- Anna, no creo poder hacer esto, es mi prima. ¿Lo recuerdas? La odio, pero la humillación que tendrá ante toda la academia no nos la perdonaría nunca. - Caminábamos hacia clases con Sara después de haberle contado mi plan en un Starbucks de cerca, casi cae muerta cuando le dije que sólo quería que se cayera con su comida en medio de todo el instituto. No sería la gran cosa. De verdad era más leve de lo que ella me había hecho a mí.
- Eres idiota Sara, no? No es nada, sólo, asomar el pie y listo, problema resuelto. - Le guiñé un ojo para que vea que me sentía mejor que ayer.
- Quiero que me cuentes sobre qué sucedió con Matthew y tu. Me contaron que te vieron bajar de su auto ayer. - ¡Wow! Los rumores corren rápido por aquí, y eso que mi pueblo era más chico.
- Ya te conté todo, Sara, no sucedió más nada. No me atrae en lo absoluto. -.
- Eso dices ahora, espera un poco más y verás. -. No sé a qué se refería Sara, pero aún así no le di importancia, no vine a California para ver a chicos o enamorarme, venía a curarme y a luchar por mi vida.
El día pasó tranquilo, a la hora del almuerzo, Sara y yo estábamos sentadas en el mismo lugar de siempre. Sólo que con dos acompañantes más. Matt, y su amigo que no paraba de mirar a Sara. Se tornaba un poco molesto cuando nos dejaban hablando solos a Matt y a mí.
Llegó la hora de comenzar la venganza a Megan. Llegó como siempre al comedor, sacó a dos chicas de la fila, y se sirvió el especial de hoy. Fideos con mucha salsa y queso. Su camisa iba a quedar más roja que esa salsa y su cabello de barbie, ni mencionar. Como lo supuse, venía para donde estábamos con Sara y sonreía cinicamente.Miré a Sara y allí fue. Megan cayó como en cámara lenta y sus amigas todas en fila, encima de ella tirando todo su almuerzo. El comedor entero estalló de risas al igual que yo. No podía parar de reírme. Me agache un poco, la miré y le tendí mi mano así se levantara.
- ¿Vas a querer mi ayuda o no? -.
- ¿Por qué me ayudas después de lo que te hice el martes? -.
- Porque yo no me divierto haciéndole el mal a las personas. - Sara, me observó regañándome. - Quizás sí, pero para que lo tomen como una lección y eso necesitas tú, Megan. - Se paró y me observó de arriba a abajo a lo que yo respondí; - Vive y deja vivir, ya verás como cambia todo. - Tomé mis cosas y me fui del comedor con una sonrisa triunfante. Espero que aprenda.
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- Entonces le pones un poco de esto y te lo comes. - Matt se llevó un pedazo de sushi a la boca y yo sólo hice cara de asco.
- ¿No hay pizza aquí, o tacos? De verdad no me apetece comer esa cosa. -.
- ¡Oh vamos, Anna! Come, si te gustará - Dijeron al unísono Sara y Jack, el mejor amigo de Matt. Que por cierto se miraban y se reían como si se conocieran de toda la vida. - ¡Prueba sólo un poco y te traemos una pizza! - Iba a matar a Sara.
Probé un pedazo de sushi y casi lo vomito todo, si que era asqueroso. Miré a Matt y comenzamos a reírnos. Él pidió un par de tacos para mí porque iba a salir descompuesta de este restaurante si querían que coma mi porción de sushi.
- Bien, como Anna comerá tacos, su porción será para mí, a comer se ha dicho. - Todos nos reíamos, sí que le gustaba esta comida. Matt era un chico bastante simpático, lo había conocido bastante en estos dos meses y era grandioso. Luego de lo que pasó con Megan, dejó de molestarme y encontró a otra víctima, ahora era un "nerd", como ella les llamaba. Pero, al menos no me volvió a molestar a mí, es más, me sonreía cuando pasaba por mi lado.
Estaba mirando para los baños, y sentí una mirada penetrante en mí. Di vuelta la cabeza y era Matt que me estaba observando detenidamente, y cuando lo miré hizo una cara super graciosa a lo que me reí. Me hizo señas hacia Sara y Jack, y me di cuenta que se estaban abrazando muy cariñosamente. Nos levantamos y dijimos de que iríamos a pagar. Pagamos y salimos del restaurante, a caminar un poco.
- Así que tu amiga me robó a mi mejor amigo. -.
- Tu amigo me robó a mi mejor amiga. -. Reímos.
- Dime Anna, estuve pensando desde que nos conocimos ese día en el baño, si no llorabas por lo de Megan, qué era entonces? - Lo miré, de verdad que no quería que se entere sobre mi enfermedad, no sabía si decirle o directamente no decirle nada.
- Sabes Matt, algunas veces a las personas nos pasan cosas que nos cambian, algunas veces llega algo que hace que cambiemos nuestra vida aunque no querramos. Vemos delante de nosotros todo aquello que podíamos hacer en algún momento, y mirarnos ahora es como un golpe bastante fuerte. Ese día lloraba porque mi vida había cambiado muy rápido y no me dejó disfrutar nada de lo que era, aunque sea por última vez. Pero a pesar de todo no me arrepiento de nada. - Sonreí más para mí misma, levanté mi cabeza y él me estaba mirando con atención. Estábamos enfrentados y nos mirábamos detenidamente.
- Ese día decías que "por qué a ti?", y todavía no logro entender porqué. Sólo sé que lo que me dijiste es verdad, me pasó con personas. Me las quitaron tan rápidamente que no tuve tiempo de decirles adiós o mucho menos disfrutarlas más. Ahora tengo en mente disfrutar a las personas al 100% como si fuese el último día de mi vida o la de ellos. - Sonreímos. - Y me encantaría también hacerlo contigo, Anna. Conocerte y arreglar aquello que te hizo mal y que logró cambiarte. -.
- Espero arreglarlo y que no sea demasiado tarde. - Lo miré y le sonreí con un poco desilusión. Nos giramos y vimos que Sara venía corriendo con Jack hacia donde estábamos. Sara me agarró y me llevó casi a la fuente que estaba en la otra punta de la calle. - Oye, tranquila te recuerdo que no puedo correr. - Hice un mohín con mis labios.
- Lo siento, es que quería contarte que Jack me propuso ser su novia en el restaurante. - Abrí los ojos como platos, si se conocían desde hace dos meses solamente. - Tranquila, lo conozco desde que estoy en la academia y una vez cuando yo estaba enferma quisimos estar juntos pero él se fue a Inglaterra con su familia y cuando volvió yo estaba muy enferma. Antes de que tu vinieras, ya estábamos hablando y ¡PUM! ¡SOMOS NOVIOS, ANNA! - Estaba tan contenta por Sara que la abracé y festejamos, ella saltaba y yo tenía que hacerlo a pesar que dolía un poco, pero estábamos felices aunque sea por ella. Espero y no sea como el hijo de puta de Brad, y si lastima a Sara se las verá conmigo.
Dos horas después seguíamos festejando por ellos, tomando helado y paseando ya que mañana no teníamos instituto. La estaba pasando tan bien, nunca me había divertido tanto, me habían hecho parar en puntas y hacer varios pasos del lago de los cisnes, reíamos, bromeabamos, estaba tan feliz, tan contenta, estaba disfrutando como me lo había pre visto. Matt me sonreía, me abrazaba, me sentía tan querida con ellos que no pensaba en otra cosa, ni en mis problemas, ni en lo que me había pasado en Texas antes de venir, ni en el cáncer. Era feliz de nuevo y eso me importaba. Nada más.
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Living with hope.
RomanceUna sonrisa que deja hipnotizado a cualquiera, un cuerpo maravilloso, una personalidad deslumbrante, amante al ballet y a la música clásica, el mejor promedio en su Academia, una familia maravillosa, no le faltaba nada, tenía una "vida perfecta". A...