Danger

No respira

ANTES DE EMPEZAR ESTE CAPÍTULO QUIERO DECIR QUE DECIDÍ QUE DANGER VA A TENER UN CAMBIO MUY GRANDE DEBIDO A QUE HACE POCO VOLVÍ A LEER LA HISTORIA Y SINCERAMETE NO ME GUSTÓ DEL TODO Y DECIDÍ HACER CAMBIOS PARA QUE LA HISTORIA MEJORARA Y SEA MÁS DE SU AGRADO.

SI SON LECTORES QUE ESTÁN VOLVIENDO A LEER MI HISTORIA ES POSIBLE QUE SE LLEVEN LA SORPRESA DE QUE HA CAMBIADO BASTANTE Y ESPERO QUE ESTAS MODIFICACIONES SEAN DE SU AGRADO.

SIN MÁS QUE DECIR, ESPERO QUE DISFRUTEN LA HISTORIA

ATT: ALEX G.

NARRACIÓN DE KATHERINE

3:07am

Me levante por unos horribles calambres en mí vientre, los brazos de Daniel me rodean la cintura con ternura, volví a cerrar los ojos para poder dormir, tratare de ignorarlo y seguir descansando

3:46am

Los dolores son más fuertes casi insoportables, me giro y puedo ver a Daniel dormir como un bebé, -quizás son solo patadas- me digo a mí misma, trato de pararme para ir al baño.

Por desgracia la habitación no tiene baño por lo cual tendré que salir de ahí, bajé de la cama con cuidado de no hacer ruido, tome la camisa de Daniel ya que estoy en ropa interior. Decido ir descalza ya que el piso no está tan frío, camino hacia la puerta abriéndola sin hacer ruido alguno, los dolores siguen ahí y son cada vez más fuertes

Las luces están apagadas menos la dela habitación de Tessa, ella tal parece esta despierta más no la voy a molestar por unos simples dolores.

El pasillo se me hace eterno he increíblemente grande, incluso parece estar más frío que antes, el baño está más cerca

Estoy a punto de tomar la perilla cuando una punzada se introduce en mi vientre haciéndome gemir en lo bajó de dolor, caí directo al piso, mis piernas no fueron lo suficientemente fuertes para sostenerse y soportar tal grado de dolor, las lágrimas comienzan a salir, estoy preocupada ¿no sé qué pasa? pero esto ya no es normal, trato de pararme, pero me es imposible ya que vuelvo a caer de sentadera, la punzada aumenta haciendo que un grito lo suficientemente fuerte sonara, de repente veo como hay sangre bajando por mis piernas

Todo es borroso ahora, siento las pisadas de alguien y una voz, me gritó internamente para seguir despierta y gracias a dios lo logro a pesar del horrible dolor

- Por dios, Katherine- es Tessa

Escucho como grita a Daniel y a sus papás para que vengan, Daniel es el primero en venir, me carga en sus fuertes brazos, mi cuerpo da pequeños brincos ya que está corriendo, no sé cómo lo hace pero sigue corriendo

- Dan..Duele mucho- fue lo único que pude mencionar

- Amor, respira por favor- va a llorar en poco tiempo

Tessa va a tras de nosotros.

Daniel abre la camioneta de Tessa, me dejan en la parte de atrás, la hermana de Daniel lo obliga a quedarse atrás conmigo para ayudarme. E

Estoy sudando demasiado y no paro de gemir cada vez que una contracción viene, siento como la sangre sigue bajando por mis piernas

- Tengo miedo- cierro los ojos por un momento, tengo miedo por mi hijo

Miedo puro

Es el sentimiento que se apodera de ella mayoría de mi cuerpo, miedo a perder a mi hijo, miedo a que no nazca sano, tengo solo cinco meses, los cumplí hace apenas una semana, quiero que todo esté bien, quiero que nazca bien a pesar de sacrificarme yo, por primera vez siento que amo a mi hijo lo suficiente para entregar mi vida por el

Vuelvo a la realidad

La camioneta va demasiado rápido, Daniel sigue gritando cosas como - Vamos cariño-

-Tu puedes- trata de alentarme lo cual ayuda mucho, con mi mano pálida y temblorosa acaricio su mejilla, la la toma y la besa, está llorando lo sé, trata de hacerte el fuerte pero no lo logra

- Llegamos-

Las puertas se abrieron, pero tardaron un minuto en que me sacaran del auto y me subieran a una camilla, me llevaron a una sala, todo se torna borroso y empiezo a cerrar los ojos

Un par de manos delgadas sostienen mi rostro, abro los ojos con debilidad y veo a una enfermera de ojos cafés miel gritando algunas cosas

- Cariño, no cierres los ojos por favor-

Trataba de obedecerla, siento como la camilla avanza hasta detenerse en una habitación completamente blanca, unos médicos me pasaron a una camilla fija donde midieron mi presión y mis latidos cardíacos

Daniel se coloca a mi lado, siento como una aguja se inserta en mi brazo, pero estoy demasiado débil para quejarme o hacer algo, el dolor no para, nunca ha parado, incluso cada vez es más fuerte, yo solo quiero que termine

- Daniel, te amo- fue todo

Un dolor más fuerte que los demás llego haciendo que gritara como nunca, las enfermeras voltearon hacia mí y corrieron

- Doctor, está perdiendo al bebé - ¿Perdiendo al bebé? Los ojos se me comienzan a llenar de lágrimas y siento como la vida se me va

La enfermera me levanto un poco, sentí como me quitaban mi ropa y me colocaban una bata de tela delgada, me recosté.

- Cariño, todo está bien-

Dicho eso sentí como me pusieron en posición fetal, no me moví en absoluto a pesar del tortuoso dolor de la aguja incrustándose en mi espalda

Cerré los ojos , poco a poco la luz se estaba acabando para mí