As Long As You Love Me ● Justin

Capitulo 5

"¿Qué si no vuelves?"

Cogí mi bolso y las llaves de la casa, después de vestirme con jeans negros, botas del mismo color, una camiseta gris de manga corta y una camisa a cuadros en tonos rojos encima. Mi pelo estaba ondulado. Busqué mis Ray Ban para cogerlas poco después de divisarlas en mi mesilla.

"¿Que demonios estas haciendo?" La voz de Ashley resonó en mis tímpanos. Era incómoda cuando se ponía tan 'sobreprotectora'

"Voy al Starbucks de Wilshire Center. El chico con el que hablé, me tiene que dar mi teléfono. Ayer ... " Suspiré, mientras los recuerdos de su enfado en el coche inundaban mi cabeza, haciendo que me pusiera nerviosa -mas de lo que estaba, aunque fuera imposible-

"¿Qué chico?" Puso sus manos en sus caderas mientras se paraba delante de mi para no dejarme pasar y salir de la habitación. Suspiré resignada. Mi paciencia estaba llegando a su límite ... y eso no era bueno.

"No lo se. No se su nombre. Solo ... tengo que ir para recuperar mi móvil." Intenté pasar pero ella se puso de nuevo en medio, impidiendo mi paso. Tomé una profunda respiración, intentando contener mis nervios que estaban a punto de explotar.

"¿Como que no lo sabes? ¿Acaso estas loca y te estas viendo a escondidas con una persona de la que no sabes ni siquiera su nombre?" Arqueó su ceja, levantando por momento su voz. Este interrogatorio no me gustaba ... es más, lo odiaba.

"Ash, quítate de la puerta si no quieres que te obligue." Le miré a sus ojos azules claros mientras ella fruncía su ceño. "Ashley López. ¿Te puedes quitar de la jodida puerta de una vez y dejarme pasar para ir a recuperar mi ... móvil?!" Dije la ultima palabra en voz alta, haciendo que ella se estremeciera. Definitivamente mi paciencia había llegado a su límite.

Ella simplemente suspiró resignada mientras se hacía a un lado y pasaba para bajar rápidamente las escaleras. Me puse mi chaqueta marrón de cuero por encima, a la vez que me la abrochaba. Noté sus pasos justo detrás de mi, poco después de que yo bajara.

"____, si tu padre se entera de que te has marchado de casa, sabes lo que pasará, ¿cierto?" Me volteé para mirarla mientras cogía el bolso y sacaba de él mis cosas. Sería mejor idea que las llevara en el bolsillo de mi chaqueta, tampoco iban a ocupar mucho espacio. Puse mis llaves en uno de mis bolsillos y en el otro mi cartera.

"Pero él, no tiene porque enterarse."

"____, cualquier persona que conozca a tu padre, te puede reconocer por la calle." Lanzó sus manos al aire mientras se ponía mas dramática de lo que estaba antes.

"Vaya, muchas gracias por los ánimos, mejor amiga." Dije sarcásticamente mientras me ponía las gafas de sol en mi rostro, tapando parte de él. La miré por última vez antes de salir por la puerta de la gran casa. "Estaré de vuelta en un rato." Salí de la casa, mientras me dirigía hacia la calle.

"¿Que si no vuelves?" Me detuve en seco en mitad de la acera, mientras me daba la vuelta para mirarle desde lejos.

"Estaré de vuelta. Y gracias de nuevo por los ánimos." El sarcasmo goteaba de cada una de mis ultimas palabras dichas. Tomé una profunda respiración mientras seguía caminando hacia una de las paradas de autobús para ir a Wilshire Center.

Me detuve delante de la acera, esperando a que el autobús llegara hasta donde estaba esperando rodeada de algunas personas impacientes por que llegara. Los entendía, odiaba esperar y mas si hacía tanto frío. Era otoño, pero Oh Dios mío. Parecía que estaba nevando. A veces me encantaba que hiciera frío, pero otras veces, como esta, lo odiaba.