Capítulo 26: "Asolas en mi habitación"

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Era de noche, la luna estaba redonda y muy brillante deslumbraba en el cielo despejado, algunas estrellas comienza a resurgir de la oscuridad y la brisa fría del mar iba y venía sacudiendo las ramas de los árboles, algunos grillos empezaron a cantar, mientras tanto Armin se lava las manos y sale del baño, se dirige al comedor y ve que ya todos habían terminado de comer, la abuela de Lisa estaba recogiendo los platos sucios de camino a la cocina, el observa de izquierda a derecha para ver a la chica pero no la encuentra, sigue caminando y sube las escaleras para ir a la habitación, abre la puerta lentamente de los más tranquilo y cuando entra sube la mirada y ve a Lisa en ropa interior quitándose su sostén y su piyama extendida en la cama, ella escucha la puerta y voltea viendo a Armin, se pone nerviosa y chilla de la impresión tapándose sus senos

—Oh lo siento, no sabía que estabas aquí— lamenta Armin volteando su cara

Cierra la puerta y espera unos minutos, luego escucha —Ya entra—, él obedece y cuando entra ve a Lisa con un vestido corto que le llegaba a la mitad de su muslo con una pequeña bermuda que solo lo cubría hasta donde llega el vestido de la pijama, además era un poco transparente y se lograba ver sutilmente los pezones de sus pechos como su ombligo, era de color rosado y ella se entrecoge de brazos y cruza las piernas viéndolo a él, se veía que estaba algo apenada, Armin la observa con mucha indiferencia y pregunta —¿En dónde voy a dormir?— ella baja un poco su cabeza y desvía su mirada señalando —Eem... en mi cama—

Armin voltea a ver y observa dos almohadas juntas, cosa que no vio antes ya que solo había una, él pregunta —Y ¿Dónde vas a dormir tú?— Lisa se pone roja como un tomate desviando sus ojos para abajo y murmura —E...EE...ee... bueno...eee...yo...con..ti...— enseguida él interrumpe

—No quiero seguir incomodándote, duerme tú en la cama y yo duermo en el piso—

Lisa hace un mueca de avergonzada fingiendo una sonrisa incomoda, sacudiendo sus dos manos, diciendo —No para nada, tu no me incomodas, sabes que eres mi invitado hehehehehe...—

— ¿Pero en donde dormirás tú?—

—Buuueeenooo... yoooo... ehhh... dormiré en el suelo— responde bajando su cabeza con un suspiro de desanimada

— ¿Estas segura?—

—Si Armin, tranquilo—

—Ok—

Enseguida se acerca él a la cama y Lisa pregunta inquieta — ¿Vas a dormir con esa ropa?—

—Sí, no tengo otra—

—Mmm... entiendo, déjame buscarte una de mi hermano— se dirige a la puerta

—Pero ¿No se va a molestar?—

—Si no se entera no se va a molestar— responde ella guiñándole el ojo

... ... ...

Cuando llega, trae una camisa blanca y un mono azul de algodón —Aquí tienes— Armin lo coge pero como tiene un brazo inmovilizado le cuesta quitarse la camisa, Lisa lo observa gemir un poco del dolor, tratando torpemente de quitársela y propone —Déjame ayudarte—

—No te preocupes, puedo solo—

— ¡Por favor Armin!, yo soy la que cuido de ti, ¡A sí que quédate quieto!—

Agarra la parte de abajo y lo arrastra para arriba con suma delicadeza

—Listo Eeemm... ahora falta lo otro—lisa se sonrojada señalando los pantaloncillos del chico

—Eeehh... si, pero...—

— ¡Yo te ayudo!—

Lisa se arrodilla enfrente de Armin, él estaba sentado en la cama y ella ordena —Sube los pies—

Sin EmocionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora