Capítulo 14

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Narra Cassie
-...Y recuerden que deben entregar el trabajo de al menos 20 fotografías que les sean inspiradoras. El mejor trabajo será expuesto en la galería de arte más importante de Vancouver, Fotmain.- Mi mandíbula se abrió exageradamente. ¿La Galería Fotmain? ¡Era la mejor de toda la ciudad! Sería una oportunidad increíble para mi. Pero era demasiado complicado...
La semana siguiente la pasé intentando encontrar una idea decente entre las miles que mis amigos parecían tener. Por desgracia ninguna había sido buena.
Como cuando le pregunté a Cece...
"-Haz un trabajo sobre mi. Una pelirroja sexy e inspiradora.- Estuve a punto de reírme pero su expresión era demasiado seria para que eso fuera una broma.
-¿Qué?- Pregunté incrédula
-¡Soy tu mejor amiga!- Me reprochó casi en un grito."
O cuando se lo dije a Josh...
"-Haz un trabajo sobre beanies. Son perfectos y muchísimo sobre ellos.
-¿Y eso a mi en que me inspira?- Indagué
-¡En todo! No ofendas a mis inspiradores gorritos con tus palabras envenenadas. Y le salir por la puerta."
O con Kyle...
"-Puedes hacer un trabajo sobre mi. Soy guapo, sexy y tu hermano favorito.- Y ahí supe porque Cece y él eran una pareja tan perfecta."
¿Es que nadie tenía una maldita buena idea?
Suspiré dejandome caer sobre la puerta de Grant. Necesitaba hablar con alguien que no me diera diez ideas estúpidas por segundo.
Claro, es por eso y no porque llevas un día entero sin verle.
Shh tu a callar.
Le observé llegar hacia mi con una gran sonrisa, llevaba una chaqueta de cuero rojo que le quedaba hermosa. Sus ojos se veían más preciosos bajo la luz de una luna que iba saliendo poco a poco. Su pelo castaño revuelto y esa sonrisa tan irresistible. Para Cassie, para.
-Hola Evans.- Me aparté para dejarle espacio y que abriera la cerradura.
-Hola grandullón.- Sonreí aunque no pudiera verme.
-¿Entras o tengo que agarrarte en brazos?- Levantó una de sus cejas e hizo un gesto de poner sus manos sobre mis piernas.
-No no no.- Respondí entre risas y entre con rapidez al salón.
Se lanzó directo al sofá y antes de que pudiera reaccionar sus manos agarraron mi cintura y me lanzaron a su lado. Su tacto se sentía tan bien que dolía.
-Y bien... ¿Como ha ido tu día?- Le miré expectante, esperando su respuesta.
-Estuvo bien... Nada raro ni interesante, voy ha hacer una película.- Comentó con desinterés.
Le miré con los ojos muy abiertos ¡Va ha hacer una peli!
Su mirada brillaba mientras reprimía una sonrisa.
Me lancé a sus brazos y le dí la enhorabuena tantas veces que perdí la cuenta.
-Vale vale para...- Se rió como un niño pequeño bajo mis cosquillas.
Paré recordando el trabajo que aún no había empezado.
-Grant. Necesito un consejo.- Me senté correctamente y mi voz se tornó seria. Él me miró con el ceño fruncido y asintió con la cabeza, instandome a que prosiguiera.
-En la academia me han pedido un trabajo de 20 fotos al menos de algo que me inspire... ¡El premio es una exposición en la galería Fotmain!y le he preguntado a los demás pero no me dan buenas ideas.- Finalicé con un suspiro.
-Cass, acabas de decir que debe ser algo que te inspire pero le has preguntado a tus amigos, quiero decir... Tu sabes que es lo que te inspira, solo debes cerrar los ojos y pensar en ello ¿No crees?- Entrecerré los ojos mientras procesaba sus palabras. Él tenía razón.
-Tú... Tienes razón.- Le señale para después dejar un sonoro beso en su mejilla y salir corriendo de allí. Tenía que buscar en mi interior. ¿Que me inspiraba a mi?

Don't Let Me Go.- Grant Gustin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora