Anemone

Chapter 16: Bakainu

Koichi:- Tsu, vamos levántate- lo moví ligeramente y como si se hubiese dormido hacía cinco segundo, rápidamente se despertó- Mm... ¿otra vez mal dormir?- le di un beso en la mejilla.

Tsuzuku:- Mm...- se estiró- ¿Dormir?, aún no sé qué es eso, es como si solo cerrase los ojos- reí.

Koichi:- Me doy cuenta. Si tan solo tomaras las pastillas como te dijo el médico...-

Tsuzuku:- No- sentenció con rapidez- Vamos a desayunar-

Lo observé en silencio ponerse de pie dándome la espalda en todo momento y luego desaparecer tras la puerta del dormitorio. Si será cabeza dura cuando quiere:

Koichi:- No hay nada que puedas hacer querido- me dije a mí mismo tras colocarme el par de pantuflas.

Preparé dos tazas de café y unas tostadas como casi todas las mañanas y aguardé a que tomara asiento junto a mí. Pero se estaba tardando demasiado:

Koichi:- Tsuzuku- golpeé la puerta del baño- ¿Estás bien?-

Tsuzuku:- Si- escuché débilmente.

Koichi:- Bien, apúrate o se enfriará tu café. Te espero-

Segundos después de que tomé asiento escuché la puerta del baño cerrarse y él arrastrar los pies al caminar por el pasillo:

Koichi:- ¿Te sientes bien?-

Tsuzuku:- Claro- pero siquiera me miró al contestar.

Preferí terminar la conversación ahí, con esto era más que suficiente para que me diese cuenta de que nada estaba bien. Pero si realmente quería hablarlo, lo haría él solo o se haría entender de alguna forma. El terapeuta ya me ha dicho que no es bueno que lo presione para hablar.

En fin. Desayunamos en silencio y cada uno centrado en su comida o la TV, al parecer no estaba dispuesto a socializar conmigo por el momento, pero sé que este silencio lo pone incómodo. Veré que puedo hacer...:

Koichi:- Por cierto, al final ayer no hablamos de lo que me dijo el médico- cambié mi tono de voz a uno más animado.

Tsuzuku:- Mm...- siguió comiendo sin prestarme atención- ¿Y?- solo pretendería escucharme.

Ya, entiendo que esto no lo hace adrede pero definitivamente este tipo de situaciones siguen afectándome, me enojan y lastiman. Incluso no me daban ganas de fingir buen humor para él:

Koichi:- Y me dijo que está como la mierda- mi tono de voz se volvió frío y seco- Tardaré de uno a dos meses más en recuperarme-

Si, era mentira. Mi pierna aún estaba mal, hubo poca mejoría, pero eso no impediría que retomase mis actividades en poco tiempo más. Sin embargo, me sentía tan humillado cuando me trataba de esa forma indiferente que me importaba un carajo hacerlo sentir mal.

Me miró distante, incluso con un deje de tristeza durante varios segundos:

Tsuzuku:- Entiendo- se levantó dejando el desayuno a la mitad- Me voy, nos vemos en la noche-

Koichi:- ¿Qué?, ¿en la noche?, ¿dónde irás?-

Tsuzuku:- A beber por ahí-

Rápidamente me repuse detrás de él soltando un leve quejido de dolor por el peso que puse sobre la pierna sin querer, pero era lo de menos, necesitaba detenerlo.

Lo tomé de la camisa antes de que se acercase a la salida:

Tsuzuku:- ¿Qué?-

Volteó clavando sus ojos en los míos con notable molestia.