Capítulo 18

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En Multimedia Sam :3

Seguí bromeando cada vez más con Thomas y beso va y beso viene, realmente me había divertido mucho con él.

Se había llegado el momento de partir y sabía yo que todo cambiaría por x o y motivo.

- Realmente me harás un poquito de falta - me dijo Carla antes de tomar su autobús - eres muy odiosa, pero tienes tu lado

- Si - reí - Olvida lo malo, recuerda lo bueno

- Así será - me abrazo tomándome por sorpresa, pero no respondí a su abrazo - Alex - se acercó a mi - por favor deja las drogas - susurro en mi oído

- No te pases - la aleje de mi - él que ya no te odie no quiere decir que te este dando paso a poder criticar mi vida ¿Va?

- Sólo quiero lo mejor para ti - cargó su bolso

- Yo se que es lo mejor para mi, ahora anda, te dejará el autobús - le señalé con mi barbilla

- Cuidate mucho - volvió a abrazarme y nuevamente no le respondí - quizás algún día nos volvamos a ver ya que no quisiste darme tu número

- Pero yo tengo el tuyo, así que pierde cuidado, si deseo te llamo, ten buen viaje - caminé hacía mí autobús.

Estaban llamando a lista para asegurarse de que todos tomarán el autobús.

Saqué mi celular y marque el número de Sac, quien sólo me contestó después del tercer intento.

- ¿Donde estabas metido? - pregunté una vez contesto

- Tenía el celular en silencio ¿Que ha pasado?

- Pues que hoy regreso a mi triste vida y quería saber si contaba contigo, ya sabes

- Claro que por supuesto que si Ratona, mi casa es tu casa

- Gracias - sonreí como si lo tuviera al frente - entonces nos vemos en cinco horas - colgué

Subí al autobús y me senté al lado de Thomas, no hablamos mucho, sólo cruzamos un par de palabras y nuevamente me quedé dormida en su brazo durante todo el viaje, era mejor a estar vomitando todo el trayecto.

***

- Ratona, al fin regresas - saludo Sac abrazandome

- ¿Que ha pasado en mi ausencia? - dije una vez me separe de él - Quiero todo con detalles

- Muchas cosas - rodeó mis hombros - ya pronto te enteraras, ahora vamos a casa, he hablado con mis abuelos y aceptaron que te quedes

- Supongo que tuviste que chantajearlos un poco ¿No? - me subi a la parte trasera de su motocicleta

- Digamos que eso lo hizo mi abuelo - sonrió - vamos a casa

Sac aceleró su motocicleta y sentí extrañar todo este tiempo la sensación de conducir una motocicleta y mi bebé estaba bien abandonada en un rincón del garaje de la casa de Sac.

Llegamos a la casa, Sac ayudó con mis maletas y las subió a su habitación y en segundos volvió a bajar.

- Así que está es la chica de la que tanto me has hablado ¿No? - dijo un chico rubio que salía de la cocina

- La misma - respondió Sac rodeandome con su brazo

- ¿Tu quien eres? - lo miré mientras arrugaba mi rostro

- Mucho gusto - se acercó a mi - Soy Sam el hermano de Sac

- Eso explica el parecido de sus nombres - dije burlonamente - pero que suerte que no te parezcas a tu hermano

Al Final Del TúnelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora