Bye?

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NARRACIÓN DE KATHERINE LEXINGTON

En ese momento sentí que me iba a morir, el aire se me fue y me costaba tanto respirar, el cuerpo me dolía, el corazón me dolía, sentía como si me hubieran arrollado de todas las maneras posibles, y puede que eso me doliera menos que lo que sentí en ese momento. Sospecho que Daniel la estaba pasando igual que yo, ambos no paramos de llorar en toda la semana que estuve en el hospital

Cuando los padres de Daniel llegaron también estaban desconsolados, simplemente fue una noticia que sorprendió a todos, nadie se lo esperaba porque jamás lo venimos venir.

El doctor nos explicó bien claro que fue lo que paso, hubo problemas con mi placenta y por desgracia no se detectó a tiempo, también menciono que en raras ocasiones pasa eso pero que es posible que influyera mi edad, ya que estoy demasiado joven y simplemente mi cuerpo no lo resistió porque no estaba preparado para algo tan fuerte como un bebé. Me dieron vitaminas y suplementos para controlar toda la descompensación que hubo en esos meses.

También nos recomendaron ir con un psicólogo ya que finalmente esto fue un trauma y es importante que se trate antes de que haya consecuencias a largo, mediano y corto plazo, yo comencé a ir a sesión desde que salí del hospital y sinceramente tengo que admitir que la terapia es sanadora y te hace sentir tan bien internamente, sobre todo porque esa persona te escucha, te atiende y jamás te juzga.

Hablé con Verónica (Así se llama mi psicóloga) sobre mi relación con Daniel, ambas hablamos de ese tema por semanas, casi meses y caímos en cuenta que esa relación se comenzaba a volver un tanto toxica para ambos, porque finalmente yo no podía perdonar a Daniel por todo lo que me hizo y también era malo para Daniel ya que él quería una respuesta que no estaba lista para darle.

Después del velorio de nuestro difunto bebé decidí que lo mejor para ambos era alejarnos por un buen tiempo, ambos necesitamos sanar, necesitamos trabajar en nosotros mismos ya que ninguno de los dos estamos listos para estar juntos.

Ambos tenemos demasiadas heridas y cosas que procesar y es algo que simplemente no podemos hacer si estamos juntos.

- Kate, ¿está lista? - Mi madre me sacó de mis pensamientos

- Si, solo dame unos momentos, ya bajo-

- De acuerdo, iré bajando las maletas- Asentí y mire por última vez mi habitación

Decidí que quería alejarme de toda esta vida por un tiempo, así que tomé la decisión de irme todo el verano con mi hermana Regina, dice que el sol, la arena y el mar no hay nada que no pueda curar, me lo recuerda todo el tiempo.

Estando allá veré unas cosas de la universidad, decidí estudiar este año en línea, porque estudiar así es algo tedioso y simplemente no me ayuda a socializar, necesito hacer nuevos amigos y despejar mi mente, es por eso que metí papeles en la universidad de Miami, está cerca de la casa de mi hermana y es una muy buena universidad, tomaré ese verano para poder ambientarme y saber un poco más de ese lugar tan hermoso

Por cualquier cosa también he metido papeles para la universidad de aquí en Seattle, decidí tomar la carrera de psicología, últimamente me he sumergido en esos temas y me parecen maravillosos, creo que son interesantes y el hecho de ayudar a las demás personas me parece algo fenomenal.

Mi madre me ha estado apoyando en todo, estando en el hospital tomé todas mis fuerzas y opté por llamarle, ella estuvo a mi lado en todo el proceso, esa misma noche que le llamé decidió tomar un vuelo y estar conmigo, fue un gran apoyo, me pidió disculpas por todo lo que sucedió y por no estar acompañándome esos cinco pesados meses pero que me juraba por su vida jamás separarse de mí.

DangerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora