¡HOLA LECTORES!
Siento mucho la tardanza pero he estado 15 días de monitora en un campamento y no he podido ni escribir ni leer.
Nunca me cansaré de daros las gracias por leer, comentar y votar. ¡SOIS GENIALES!
¡Y unas gracias ENORMES a @beonchesire por la increíble portada! ¿Qué os parece? ¿Os gusta?
Os dejo ya con el capitulo 19 que espero que os guste y lo disfruteis!
UN BESAZO <3
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Esperé a que una fuente de palabras salieran de su boca, pero pareció que en el último momento se retractó.
-No quiero hablar de éste tema – sentenció cortante - , por favor – terminó con un tono más dulce. Sabía que cuando estuviera preparado me lo contaría y eso me tranquilizó.
Asentí dedicándole una sonrisa. No estaba allí para presionarle ni mucho menos, quería pasar un rato agradable con él y por un momento olvidar lo que me rodeaba y comportarme como una chica de diecisiete años.
-¿Alguna vez te han dicho que eres bastante madura para tu edad?- la conversación había tomado otro rumbo.
-Muy a menudo la verdad – reí. Todavía no sabía si era una cosa positiva o negativa.
-¿Cuándo caen los dieciocho?- preguntó guiñándome un ojo divertido.
-Dentro de tres días- suspiré pesadamente. Mis dieciocho, sin padres y sin hermana que estuvieran a mi lado. Por un momento me quedé en blanco y me pareció salir de mi cuerpo. Pesaba demasiado. Sin padres, sin hermana. Sin nadie…
-Habrá que celebrarlo a lo grande entonces- dictó risueño y con una sonrisa de oreja a oreja. Rápidamente volví al mundo real, a Inglaterra, a Londres, a Nando’s, a la mesa, con Niall. En el fondo no estaba sola, tenía a los cinco locos de la colina y a Cat. No se presentaba un cumpleaños tan deprimente al fin y al cabo.
-No soy muy de fiestas, pero los dieciocho sólo se cumplen una vez en la vida ¿no?
-¡Exacto! ¿Te cogerás una buena cogorza? – dijo metiéndose un buen trozo de carne en la boca.
-Es muy posible – reímos juntos.
Pronto terminamos de comer y pedimos la cuenta.
-¿Qué te apetece hacer ahora?- me sujetó la puerta que daba a la calle, musité un gracias y salimos a las frías calles de Londres.
-Es un poco tarde Niall – miré mi reloj de muñeca que indicaba las nueve menos cuarto – Iré a visitar a mi hermana y supongo que me quedaré a dormir allí.
- Te acompaño.
-No hace falta, de verdad – dije acercándome a él y estrechándole entre mis brazos. Olía muy bien – Buenas noches, feo – le sonreí y deposité un beso en su mejilla.
-Buenas noches- me devolvió el beso y nos separamos.
Paré a un taxi y en diez minutos estaba enfrente del Hospital Princess Grace, pagué al conductor amablemente y me bajé del vehículo. Entré sin pararme en recepción. Fui directa a la habitación 184, de la planta E.
Cuando abrí la puerta la imagen me reconfortó, mi hermana estaba profundamente dormida, sin tubos extravagantes y por lo que podía escuchar con un ritmo cardiaco estable. Dejé el bolso en una mesita auxiliar que había en la habitación y me tiré en el sofá cama azul que había debajo de la ventana. Era muy mullido y por un momento tuve la sensación de que me abrazaba.
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Sin plan previsto (EDITANDO)
Teen FictionSimple. Dos palabras. Ocho letras. Desde mi perspectiva no era tan difícil pronunciar esas palabras, pero dado el acontecimiento que acababa de presenciar, para él era al contrario. Le parecía un mundo el simple hecho de que salieran de su boca, gas...