T W E N T Y T W O

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Jungkook abrió la puerta de la habitación y se quedó de pie esperando a que sus ojos se acostumbraran a la oscuridad del lugar. Eran las cuatro de la mañana y no quería despertar a Na Bong por nada del mundo. Desde donde estaba ella se veía tan tranquila durmiendo, que simplemente era incapaz de prender la luz y despertarla. 

Se quitó los jeans tambaleándose, ya que había bebido un poco con Yoongi y Hoseok en la casa que ambos compartían. Ese había sido el primer lugar que se le vino a la cabeza, después de discutir con Na Bong ya que sabía que sus hyungs no le harían demasiadas preguntas y aceptarían sin más beber unas copas con él. 

Se recostó en la cama, arropó a Na Bong y decidió abrazarla. Se sorprendió al notar la poca ropa que llevaba la chica, siempre dormía con su pijamas que consistía en un pantalón largo y una camiseta ancha pero parecía ser que no llevaba aquel pantalón. No le importó demasiado la verdad, simplemente la rodeó con su brazo y enredó sus piernas heladas con las de la chica que estaban tibias. 

De pronto, Na Bong se removió entre sus brazos y se giró , quedando frente a frente con él.

Jungkook dejó de abrazarla de inmediato, asustado de que ella notara lo que sentía y lo que estaba sintiendo en este momento por ella, que escuchara su corazón latiendo desbocado dentro de su pecho por tenerla tan cerca.

Na Bong abrió entonces los ojos y lo observó, aun en la oscuridad podía distinguirlo a la perfección.

Para sorpresa de Jungkook, ella se acercó más a él y escondió su rostro bajo el mentón del chico mientras lo rodeaba con los brazos. Él sonrió e hizo lo mismo, apegando su cuerpo helado al de la chica, que le brindaba un calor que nunca antes había sentido. 

— No vuelvas a desaparecer así — Murmuró ella contra su piel, erizándola y produciéndole pequeños escalofríos que recorrieron su espalda. 

— Lo prometo...—  Dijo apegándose más a ella —  Pero tú no vuelvas a llorar por nadie ¿Está bien?

— Está bien, lo prometo Jungkook...


(...)


Yoongi, Namjoon y Jin se encontraban en la casa regañando a Jungkook por haber bebido la noche anterior. Por su parte Na Bong estaba en la cocina haciendo el almuerzo: Hamburguesas. La comida favorita de Jungkook, o lo que siempre hacía cuando no tenía demasiado tiempo. Y como al chico parecían gustarle entonces las haría para él. Simplemente quería consentir a su amigo en toda esta semana que quedaba, porque sería la última viviendo junto a él.

Se había decidido.

Volvería con Jiho.

Por el bien de Jungkook lo haría.


— ¡Están listas las hamburguesas ! — Gritó Na Bong desde la cocina , escuchó un fuerte "Okay" de parte de los chicos, para luego ver como la puerta de la cocina se abría de golpe por Jin, quien estaba un poco desesperado por comer. 

— Eres la mejor ¿Lo sabías? — Dijo Jin tomando una hamburguesa y una soda, se acercó a Na Bong y la besó en la mejilla .


Jungkook fruncía el ceño desde la puerta.


— Ya se lo había dicho yo... — Murmuró el menor con los brazos cruzados — y un millón de veces — Habló de nuevo acercándose a Na Bong y limpiándole la mejilla con su mano.

— Ugh... alguien está celoso~ — Canturreó Namjoon mientras le daba un gran mordisco a la suya — Nunca dejas de sorprenderme Na Bong-ah...

— Los chicos tienen razón, eres la mejor —Comentó Yoongi tirándole un beso a la chica para hacer enfadar a Jungkook.

— ¡Yah!—Gritó Jungkook — Coman luego que se les enfriará la hamburguesa...—Agarró la hamburguesa y se la comió agresivamente.

— Relájate Jungkook, no hace bien enojarte cuando tienes resaca.— Le sonrió la chica acercándose a él para tocarle el cabello.


Se sintió relajado al instante y se preguntó ¿cómo podía es que afectarle tanto el tacto de una persona? ¿y el tacto de ella más que el de los otros? Eso solo significaba que sus sentimientos por ella iban creciendo cada vez más y en eso en parte le asustaba. 

Pasó su brazo por la cintura de la chica haciendo que ella se pusiera nerviosa, ya que los ojos curiosos de Namjoon y Jin dieron con ellos, ambos se preguntaban qué había sucedido con su inocente y tímido amigo para que se estuviera comportando así con ella. Mientras que Yoongi masticaba  con la cabeza gacha y los puños levemente apretados. 

  — ¿Cuándo admitirán que ustedes...tienen algo?— Preguntó Seokjin. 

— Lo mismo me pregunto yo...— Apoyó Namjoon.

— Somos amigos... — Dijo Na Bong haciendo que Jungkook la mirase molesto.— ¿Acaso un hombre y una mujer no pueden serlo?— Quitó entonces su mano de la cintura de ella.

— Mi papá y mi mamá eran amigos y...se casaron — Contó Jin con la boca llena de comida — Los veo juntos a ustedes dos en el futuro...


Na Bong soltó una risa, nunca había pensado sobre eso, sin embargo no sonaba tan malo. Jungkook era un  chico bueno, demasiado bueno para ser real y además, era jodidamente guapo. Cumplía con todas las expectativas que alguna vez tuvo e incluso, era lo más cercano al chico perfecto con el cual había fantaseado tantas veces cuando niña. Pero era su amigo, era el apoyo que sabía que siempre querría en su vida y no quería cambiar aquello, ya que aunque sonara pesimista sabía que si dejaba que algo sucediera con su amigo, las cosas se arruinarían y por más que él le dijera que no era así, ella sabía que nada duraba para siempre y que en algún momento Jungkook se aburriría de la relación y que nada volvería a ser como era . 

Así que aunque aquello le costara, no vería a Jungkook como hombre. 




Motel room » j.jungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora