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- ¿Sabes que no era necesario que golpearas al guitarrista? - repliqué ya en el auto, casi entrando a la ciudad.

- ¡Por favor! ¿Ahora el tonto soy yo? Él estaba coqueteando contigo. - dijo Alex tratando de justificarse, porque yo tenía todo a mi favor para molestarle por haber hecho que nos sacaran del restaurante.

Flashback

Estábamos sentados en una mesa para dos, luego de qué Alex me besara. Admito que me sentía... Extraña. Era una sensación de estar completamente feliz, pero incómoda a la vez.

Estaba viendo un menú que estaba sobre la mesa, mientras unos muchachos iban de un lado a otro terminando de darle los últimos toques al escenario. La gente empezaba a llegar.

- Creo que pediré un café. - dije, esperando así romper el silencio.

- Claro. Era imposible que te ofreciera un café y que no lo aceptaras. - bromeó Alex mientras daba una de sus sonrisas.

Llamé a uno de los camareros y le dí mi orden. Alex y yo nos paramos para salir a dar una vuelta corta al jardín, contiguo al salón del restaurante. Me alejé un poco de Alex para ver unas flores muy bonitas que estaban sembradas en la orilla de una escultura. Me quedé un rato ahí, observando las flores. Me parecieron muy hermosas, pero no lograba dar con qué tipo de flores eran.

POV Alex.
Se miraba tan hermosa. Tan natural, como si estuviera destinada a vivir con las flores. Reaccioné luego de pasar unos minutos hipnotizado. O idiotizado quizás. Saqué mi cámara de el bolso que Blue había dejado a un lado y le tomé una foto.

Bueno, dos. O quizás fueron cuatro.

El punto es que le tomé unas fotografías. Se miraba hermosa. Tal vez yo la veía hermosa. O quizás ella ya era hermosa y yo tenía ese privilegio de observarla.

POV Blue.

Me di la vuelta y le dije a Alex que nos fuéramos a sentar. Él asintió y caminamos de regreso a nuestra mesa. Mi café ya estaba allí.

***

Luego de casi una hora y de que el sol se ocultara, terminó el concierto de jazz. Fue genial. La muchacha vocalista del grupo tenía una voz impresionante. El guitarrista hizo unos solos de guitarra magníficos. Y el baterista... Tenía talento, lo sé.

Pagué mi café y Alex ya estaba dispuesto a irse, cuando el guitarrista se acercó a nosotros, que estábamos en una de las mesas de en frente. Debo admitir que el guitarrista era atractivo. No sólo por lo atractivo que hace a alguien ser guitarrista, sino que su físico era atractivo. Pero ese no es el punto.

- Hola. Soy Samuel. - dijo con una voz ronca, teniendo su mano hacia mí. Alex resopló, pero el muchacho lo ignoró.

- Hola. - respondí luego de darle la mano. - Yo soy Blue. Y él es Alex. - dije señalando a ese chico con mala cara que estaba a mi lado.

- Hola. - dijo secamente a Alex. - ¿Te ha gustado el show? - me preguntó Samuel con una sonrisa tan sacada de película.

- Sí, fue un gran show.

- Me alegra que te haya gustado, nena. - al decir nena dejó de agradarme tanto. Alex gruñó mostrando su disgusto. De nuevo.

Samuel cogió una servilleta limpia de la mesa y sacó un bolígrafo de su bolsillo. Escribió algo en el y me lo dió. Era su número telefónico. ¿A cuántas chicas debe de darles su número de teléfono para hasta tener un bolígrafo en el bolsillo?

- Llámame. Podría darte un show privado, guapa. - No lo creo. ¿Está coqueteando conmigo? Está coqueteando conmigo. ¿En frente de Alex? Así es.

- Ah. - dije un poco impactada. Pero claro que no mostré eso.

- Sí, pueden pasar cosas divertidas, nena.

Lo miré extrañada y ofendida. Era guapo, sí. Pero yo tampoco voy a ser fácil. Además, ahí estaba Alex. ¿Cómo se le ocurrió? Cerré los ojos unos segundos, fueron tres quizás. Pero al abrirlos, Samuel ya estaba en el suelo. Y Alex estaba aflojando su puño.

Antes De Morir (Completa) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora