Siempre fuiste tu

20- Gran felicidad

POV LUCIA/ABRIL

Fuimos al hospital más cercano de esta zona, Max quiere hacerlo de la manera más segura, llendo a un ginecólogo. No me negué, la verdad es que yo tambien quiero asegurarme, los tests suelen fallar y no me agradan.
Según mis cálculos tengo que estar de un mes mas o menos.
Voy sumida en mis pensamientos cuando siento la frenada del auto que me indica que ya llegamos.
Max me ayuda a bajar, cuando tomo su mano lo siento temblar.
-¿Nervioso?-pregunto mirandolo sin ningún atisbo de burla.
-no tienes idea-responde sin mirarme a los ojos, los tiene fijos en mi estómago. -esta vez me haré cargo.- asegura sin dar opción a una recriminacion por mi parte.
Asiento y me dejo dirigir hasta la entrada.
Llegamos a la mesa de entrada.
-turno para la ginecóloga-pide tomándome de la mano en ese momento, como si necesitara un refuerzo.
-si, espere dos horas y será atendido-dice-piso uno, pasillo tres, puerta cinco-dicd mientras nos hace seña de lo que dice.
A medida que avanzo los nervios florecen cada vez mas.
Tengo miedo de haberme equivocado, de que todo sea una falsa alarma,  miedo de haberme ilusionado y de ilusionar a Max y que todo sea una gran y absoluta mentira. No me lo perdonaría nunca.

Esperamos las dos horas sentados tomados de las manos pero sin hablarnos o mirarnos, como si fueramos desconocidos. Puedo percibir su nerviosismo y ansiedad, eso se comprueba vuando es nuestro turno.
-siguiente-llama la médica. Max se levanta como un resorte llevandome con sigo en el envión.
Entramos, hacemos el ritual del saludo y nos sentamos a la espera de que la médica se decida a hablar.
-Bien, ¿para que han venido?- pregunta por fin cruzando los dedos sobre la camilla que hay entre ella y nosotros.
-para comprovar si realmente estoy embarazada-digo tomando la iniciativa.
-¿ya lo has estado alguna vez?-pregunta mientras anota algo en su libreta.
-si-digo
-¿Cuantos años tiene?
-tres
-¿de cuanto crees que estas?-miro a Max antes de responder.
-un mes y algo mas
-¿cuando fue la última vez que lo hiciste?-sigue con sus preguntitas.
-hace un mes y dos semanas-digp calculando en el aire y a tiempo record las semanas.
-muy bien- dice volviendo a mirarnos-estoy casi segura de que lo estas pero por las dudas vamos a fijarnos con la ecografía-dice parandone y guiándonos hacia un lugar detras del consultorio.
Me hace recostarme en una camilla y levantar la musculosa. Ella me coloca un gel frio en la,zona del útero y enciende una maquinita.
Todo se ve borroso, hace ya más de tres años que me hice esto, no me acuerdo que es lo que tengo que ver para comprobarlo.
-¿lo ven?-pregunta con una sonrisa.-allí está-dice señalando una bolita negra, se queda mirando la pantalla un rato, mueve el gel frenéticamente hacia un lado y nos mira como intentando comprobar algo. -pregunta, ¿tu tienes antecedentes de gemelos?
-no, mellizas-digo.
-ah, pues tienes gemelos querida-dice señalando otra bola que está escondida.
Abro los ojos del asombro y miro rápidamente a Max, él aprieta mi mano y sonríe con los ojos vidriosos y rojos.
-¿G...gemelos?-pregunto mirando a la médica.
-gemelos-afirma.
Inhala, exhala, inhala, exhala. Cierro los ojos y suspiro.
-¿se pueden ver los sexos?-pregunta un emocionado Max.
-Aun no-dice sin inflexion-recien al segundo mes. -continúa.

Cuando salimos del hospital Max está que se sale de si de la felicidad y yo aun no caigo que estoy embarazada y de gemelos.
-Gracias, gracias, gracias-susurra Max en mi pelo antes de arrancar el coche.
-¿por?-pregunto.
-por darme esta oportunidad de ser feliz de nuevo, de poder empezar otra vez. De poder remediar el daño que te causé-dice sinceramente. Sonrío realmente safisfecha.
-no hay de que, yo tambien quiero que estés conmigo durante el embarazo y en el parto-digo con una amplia sonrisa.-¿Sabes que?,tengo un enorme antojo de fondeu de banana-digo imaginandomela.
-a la orden mi capitana-dice sonriendo y arranca el coche a gran velocidad buscando un lugar donde hagan eso.
Cuando lo encontró nos metimos allí y sin importarle el precio le pidió al mesero que traiga todas las clases de fondues que tengan.
Si Amx sigue asi de consentidor ya no se va a distimguir si edtoycembarazada o si soy una gorda fan de la comida con chocolate, la verdad no me importa.
Max estuvo todo el día con una sonrisa dd oeeja a oreja.
Está claro que nos olvidamos de Alexa y Alex.
En eso suena mi celular, sin fijarme atiendo.
-Mala madre-es lo primero que recido de Alex. No puedo evitar reir por su tono dd intento de enfado.
-vale, pero aguanta un poco más, ya recibirás un noticion-digo sonriente.
-vale- dice vencido.
-oye, te tengo que cortar, en un rato nos vemos,digo y cuelgo sin darle tiempo a nada.
Nos miramos con Max sin saber que hacer hasta que estallamos en carcajadas.
Volvemos al hotel donde me encuentra un muy ceñudo Alex con una,beba juguetona en brazos.
-Al fin llegas-me dice en un tono bastante duro.
Frunzo el ceño.
-¿que suecede?-pregunto.
-todo se está descontrolando allá, tenemos que irnos lo mas pronto posible-dice. Miro a Max esperando a que sea él el que decida.
-tu te quedas aquí-ordena- no te voy a arriesgar.
-pero yo quiero ir- hago puchero como niña pequeña.
-joder, estas embarazada, NO TE VOY A ARRIESGAR- remarca la ultima frase con los dientes apretados.
-yo me quedo con ella-interviene Alex.
-no, te necesitaré-dice-eres amigo de Javier, tal vez puedas ayudar.
-vale, si ustedes van yo tambien-digo convencida de lo que digo, ya sé como puede reaccionar y se que no voy a cambiar de opinion.
-no-responde mirandome sin pestanear
-si-digo cruzándome de brazos y acercándome a su rostro.
-no-vuelve a repetir.
-oigan-nos llama alguien, nos giramos violentamente para encontrarnos con Alan Sprousse.-no hagan lo mismo que mi hermano-dice mirándome significativamente-ella por algo lo dice chaval, hazle caso-dice con una media sonrisa y se gira hacia su despacho.
-Alan-lo llamo, se gira a la espera-gracias.
-de nada querida, dime tío-sonríe y cierra la puerta.
-ya has oído Max, yo voy-digp y dándome por satisfecha lpa ignoro tomando a mi hija y yendome hacia mi habitación.