El estúpido celular interrumpió mi sueño junto a mi amada esposa, la miré mientras su pecho subía y bajaba en un ritmo pausado y lento. Tomé el celular antes de que la despertara.
—Vólkov. —Respondí sin mirar el celular.
—Sr. Vólkov, es Hernán, es para comunicarle que conseguí la cita con el Sr.Romanoff, pero... —Odio los peros. —Es para ésta noche, en una cena.
— ¿En dónde es la cena?
—En casa del Sr. Romanoff. Aquí tengo la dirección.
—Está bien Hernán, pásame la dirección por mensaje y la hora.
—En un momento.
—Muchas gracias. —Agradecí a mi mano derecha.
—No hay de qué. —Dijo antes de colgar.
Unos besos en mi hombro me sobresaltaron para luego dar paso a la calma.
—Hmmm, estas insaciable... —Dije en un ronroneo.
— ¿Sabes?, estaba pensando mientras hablabas por teléfono, que no hemos ido a un doctor —Me giré y la miré con el ceño fruncido.
— ¿Para?
—El bebé, Alex, el bebé. —Llevó una mano a su vientre y lo acarició.
—Tienes razón, ¿te parece mañana?
—Sí, es perfecto. —Siguió besando mi hombro y yo sólo suspiré.
—Nena, tenemos una cena a la cual debemos asistir. —Me dí la vuelta sujetándola y colocándola encima de mis piernas.
—Entonces ¿nos vamos a bañar?
No le respondí, sólo me puse de pies y caminé con ella en brazos en dirección al baño.
—Supongo que es un sí.
Entré al baño y la dejé encima del lavamanos el cual es largo, preparé la bañera echando algunas que otras sales mientras esta se llenaba. Volví con ella y besé sus labios, su lengua no tarda en corresponder a mis caricias.
—No vamos a tener sexo. —Dije rápidamente, ella soltó un suspiro de frustración.
—Diablos, lo sé. —Su voz sonó a cuando a una niña la reprochan.
La volví a tomar en brazos cuando la bañera ya estaba llena, y nos metí a ambos en ella. Zoe se quedo en la misma posición: abrazada a mi pecho; mientras yo repartía caricias suaves a su cabello, y de vez en cuando a su espalda.
— ¿Como lo llamarías? —Preguntó de repente.
— ¿De qué hablas nena?
— ¿Cómo llamarías a nuestro hijo?
—No lo sé, no quiero adelantarme a los hechos.
—A mi me gustaría que si es niña se llame Alaina Zhenya.
—Es un lindo nombre. —Reconocí.
—Lo sé. —Dijo con algo de orgullo. — ¿Y si es varón?
—Alek. —Dije al recordar el nombre de mi padre.
— ¿Cómo tu padre?
—Sí, ¿no te gusta?—Ella sacó su cabeza de mi pecho para mirarme a los ojos.
—Me encanta.
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Mr. Vólkov
Short StoryAlexey Vólkov y Zoy Bennet. Una historia un tanto...complicada. [PRIMER LIBRO Y SEGUNDO LIBRO INCLUIDO] Todos los derechos reservados. Código de registro: 1801035259352 Código de registro: 1801035259345 Esta totalmente prohibida la copia o adaptaci...