Don't Let Me Go.- Grant Gustin

Capítulo 19

Narra Cassie
-No no no, por favor enana.- Suplicó una vez más pero mis risas no podían ser controladas.
-¿Me recuerdas lo que dijiste?- Levanté una ceja mientras él me miraba con rabia. Si las miradas mataran yo ya tendría pasaje en business para el purgatorio.
"Si pierde tu equipo tendrás que caminar sin camiseta hasta casa.- Susurró él en mi oído, provocando escalofríos en mi cuerpo.
-Si pierdes tú, tendrás que caminar por las calles de la ciudad con la camiseta de mi equipo y tus bóxers, nada más.- Le reté con la mirada, dudó durante unos segundos.
-Hecho."
-Mi equipo ganó Grant. ¡Ya he cedido bastante! Te dejo llevar zapatillas.- Mi cara formó una mueca extraña, tratando de sonar como si aquello fuera un favor.
El trato era que yo me vestiría -pues seguía en pijama- y le acompañaría, manteniendo la distancia, claro, para que lo cumpliera. Él ya estaba "vestido" solo faltaba yo. Puse un pie en el primer escalón de mi hogar pero antes de poder continuar, una mano se aferró a mi cintura, lanzándome contra él. Me puso en su espalda, como si fuera un koala y sostuvo mis muslos. De un momento a otro, estábamos en la calle, el ojiverde corría despacio hasta que comenzó a caminar normalmente. Nuestras risas sonaban al unísono, la gente nos miraba como si estuviéramos locos. Pensé en cuantas veces había estado asustada por lo que la gente pudiera pensar de mi, siempre asustada de como verían mi ropa, mi peinado o cualquier cosa en mi. Y ahora me encontraba agarrada a un chico semidesnudo, con un pijama nada femenino y paseando por una calle muy transitada y lo mejor de todo, me daba igual. Me hacía feliz, estaba feliz y Grant era el motivo por el cual ahora me sentía tan libre.
-¿Puedes dejarme ya en el suelo?- Pedí despacio en su oído.
Su respuesta fué dejar que mis pies descalzos tocaran el suelo. Y entonces algunos paparazzis corrieron hasta nosotros, haciendo fotos sin parar. Nuestras miradas se cruzaron, ambos sonriendo.
Un par de horas después ya nos encontrábamos en la portada de una revista de cotilleo.
Narrador externo
Grant entró en su casa con una gran sonrisa y Emma a su lado. La chica no había dicho una sola palabra desde que se vieron y eso era extraño. Ella se puso frente a él, sacó algo doblado de su bolso y se lo mostró, era una revista rosa, con una foto de el joven y su buena amiga en la portada.
-Te pedí que te mantuvieras alerta con esa chica.- Sostuvo su mirada fija en él.
-Emms es solo una amiga.- Reiteró nuevamente.
-Una amiga con la que sales en revistas.- Le miró de arriba a abajo. El chico levantó ambas cejas, no quería perder a su novia.
-¿Qué tengo que hacer para que no te enfades?- Interrogó con imploro en su voz.
-Quiero que te alejes de ella.- Sentenció la ojiazul.
Él lo pensó por algunos segundos, el hecho de perder a Cassie le aterraba pero no podía perder a su chica, él la amaba y debía ser un buen novio.
Ya había perdido a Becca por no ser el chico atento y cariñoso que debía ser. No dejaría que sucediera de nuevo, incluso si eso significaba perder a alguien tan importante para él.
-Vale.- Aceptó con un nudo en su garganta.