Prohibido

14

La semana se pasó y llegó carnaval. Ninguno de los dos hizo el amago de ir a ver al otro. El orgullo de ambos se lo impedía. Lucas no podía permitirse volver a caer en el pozo en el que estuvo metido desde su infancia, y Aria era demasiado testaruda como para "arrastrarse" de alguna manera a una persona que no le hacía caso.

-¿Qué te queda?-Le preguntaba Gabi desde el cuarto de baño a Aria.
-Las botas.

Cuando Aria terminó de disfrazarse fue hasta donde Gabi se estaba maquillando.

-¡Qué chulo! ¿De qué vas?-Preguntó Gabi mientras se aplicaba sombra de ojos.
-De la Princesa Leia.
-¿Quién?
-La de Star Wars.
-¡Aaaaah! Cómo mola. ¿Estoy guapa? Yo voy de hippie.
-Estás guapísima. Anda, vamos que nos están esperando.

La noche de carnaval siempre se reunían todo el mundo en una plaza donde el ayuntamiento contrataba a un disc-jockey para que pusiera música y la gente pudiera bailar, beber y pasárselo bien.

-Vamos, Lucas, vente con nosotros esta noche. Necesitas salir y despejarte.-Insistía Carlos.
-No sé... No tengo ganas...
-Venga, vente, vamos a la plaza, bebemos un poco y lo mandamos todo a la mierda.
-Está bien, pero sólo un rato.-Le contestó Lucas para que se callara y le dejara en paz.

Media hora después, Aria y Gabi se reunieron con el resto de sus amigos en la plaza, y un par de metros más abajo llegaban Lucas, Javi y Carlos.

La noche para ambos se pasó entre alcohol e intentos de olvido. Aria, no paraba de beber y bailar para intentar distraer su mente, mientras que Lucas bebía, pero en ver de distraerlo, el alcohol hacía que la viera en cada rincón, su cara estaba rodeándole, no se la podía sacar de la cabeza.

-Mira que culo tiene la Princesa Leia.-Le dijo Javi a Lucas.
-Hasta en eso me parece que es ella...-Le contestó Lucas seriamente perjudicado por el alcohol.
-Ey, no pienses en ella, ¿vale?
-Vamos, otra ronda.-Llegó Carlos con tres cubatas en la mano.
-Lo siento, pero esta la necesito entera yo.-Dijo Lucas, y se bebió los tres cubatas seguidos, como si de agua se tratase.

-Tía, me parece que le he escuchado.-Le dijo Aria a Gabi, aunque apenas se la podía entender.
-¡Anda ya! Eso es la borrachera que tienes.-Le contestó la rubia riéndose.
-¿Bailas?-Le preguntó Jose a Aria aprovechando el estado de embriaguez de esta.
-Estoy segura de que mañana me voy a arrepentir, pero sí.-Se agarró de su mano y avanzaron varios metros más hacia donde  estaba el Dj.

Aria escuchó gritar a Gabi, pero no le hizo caso. Lo único que quería era pasárselo bien, y con un poco de suerte no recordar al día siguiente que estaba bailando con el hijo de puta de su ex.

-¡Vamos a bailar! ¡Me encanta esta canción!-Gritó Carlos.

Los tres amigos fueron acercándose cada vez más al Dj, y con ello, a Aria y a Jose. Ni Lucas ni Aria sabían que se tenían tan cerca.

-Aria, estás guapísima.-Le dijo Jose al oído para que le pudiera oír.
-Eres un cara, que lo sepas, Jose.
-Pues entonces estás bailando con un cara.
-Ya lo sé.
-Dame un beso.
-Ni de coña.-Dijo Aria con la lengua trabada.
-Entonces te lo doy yo.

Los labios de Jose se posaron sobre los de Aria. Por un momento se imaginó que era Lucas el que entraba en su boca, pero luego volvió a la realidad e intentó de librarse de los labios de Jose por todos los medios.

-Anda, pues parece que Leia ya ha encontrado distracción.-Comentó Javi al ver a Jose besando a Aria.
-No puede ser...-Dijo Lucas.
-¿Qué te pasa?-Le preguntó Carlos.
-Es Aria. Es Aria, estoy seguro.

Aria por fin pudo quitarse de encima al guarro de Jose.

-¡No vuelvas a hacerlo! ¿¡Me oyes!? ¡En tu vida!-Le gritó muy enfadada y le soltó una bofetada.

Aria tornó sus ojos hacia la derecha y para su sorpresa, descubrió a Lucas mirándola con los ojos bien abiertos. "Tierra, trágame." pensó. Intentó ir hacia él y explicarle lo que había pasado, de alguna manera se sentía en la obligación, pero la desesperación pudo con ella y salió corriendo mientras que dejaba que sus lágrimas abordasen sus mejillas.

Al pasar por delante de él, Lucas salió corriendo tras Aria, que se había refugiado de su vergüenza en un callejón oscuro. Se puso delante de ella, que se había sentado en el suelo, y se arrodilló para verla más de cerca.

-Perdón.-Musitó Aria.-Yo no le quiero. No sé ni porqué he bailado con él...
-No llores.-Le secó las lágrimas con la temblorosa palma de su mano.

En ese momento los amigos de Lucas vinieron a por él para que no hiciera ninguna tontería. Lo levantaron entre los dos y lo cargaron a ambos hombros.

-¿Eres Aria?-Le preguntó Javi.
-Sí.
-Les diremos a tus amigos que estás aquí para que vengan a recogerte.
-Gracias.-Se limitó a responder.