Un Capítulo De Mi Vida... Con Él.

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Ya no estaba con Javier, fue cruel conmigo, ¿para qué me buscó si me iba a despreciar de tal manera?
Volví a tener en mi mente a Ignacio, lo pensaba y lo extrañaba como siempre. ¿Cuándo iba a salir de mi cabeza? ¡Era una tortura!, una linda tortura.
Otra vez chats en facebook, otra vez tenia su numero agendado en mi celular.
Nos veíamos, solamente nos hablábamos para vernos, sabía que si me hablaba no era para saber sobre mi, solo quería sacarse las ganas. Me dolía, lo reconocía pero no podía decirle que no, por mas que me negará terminaba accediendo a verlo.
Ya no era lo mismo, me buscaba en su moto, lo abrazaba fuertemente, se sentía tan bien. Llegábamos a su casa, me besaba, era hermoso estar en sus brazos, podría estar así por siempre, terminábamos en su cama, la calentura de ese momento había finalizado, otra vez la distancia estando a milímetros. Lo miraba y pensaba cuanto lo amaba, ya no hablábamos solo escuchábamos el sonido del silencio. Pedía que ponga música, no me gusta el silencio. Nos besábamos, pero sus besos eran fríos cuando acababa de quitarse las ganas. No me sentía bien en su cama, sabía que otras dormían allí, sus sábanas me daban asco, su almohada aún mas, estaba recostada donde otras lo hacían, me tapaba con la misma colcha que otras chicas, seguramente desnudas como lo estaba yo. Mis lágrimas caían, Ignacio dormía, ya no quería abrazarlo al dormir, le daba la espalda a veces se volteaba para abrazarme.
No quería estar allí, pero tampoco quería irme, eran sentimientos confusos.
Le envié un mensaje diciendo que lo quería al llegar a mi casa, no obtuve respuesta, solo el maldito visto, no esperaba mas, sabía que él no me quería, era solamente una distracción. ¿Cómo podía ser de esa forma luego de tantos años? A pesar de no estar juntos compartimos muchos momentos, ¿cómo podía ser tan frío?
En muchas oportunidades me negaba a verlo, estaba para otras cosas, no todo era sexo, yo no era solo un cuerpo, tenía sentimientos, tal vez él no pero yo si, y aunque intentaba no demostrarlo era muy sensible y todo me afectaba.
Quería otras cosas, no con él, o si, pero buscaba lo mismo en cualquier chico, salir, tener una conversación, poder al menos contarle sobre mis días, ver una película, ir a un boliche, tomar algo en un bar o solo sentarnos a tomar una coca en un parque. ¿Era mucho pedir?
Sabía que no iba a tener una relación sería con él, tampoco la quería, o tal vez si, pero buscaba otras cosas, un poco de amor. Él no iba a ofrecerme eso, en una ocasión me lo dijo. "Yo te quiero, date cuenta, pero no puedo ofrecerte lo que buscas, no quiero una relación, quiero divertirme"
No me quería, si alguien te quiere cuida y valora tus sentimientos al menos trata de no hacerte daño, él solo quería divertirse, quería estar con cualquier chica, cualquiera le daba igual, y yo no estaba de acuerdo con su forma de actuar. Pero lo aceptaba, nunca me había prometido nada, sabía que nunca íbamos a llegar a mas de lo que teníamos, solo unas horas en la madrugada.
"No soy tu gato" le dije muchas veces. Eso era para él, alguien con quien revolcarse, era un imbécil pero lo quería de todas formas.