No es un error

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Daniel me miró por un momento, dio pasos lentos y largos hasta llegar a mí y tomarme de las manos, por primera vez no me negué.

- Lamento lo de la otra noche, hermosa- asentí

- No hay problema, ya te dije que lo que digas no es importante para mí, no me afecta- me zafé de sus manos

Todos los chicos observaban la escena boca abierta, miré a Daniel llevaba unos tejanos desgastados azul, junto una camisa del mismo tomo resaltando la suave tinta que recorría todos sus brazos, su cabello está húmedo por lo que supongo se acaba de bañar.

- Estaré alistando el auto- dijo Ian

- Te ayudamos- los demás chicos lo siguieron dejándome a solas con Daniel

Él se volvió a acercar a mí, tomó un mechón de cabello suelto y lo puso atrás de mi oreja un acto muy dulce.

- No contestaste mis mensajes- dijo muy cerca de mi rostro, las ganas de besarlo son muchas, sus labios carnosos piden a gritos que los bese, me abofetee a mí misma por pensar eso

- Estuve ocupada, casi no revisé mi celular- Mentí

- Con ese tal Luke- No me sorprende ni un poco que ya sepa de Luke

- ¿Cómo sabes de el? – Dan sonrió y me guiñó el ojo

- Te investigo, hermosa- sus labios se acercaron a mi rostro me puse tensa al sentirlos en mi mejilla, me sorprendí y a la vez decepcioné, por un momento esperaba un buen beso en los labios

La puerta se abrió de golpe dejando ver a un Ian muy sonriente

- Tórtolos, ya está el auto- ambos le volteamos los ojos y nos dirigimos al auto.

Para variar el auto olía a él, menta y a la loción de Dan, me coloqué el casco, Daniel imito mi acto, arrancó el auto hasta la línea de meta donde cinco autos de lujo esperaban, bajé la ventanilla para sentir un poco de aire, miré al mustang modelo 2016 de un lado, el auto bajo la ventanilla dejando ver a un rubio con sonrisa muy linda, el chico me guiñó el ojo y me sonrió.

- Hola linda, mi nombre es Liam- su tono era un poco arrogante

- Hola- No hay nada de malo en ser amable

- ¿Después de la carrera quieres ir por unos tragos? - sentía la mirada de Daniel quemando mi espalda

- No gra...- la voz de mi compañero me interrumpió

- Aléjate de ella, Smith- el chico rubio solo rio

- Hawking que gusto, pero no me puedo alejar de una chica tan hermosa- Que tipo tan franco

- Cállate, metete con alguien más- Sospecho que estos dos no se agradan ni un poquito

- Nos vemos muñeca- su sonrisa ya no era linda, ahora era de venganza

Por suerte Daniel subió los vidrios

- No le hagas mucho caso es un imbécil de primera-

- Okay Hawking- de repente su semblante cambio y se puso completamente serio

- Jamás me llames por mi apellido, nunca- levanto el tono de voz

- Todos lo hacen, no veo el problema-

- Tú no eres "todos"- Fin de la conversación

Una rubia de pechos grandes se colocó en la pista, llevaba una ombliguera negra un jean gris

La chica bajo la bandera y todos los autos soltaron un enorme rechinado molesto.

Como siempre Daniel gano la carrera, ambos bajamos por la multitud, Daniel tomó mi mano para no desviarme, nos paramos en frente de un grupo de chicas que le pedían su autógrafo y hablaban o más bien coqueteaban con él, algunas me miraban con desprecio de arriba abajo, me sentía incómoda de estar en esta situación, aparte de que no voy vestida acorde la situación, llevo ropa de ejercicio, yo seguí caminando en busca de la salida o de algún lugar lejos de tantas personas, esperando que Dan me siguiera los pasos.

DangerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora