Capítulo 10

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Subí con mucho cuidado por la pared de la casa de Sac sosteniendome de lo que pudiera, hasta llegar a su ventana, no tenía seguro así que la abrí y me colé en su habitación.

Sac dormía sin camisa y con una sábana mal tendida encima de él, me metí a su lado con mucho cuidado para no despertarlo. Acerque mi rostro bastante a él  y moví su brazo. A lo que abrió los ojos

- ¡Ay! - llevo una de sus manos a su pecho - Pero ¿Qué demonios? ¿Quieres matarme de un susto?

- No seas tan dramático

- ¿Crees que abrir mis ojos y encontrarme con tu cara cerca de la mía, no es motivo suficiente para que muera de un paro del corazón? - se tallo los ojos - ¿Que haces aquí?

- Visitandote - me tire del todo en la cama

- ¿A las tres y veintidós de la mañana? - dijo mirando su reloj - Pero ¿Que clase de lunatica eres?

- La lunatica que más feliz te hace - me incline para besarlo - necesito algo de diversión y he pensando en ti ¿Que dices? - lo mire

- No se diga más - sonrió y me beso

Profundizamos el beso y nos unimos nuevamente siendo uno sólo, desde el día de la biblioteca no había vuelto a estar con él.

- Te amo Alex - susurro mientras terminamos

- ¡Espera! ¿Qué? - me senté y lo mire

- ¿Qué  De qué?  - me miro

- ¿Que es lo que me has dicho?

- No he dicho nada - se alzó de manos - te estas enloqueciendo de verdad

- No - me gire más hacia él - Has dicho que me amas Sac

- No, yo no he dicho eso - negó rápidamente con la cabeza

- Si que lo has dicho - golpee su pecho - ni se que te ocurra enamorarte de mi Sac - me levanté desnuda - eso si que ni se te ocurra - repetí mientras buscaba mi ropa en el suelo

- No Alex - se sentó en la cama - No estoy enamorado de ti, pierde cuidado, jamás lo estaría - me miro a los ojos - Tranquila, yo se bien mi lugar donde quiera que voy

- ¡Eso espero! - suspire - ya debo irme - empecé a vestirme

- ¿Por qué tan pronto? - bostezo

- ¡Es tarde! Debo dormir - termine de poner mi blusa

- Puedes dormir conmigo, no tengo problema en ello

- Oh no - negue con la cabeza - eso si que no - puse mis Converse - No me quedaré a dormir contigo, ni en tus sueños - camine hacia la ventana - descansa

- Ok - se volvió a tirar en la cama - nos vemos mañana

- Nos vemos - salí - ah y recuerda pasarle seguro a tu ventana, no sea que aparezca una lunatica y te viole - empecé a bajar

Tome mi motocicleta y emprendi mi regreso a casa con el reloj marcando las cinco con diecinueve minutos. Me colé nuevamente por la ventana y me tire a mi cama, pero ahora nada estaba bien, Sac había dicho que me amaba y eso si me sacaba de honda, él no podía decirme eso.

Sentí el ruido estresante de mi despertador, lo presione para que dejará de sonar y a los cincos minutos volvió a sonar.

- ¡Maldita sea! - me senté rápidamente cogí el reloj y lo estampe en la pared.

Mire el reloj en el suelo destruido por unos segundos y luego procedí a arreglarme para el Instituto, de verdad debía empezar a dormir más. Odiaba las bolsas negras que estaban intentando aparecer debajo de mis ojos.

Al Final Del TúnelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora