Las olas del mar venían y se iban una y otra vez, como si nunca se cansaran, la luna estaba llena resplandeciendo la arena de la orilla como si fueran escarchas, el cielo estaba en calma la brisa del mar acariciaba las hojas de las palmeras siguiendo su corriente como si fuera a sujetar el viento, todo se sentía tranquilo hasta que un grito rompió la paz, venia del bar, todos los hombres estaban exaltados vociferando y gritando como si fueran unos animales, botellas caían una tras otras de las mesas de algunos hombres derramando el frio alcohol por todo el lugar, Lisa estaba asustada —Suéltame, ¡Suéltame!— pedía desesperada arrastrando su cuerpo por toda la tarima —Vamos encanto solo una probadita y ya...— insistía el perturbante hombre, escupiendo saliva en su profunda y asquerosa barba, sus ojos mostraban excitación, se le veía que disfrutaba con ganas apretar las piernas de Lisa, ella lloraba pidiendo ayuda, estaba tan asustada que se desmayó así de repente, tumbando su cabeza sobre el suelo y dejando de escuchar los gritos de la gente y sentir las sudorosas manos de aquel hombre...
—Una hora después—
Lisa abre sus ojos lentamente, su visión poco a poco iba enfocando la borrosa vista que tenía hasta lograr ver mejor, enseguida observa un lugar muy cerrado y oscuro salvo la luz de una vela, de repente escucha un movimiento y ve que un bulto con sombra se le acerca, ella se asusta pateando aquel bulto, es sacudido y algo cae de entre sus manos, ella ve reflejada en la tenue luz un frasco marrón de vidrio rodando por el piso, se escucha el eco de aquel frasco rodando por todo el pequeño cuarto, Lisa frunce el ceño toda extrañada hasta que ve el él bulto levantándose del suelo y caminar hacia ella, Lisa se entremete sobre la sabana sin taparse los ojos esperando ver aquella cosa, gimiendo del miedo, hasta que la luz logra iluminar el rostro de ese extraño bulto y era Armin observándola fijamente, ella se sonroja de la vergüenza y pide "Perdon", Armin se agacha a recoger el frasco sin decir nada hasta que se levantó diciendo —No te preocupes—, ella baja la cabeza y comienza a llorar tímidamente tapándose los ojos, Armin no comprendía por qué lloraba, Lisa se entrecoge de piernas limpiándose las lágrimas, Armin saca de un pequeño baúl un vaso de plástico y se dirige a la cocina a dejar a Lisa, ella tenía miedo ya que no quería estar sola, ordenando —Espera—, Armin voltea sin decir nada —¿A dónde vas?—
—A traerte un poco de agua ya que tiraste el que te iba a dar— Lisa observa abajo y ve el reflejo del agua esparcido en el suelo, ella se entremete entre la sabana pidiendo "Perdon", Armin continua caminando, Lisa se sentía algo cortada por su indiferente actitud — ¿Por qué actúa así?— se preguntaba, ella baja de la improvisada cama sujetando el plato donde tenía la vela para iluminar su camino, sale del cuarto y lentamente camina si saber a dónde ir —Este lugar es muy grande y oscuro ¿A dónde iría?— pensaba, continua caminando y siente una suave cosquilla en sus desnudos tobillos, ella gimió de la risa e ilumino el piso y vio a una enorme y gorda rata que la veía fijamente con sus negros y brillantes ojos, Lisa grito como una Loca y salió corriendo a cualquier dirección sin fijarse en nada, de repente se golpea con alguien y los dos caen uno encima del otro, haciendo un fuerte ruido, enseguida alguien encendió la luz de la sala y Lisa vio con quien se tropezó y era Armin, ella se puso roja como una manzana ya que sus labios estuvieron a punto de pegarse a los suyos y enseguida escucha la voz de Dan decir —Me voy por unos veinte minutos y ya ustedes dos se quieren manosear—, Lisa levanta su pecho intentando de sentarse diciendo —¡Noooo tío no es lo que tú crees!—
— ¿A si? Y ¿Qué es lo que estás haciendo ahora?— pregunta Dan muy serio sobando su barbilla y levantando la ceja
Ella volteó a ver abajo y vio que estaba sentada en la cintura de Armin justo en el medio de entre sus piernas —AAAAAAAAaaaahhhh ¡Pervertido!— grito desesperada levantándose de un solo golpe, se arrincona en la pared muy sonrojada — ¿Qué pasó?— preguntó Dan muy serio mirando a Armin, él chico se levanta y vio que su camisa estaba toda mojada y la jarran con el agua estaba regada en pedazos por todo el piso, Armin tranquilamente dijo —No lo sé, fui a llevarle un poco de agua y siento que alguien me tumba y era ella—, Dan lo mira muy desconfiado y voltea a ver a Lisa —¿Eso fue lo que pasó?—, ella se tapa la boca y baja su cabeza, explicando —Emm... Es que vi una rata, me asuste y salí corriendo tropezándome con él—
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Sin Emociones
Tiểu Thuyết ChungEn nuestra vida hemos experimentado diversas emociones como la alegría, la sorpresa, el temor y principalmente el amor. Esas sensaciones que dan color y sentido a la vida enriqueciendo el alma pero también experimentamos el dolor aquellos dolores qu...