Enamorada de la competencia.

Capítulo 59 "Teo Weather".

 Capítulo 59

"Teo Weather".

-¿E…era?- me pregunta. Su semblante ha cambiado por completo. Parece estar en algún tipo de pequeño shock.

-El tres de mayo del 2000, yo apenas tenía seis años. Sophie dormía en su habitación, ella tenía tan solo cuatro años. Teo siempre fue mi hermano favorito, por así decirlo. Siempre jugaba con él, siempre bromeaba con él, siempre estaba con él.- le digo con una sonrisa quebrada.

“Mi madre se quedó en casa con Sophie. Mi padre debía salir a comprar algo, Teo y yo insistimos en acompañarlo. Y así fue. Él aparco el auto porque recibió una llamada urgente. Teo y yo quisimos jugar al taxi, así que él tomó asiento en el lado del conductor.

“Comenzó a mover las palancas y a rodar el volante. Una de esas palancas era el freno de mano.

 “El auto comenzó a rodar, cada vez con más velocidad. Teo tenía una cara terrible, estaba asustado. Le grite que pase a los asientos traseros. Luego de que lo hizo, yo me pase hacia atrás con él y lo abracé.

“Nos estrellamos contra un bote de basura que al parecer tenía un yesquero. Se prendió en fuego. Todo alrededor se prendió en fuego. Teo lloraba y yo solo gritaba y pedía ayuda, golpeaba las ventanillas del auto.

“Nadie parecía darse cuenta, hasta que una señora nos vio. Pronto estábamos rodeados de personas que nos veían desesperados. Éramos tan solo unos niños.

“Mi padre estaba esquizofrénico, pero por más que lo intentaba, no podía ayudarnos, porque estábamos rodeados de fuego. Si intentaba entrar, lo más probable era que muriera antes de llegar a nosotros.

“Traté de tranquilizar a Teo, le dije que solo cerrara los ojos, que no observara nada. Le prometí que iba a estar bien. Le prometí que todo iba a estar bien. El solo me pedía que no le dejara solo. También le prometí que no lo haría.

“Llegaron los bomberos y abrieron el techo del auto, era lo único que no estaba en llamas. Yo era la que estaba más cerca, así que me cogieron primero. Yo comencé a gritar histérica, a llorar. No quería que me apartaran de Teo, en todo caso, quería que lo sacaran a él primero. Pero los bomberos no escuchaban, no entendían, solo tenían como objetivo sacarme de ahí.

“Teo me gritó que no lo deje solo, pero los bomberos igualmente me sacaron del auto. Mi papá me tomó en brazos y me abrazó, pero yo tenía la vista fija en el auto. La cabeza de Teo se asomaba por el techo, uno de los bomberos estaba sacándolo del auto, él solo me buscaba con la mirada para tomar seguridad, cuando… el auto explotó. El fuego había llegado a tocar el combustible, y terminó por hacer explotar el auto.

“Yo caí el suelo, la explosión había impactado enfrente mío. Cubrí mi cabeza con mis brazos unos segundos, y luego me volteé para buscar a Teo y traerlo con papá. Debía llevarlo al hospital para que lo atendieran… pero no lo encontré. Entonces me di cuenta de que Teo ya no estaba, y no lo encontraría de nuevo.

Cuando terminé de relatar lo sucedido a Harry, me encontraba sollozando, con mis párpados cerrados, y mis mejillas empapadas.

-Pasaron semanas, y yo no hablaba. No había pronunciado una sola palabra. Pasaba días sin comer, ni siquiera tenía hambre cuando me obligaban. Fui a muchos psiquiatras, demasiados. Ellos solo decían lo mismo siempre. Pase bastante tiempo teniendo pesadillas, y no podía ver ni siquiera una pequeña vela encendida porque me desespera. Era tan solo una niña, y vivir eso a los seis años no es algo muy lindo. Estaba en esa época en la que solo pensaba lo lindo que era todo. Y que de repente…