Tomé las llaves de mi bolsa y abrí la puerta, algunas luces estaban encendidas y me sorprendio porque habíamos dejado todo apagado, miré mi reloj que marcaba la una de la mañana, estaba relativamente temprano.
Subí hasta la habitación de Sac y antes de encender las luces senti un fuerte golpe en la cabeza.
- Muchacho del demonio - volvieron a golpearme - ¿Donde estabas metido? - un golpe más
- Señora por favor - chille - No soy Sac, aún tengo vagina - le grite sobandome aún mi cabeza y encendí la luz
- Pero ¿Que? - me miro bastante sorprendida - ¿Que hace usted en mi casa?
- Pues vine a buscar a Sac, pensé que estaría ya aquí - mentí
- Pues no - apoyo su bastón - y estas no son horas de visitar a nadie jovencita - me agarro del brazo - así que se me va ya mismo - prácticamente me arrastró a la salida
- Pero señora... - intente defenderme, pero si que jalaba duro la condenada y yo no quería lastimarla
- Que tenga buena noche - cerró la puerta en mis narices
- Estoy viviendo en su casa señora - dije para mi misma y me senté en las escaleras
Tomé mi celular e intente llamar a Sac, pero fue imposible, el no contestaba y yo ya estaba muriendo de frío.
Recordé la ventana y me dirigí hacia allí pero desde abajo vi la luz encendida y temí de que la abuela de Sac aún estuviera allí esperandolo.
Subí con bastante cuidado y desde afuera analice bien el cuarto, pero no había rastro de ella, así que me deslice adentro, cerré la puerta con seguro, me cambié de ropa, apague la luz y me acosté a dormir.
Me desperté con el sonido de la perilla de la puerta queriendo ser abierta, así que con bastante sigilo me levanté, la abrí despacio y Sac apareció a mi vista bastante borracho, así que lo ayude a acostar en la cama y lo imite.
***
- ¡No! - soltó una carcajada - ¿Enserio mi abuela hizo eso?
- ¡Claro! Me ha dado un buen golpe en la cabeza que me ha dejado medio bruta, ahora entiendo porque eres tan cerrado de mente, tantos golpes, de razón
- Hey - me señaló con su dedo índice - No te pases
- Pero es la verdad y si fuera poco me corrió de tu casa y me tocó meterme por la ventana - volvió a soltar una carcajada
- Esto es épico - jalo mi nariz - hubiese dado plata por ver esa escena
- Idiota - lo empuje - Oye, tengo hambre -me senté con brusquedad en la cama
- Pues vamos a desayunar - se puso una camisa sin mangas
- No, ni sin culpa - negué con la cabeza - no quiero que me maten a punta de golpes - me dirigí a mis maletas - aquí tengo suficiente - abrí mi bolso en el que tenía mi comelona
- ¡Dios! - se acercó y saco una golosa - Haz dejado tu casa sin mercado
- Lo se - saque un paquete de papas - tenía que sacar algo bueno de allí, aparte de un dinero que me cogí de Adela
- Estas robando Alex - sentenció
- No, de ninguna manera, digamos que si es de Adela no cuenta como robo
- Bien, ¿No bajaras conmigo entonces? - negué con la cabeza - ok, pero al rato tendrás que hacerlo para decirles que te quedarás aquí
- No - comí una papa - si no hay necesidad, es decir, sólo será por esta noche, ya mañana me iré ¿Lo recuerdas?
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Al Final Del Túnel
Teen FictionAl final del túnel siempre hay una luz que indica dos cosas tendras la oportunidad de seguir viviendo o por el contrario moriras por el hecho de seguir la luz, total las dos opciones pueden estar en tela de juicio ¿Qué sentirias si supieras que tu v...