Capítulo 28. "Trampas y vasos de agua".

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- No, no lo sé... quizá -contestó Sussan, cuando Molly le preguntó si Ed y ella pensaban tener hijos en el futuro. Eran las nueve de la mañana, y todas (menos Dannia, aún dormía) estábamos en la cocina del departamento, desayunando antes de comenzar a arreglar a Sussan.

- No puedo creer que hace unas semanas sólo eran novios y ya van a casarse -comenté. Molly suspiró.

- Así es la vida. Quién sabe si Dannia termina comprometida el próximo año. -se encogió de hombros.

- Puedes estar segura que yo no voy a comprometerme pronto -le guiñé un ojo- Kathie y yo seguimos en el club.

- Já, habla por ti -dijo Kathie, abrazando su nutella.

- Mejor habla por mí, porque conociendo a Harry... -dijo Molly. Mi corazón aleteó al escuchar su nombre, pero se apretó al recordar la última vez que había hablado con él, la noche en la que firmábamos tarjetas.

- Harry y yo no tenemos... -no pude pronunciar la palabra "nada", porque tres segundos después, quebré en llanto.

Las chicas y Molly me rodearon en cuestión de segundos. Caitlin me abrazó fuerte, así que me apoyé en ella y cerré los ojos, intentando ignorar las palabras de consuelo de las demás para concentrarme en no sentir nada.

¿Por qué lloraba? Con sinceridad: ni puta idea.

No recuerdo haber llorado así en años. No suelo llorar, mucho menos con personas rodeándome. Pero no pude controlarlo, los sollozos simplemente salieron con las lágrimas.

Me calmé pronto, respirando poco a poco hasta regular todo. Sequé mis mejillas, sorbí por la nariz, y me enfrenté a las demás, que me miraban entre preocupadas y expectantes.

- ...nada, no tenemos nada -completé.

- ¿Qué es lo que pasa, nena? -preguntó Sussan, con cariño.

- Ya lo superé, lo prometo -dije

- Eso no responde la pregunta. -Molly enarcó una ceja.

Suspiré.

- Digamos que en estos tres, casi cuatro meses, he pasado tanto tiempo con Harry que... puede que haya... ya saben...

- ¿Enamorado?

- Desarrollado un tipo de afecto hacia él que confundí con otro tipo de afecto -corregí- Pero ya estoy bien, en serio.

- No, no lo estás -dijo Caitlin-, ¿cuál es el problema con ese "tipo de afecto"?

- Es que, bueno... yo pensé que había una posibilidad de que él también, ya saben... pero él me ve sólo como una amiga. ¡Lo que está totalmente genial porque ya lo superé! -añadí con voz nasal.

- Aria, ¿de dónde sacaste tú eso? -Molly frunció el ceño- ¡A Harry le-

DING DONG.

- ¡Yo abro! -dije, levantándome y corriendo fuera de la cocina antes de que Kathie me cogiera del brazo. Ya era bastante incómoda la conversación.

Eh, pero no fue tan incómodo como abrir la puerta y encontrarme de frente con el tema de la conversación incómoda.

- ¿Harry? -pregunté. Él sólo me veía, abría sus labios para hablar, pero no decía nada.

- Y Ed -agregó otra voz. Volteé para ver a Ed al lado de Harry (no lo había notado), y lo saludé con una sonrisa.

- Heeey, chico de la boda. Sussan está en la cocina -le dije, haciéndome a un lado.

Enamorada de la competencia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora