernas sin despegarnos del beso mientras su lengua buscaba la mía y viceversa.

-Amo que seas mi bebé, mi niña. -Acaricié su mejilla.

- ¿Por qué una niña?

-Eres adorable, Zoe, y por eso eres mi niña. -Besé sus labios antes que dijera algo más y al minuto me separé.

Ella se quedo mirándome para luego bajar la cabeza y negar.

- ¿Qué pasa? -Le pregunté un poco preocupado.

-Estoy embarazada.