Tu me cambiaste la vida - Mariali

CAP. 32

POV LALI

Desperté con una sonrisa en mi rostro recordando la noche anterior.

- Dale, te tenes que ir.

- No, no quiero - pronunció entre besos.

- Si dale, es tarde y mañana tenemos que madrugar para ir a la empresa.

- Puedo llegar tarde, soy el jefe - paró de besarme para mirarme con un toque de picardía.

- Vos sos el jefe, yo no.

- Vos sos mi secretaria y te debes a tu jefe que soy yo y a mis indicaciones. Así que señorita Esposito béseme - tomó con firmeza mi cintura y se acercó a mis labios dispuesto a besarlos.

- Estoy fuera del horario de servicio - apoyé mis codos en sus hombros y despeiné su pelo mientras le sacaba la lengua, oportunidad de distracción que Mariano aprovechó para besarme.

- No enserio te tenes que ir, nos vemos mañana - le di un pico y entre besos lo lleve hasta la puerta.

- Que feo me parece que me corras así de tu casa Espos.

- Ay no te corro, lo que pasa es que es tar... - no me dio tiempo a terminar que ya estaba volviendo a tener sus labios sobre los míos.

- Ya lo sé tonta, buenas noches, descansa y soña conmigo.

- Buenas noches. Soña con los angelitos y si me ves me saludas - Mariano soltó una carcajada y se acercó a mí para aferrarse a mi cuerpo y pegarme al suyo.

Nos fundimos en un cálido abrazo, un abrazo que necesitaba. Un abrazo puro, real, donde nuestros latidos coordinaban a la perfección, sentí como apoyó su barbilla en mi cabeza y miró al techo mientras emocionado se mordía el labio inferior, para luego apretarme más a él. Con ese gesto que el desconocía que sentí y vi supe que estaba haciendo lo correcto.

Lo necesitaba cerca, necesitaba tenerlo al lado, necesitaba de su amor.

- ¿Qué vas a hacer? - dijo, mi amiga mientras desayunábamos después de haber llevado a Nico al jardín.

- ¿Con qué?

- Con Mariano y tu hijo, que te recuerdo que también es suyo y que él no lo sabe. - miré a mi amiga con miedo y angustia, llevo 4 años intentando comunicarme con él para decirle y cuando al fin lo tengo delante no me atrevo.

- No se... - dudosa la miré, el miedo y la inseguridad me invadían.

- Lali, no te digo ahora pero tarde o temprano Mariano tiene que saber que Nico es su hijo.

- Dame tiempo ¿si?

- Amiga, yo te doy todo el tiempo del mundo, pero hacelo. Si te ama lo va a entender...

- ¿Y si no?

- Te va a entender - aseguró mi amiga y me abrazo dándome toda la contención que necesitaba, todo se sabría a su debido tiempo. Ahora quería ver cómo marchaba las cosas, no quería darle un padre a mi hijo y que cuando ya tenga la ilusión de tener a su padre acá se tome el palo. Quería asegurarme que Mariano Martínez aceptaba y quería a mi hijo, sino ninguno de los dos entraríamos a su vida.

POV MARIANO

Llegué a la empresa y se me hizo raro no ver a Lali allá, cosa que me preocupó. Cuando la estaba por llamar apareció corriendo por la puerta a las apuradas como siempre.

- Hola - pronunció agitada mientras tendía el saco en la silla.

- Hola hermosa - la tomé de la cintura y la acerqué a mi. - Buen día.

- Buen día bombón - sus labios se posaron en los míos y un suave beso comenzó, como extrañaba sus labios, su lengua recorriendo la mía, sus manos acariciando mi cara, extrañaba todo de ella.

Estaba confundido no sabía que era esto que teníamos, y sabía que a ella le pasaba lo mismo a lo que también sabía que ambos queríamos sellar y formalizar esto.

Mucho tiempo separados, muchas sensaciones, muchos momentos. Yo quería tenerla ya, si bien ya la tenía quería que fuera mía y solo mía y eso solo se podía conseguir si le proponía tener algo más formal.

Pensé bien las palabras que iba a decir y como quería que fuera todo, no quería algo normal y sencillo. Quería que fuera algo lindo y romántico.

Llamé a un par de contactos que tenía y reservé todo para una linda noche, aún no tenía fecha prevista ya que Lali tiene un hijo que atender y obligaciones.

Volví a realizar una llamada para confirmarlo todo y ahora sí reservé en el restaurant.

La puerta sonó y sonreí pudiendo saber quién era la persona que se escondía detrás de esa puerta.

- Pase - grité sonriente y mi aún compañera de aventuras  apareció por el marco de la puerta.

- Que linda visita...

- Hola jefe, vengo a traerle esto - bromeó dejando unas carpetas en la mesa. La tomé por la cintura e hice que se sentara sobre mi.

- ¿No me vas a dar un beso? - susurré a centímetros de ella, cuando me acerqué a ella para besar sus labios Lali se separó y se levantó.

- Estoy trabajando señor Martinez, sería muy poco profesional de mi parte que ande comiéndome a mi jefe en horario de trabajo.

- ¿A sí? - ella asintió divertida - Ok, andate.

Ella me miró triunfante y se dispuso a salir cuando tomé su brazo y la hice girar para después hacerle impactar sus labios con los míos que enseguida tomaron contacto, sonreímos entre besos, y nos besamos entre sonrisas. Es la mujer más increíble que conocí en mi vida, pensé para mí y sonreí mientras tomaba su cintura acercándola más a mi.

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Hola!! Les dejo el siguiente capítulo, se acerca el fin de trimestre acá en mi instituto y estoy llena de exámenes, no sé si podré subir día sí día no como antes ya que tengo también que escribir los capitulos. Intentaré el sábado tener el próximo si no como muy tarde el lunes ❤️

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