Capítulo 43: Última despedida

909 82 15
                                    

Mis cosas estaban casi listas. Mañana me iría junto a Shawn en él vuelo de las 10:30 de la mañana. Él ya había terminado de arreglar sus cosas, pero como soy mujer...

Lauren no quería quedarse sola en casa y en la escuela; ya faltaban dos semanas para salir de vacaciones de verano, y no voy a mentir, no hacemos absolutamente nada en estas semanas restantes. Por lo que los papás aunque no estuvieran muy contentos, la dejaron ir.

En cuanto a mí, mi papá estuvo hablando en la escuela para darme permisos de faltar a la escuela. Claro que me dejaron ir y no había tantas molestias como pensaba.

Recompensas de ser una alumna ejemplar.

-¿Ya casi terminas? -Me preguntó Shawn desde él marco de no puerta.

-Ya... casi -Decía mientras intentaba cerrar la maleta subiéndome en ella.

Shawn rió.- Déjame ayudarte. -Él hizo lo mismo que yo, sólo que a diferencia mía, él sí logró cerrar la valija.

-Muchas gracias Shawn -Bajé mi maleta de la cama y la acomodé a un lado del escritorio.

-Ahora duerme, mañana tendremos que levantarnos muy temprano para agarrar el vuelo -Asentí. Él se marchó y me acosté en mi cama.

Agarré mi celular antes de dormir, y me percaté de que tenía demasiados mensajes. Los abrí uno por uno.

"No creas que me quedaré de brazos cruzados mientras mi chica se va a kilómetros de aquí. Iré a acompañarte al aeropuerto junto con las chicas mañana. Duerme bien princesa". Matt.

Le respondí con un "gracias", "te quiero" y "hasta luego". No tenía las ganas suficientes para responder como se debía.

Después le siguió un mensaje de Lauren, quien me contaba que estaba nerviosa. Después de Ally y Dinah quienes también me acompañarían aeropuerto. Y el último mensaje me extrañó.

"Estoy afuera de ti casa" Cameron.

No me dio tiempo de asimilar él mensaje, pues alguien ya tocaba a mi ventana. Me asusté, volví mi mirada al mensaje, y supe que él era Cameron. Fui abrirle antes de que mi papá y mi tío vinieran a ver qué pasaba.

-¿Qué haces aquí? -Abrí la ventana pero no lo deje pasar.

-¡Oye! Te vas a Los Ángeles, le avisas a medio mundo, ¿pero a mí no?

-No tendría porque despedirme de ti. Creí que todo había quedado claro entre nosotros -Mascullé.

Cameron sostuvo la mirada en mí durante mucho tiempo, lo cual me incomodó. Por un momento pensé que se iría, pero no fue así; en cambio, me abrazó. Fue un abrazo como nunca lo había hecho. Uno de sinceridad, de disculpas quizás. Pero más que nada, un abrazo del que siempre habría qierdido que me diera. Y aquí estamos.

-Lo lamento -Su voz fue casi inaudible. Eso me hizo pensar que tal vez estaba llorando, pero no quise averiguarlo.

Tenerlo de así de cerca, con su aliento en mi cuello, acariciando mi cabello no era algo que me molestara. No le había seguido el abrazo, hasta ahora, que no supe como tocarlo. Él me tenía agarrada por los hombros, mientras que no me quedó de otra que abrazarlo por su cintura.

El niño de mi infancia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora