Siempre fuiste tu

14- El Cumpleaños de Alexa

Durante todo el viaje no me moví, ni hablé. Sigo estando furiosa con las chicas por asustarme de esa manera, pero al mismo tiempo estoy ansiosa por saber a donde me llevará.
Siento unas manos que me tocan y al instante despierto sobresaltada.
-tranquila, soy yo-dice con burla al tiempo que alza ambas manos en son de paz.
-imbecil-murmuro.
-ya, pero este imbecil quiere pasar todo un fin de semana contigo y con mi hija. -dice volviendo a su tono serio y normal.
Me incorporo en el coche violentamente y lo miro con un gran signo de interrogacion en mi rostro.
-¿Que?-pregunto susurrando.
-lo que has oido, las he traido a un lugar que a mi me gusta mucho-dice tendiendome una mano. Dudosa la acepto, me saca del coche y toma a una Alexa, aún dormida, en brazos.
Si bien es la madrugada puedo distinguir que estamos cerca de un lago y no hay ningun tipo de casa ni refugio cerca.
-¿En donde dormiremos?-le pregunto aun con mis brazos cruzados en mi pecho, desconfiada.
-En carpa- contesta en algun lugar del coche. 
Ignorándolo, quito mi ropa y me meto en el agua. Como no tengo malla y tampoco tengo repuesto de muda, me metí desnuda.
Comienzo a nadar, dandole la espalda a Max, sambullendome y volviendo a emerger haciendo que el agua corra a traves del pelo hacia el lago de nuevo.
Le estoy sonriendo a la luna cuando siento unas manos en mi espalda baja y una gran rocacen mi trasero. Max está detras mío igual de desnudo que yo. Estoy comenzando a creer que acabo de cometer un gran error. Pero él no md deja pensar mucho, comienza a besar mi cuello y sigue por toda la espalda haciendo que me entre piel de gallina, sigue por las nalgas, sube, cambia de sitio yendo ahora hacia arriba por el ombligo, el valle de mis pechos, mis clavículas, mi cuello, la pera, las carretillas y finalmente mi boca. Para este momento estoy ardiendo y solo deseo besarlo. Tengo su enorme ereccion en mi parte sensible, estamos a punto para hacer lo que he ansiado desde que se fue y desde que lo volví a ver. Abro mis piernas para darle acceso, él me mira un tanto desconfiado.
-hazlo ahora antes de que me arrepienta-logro amenazarle con la poca voz que me queda. Me sonríe, une nuestros labios y me penetra de forma lenta y dulce.
Coloca sus manos en mi cintura, enredo mis liernas en sus caderas y comienza todo el baile.
Tiempo despues, luego de llegar al climax, sigue dentro mío, yo no le dejo lugar a salirse, estoy descansando en su cuello abrazada fuertemente a su nuca. Cuando logro recuperar mis fuerzas me bajo y me giro sin atreverme a mirarlo. Se que mañana me arrepentiré de esto, pero lo necesitaba.
-Vayamos a dormir-susurro antes de salir del agua sin importarme que él me esté mirando.

Nos despierta el canto de los pájaros y el sol que se filta por el techo de la carpa. Trato de poner buena cara por mas que nuestro acto de hoy me esté carcomiendo el cerebro.
Miro hacia mis lados y no hay nadie, escucho risas de niña afuera y concluyo que se han levantado mucho antes.
Me fijo en el reloj y son las once de la mañana. Salgo pitando de la carpa y me encuentro con una escena adorable. Está Max jugando en el lago con Alexa.
Max capta mi mirada y me señala haciendo que alexa grite y extienda sus bracitos hacia mi.
Me acerco a ellos y la tomo en brazos provocando que mi ropa quede empapada.
Me es imposible no mirar a Max, quien esta sin remera y el agua recorre sus pectorales haciendolo ver super sexy. 
-¿donde has guardado mi celular?- pregunto intentando no saltarle encima y morderlo.
-en alguna parte-dice tranquilo y con una media sonrisa suficiente. Entrecierro mis ojos en forma de enojo.
-¿Disculpa?- pregunto- ¿y si quiero hablar con mi hermana? ¿no voy a poder?
-no, aqui no hay cobertura y ademas quiero pasar un fin de semana con mi familia-dice y sonríe abiertamente. Capullo.
Salgo furiosa del lago con mi hija en brazos que no se entera de nada.
Me meto en la carpa y revuelvo los bolsos en busca de una muda para ella, en cuanto la encuentro la cambio y la dejo jugar con lo que sea que haya aqui.
-venga,Lucia, sal- pide Max desde el cierre. Lo ignoro y sigo cruzada de brazos mirando a mi hija. -tan solo quiero pasar el cumpleaños de alexa con ella sin nadie que me interrumpa, ¿es mucho pedir?-pregunta haciendo que se me derrita el corazon.
Asomo la cabeza porcel cierre y le sonrío.
-no, no lo es-digo para luego salir gateando y hacer que mo hija me siga igual.
-pues entonces a comer-dice feliz.

Pasamos toda la tarde en el lago jugando, mojándonos y riendo hasta que a Alexa le agarró sueño y la metimos en la carpa.
Yo no tengo sueños asique comienzo a caminar por la orilla del lago jugando con mis pies.
Siento a alguien que camina a la par mía.
-Max, dejame sola-pido con la voz apenas audible.
-no, te conozco demasiado bien como para saber que algo te carcome la conciencia-susurra demasiado serio para ser él. Trato de ignorarlo pero no puedo, tiene razon, me conoce demasiado bien.
-Hay tantas cosas que no sabes, tengo tantos miedos, tantas intrigas, tantos recuerdo invadiendome - susurro comenzando a contarle lo que siento.
-¿yo tengo algo que ver con todo esto?-pregunta.
-algo- susurro mirando aun el suelo.
-podemos estar juntos-susurra en mi oído.
-¡pero tu te vas a casar!-exclamo haciendo que mi voz retumbe.
-¿y eso que? yo a ella no la quiero, en cambio a ti te amo- dice poniendose en frente mío interrumpiendo el paso.
-pero tu te has ido a la mierda con eso del matrimonio-susurro con mis ojos anegados. - ¿porque te fuiste?, ¿porque no me volciste a hablar?, ¿porque te emborrachaste?- pregunto golpeando su pecho, luego de eso me dejo caer y comienzo a llorar en su pecho.
-no lo se-su voz suena tan afectada que quiero golpearle por ello. Acaricia mi espalda baja.
Levanto mi cabeza y lo miro. Puedo distinguir un brillo especial en sus ojos que esta inexistente cuando mira a Antonieta, puedo distinguir tambien miedo, vergüenza, nostalgia.
Acercamos nuestras bocas hasta que solo están a unos centímetros, no soporto estar más sin él, pero tampoco aguanto que él vaya a ser de otra,y otra tan peligrosa como es Antonieta.