Chapter 18: Sadisgate

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Luego de la vez que Tsuzuku me arrojó por las escaleras creí que todo iba a marchar bien otra vez. Porque luego de la tormenta generalmente viene la calma. Y así fue. Solo que duró menos de lo que esperaba.

Como sabrán, la felicidad es momentánea, de más o menos duración, pero momentánea al fin y al cabo.

¿Cuándo será el día en que verdaderamente disfrutemos de un poco de paz, paz real?

Había salido del cuarto más encabronado de lo que estaba cuando entró, se notaba que recién despertaba, pero al parecer dormir no lo tranquilizó.

Me mantuve quieto en el sillón más por miedo que por seguridad propia, ver a Tsu de esa forma siempre me provocaba un escozor que me recorría el cuerpo, la sangre se me helaba.

Sin decir nada se paró en el umbral del pasillo que conectaba las habitaciones con el living y me miró desde allí con disgusto, desprecio. Aún así permaneció callado, mas no inmóvil.

Se acercó a la mesa donde pasó el brazo con brusquedad y arrojó el adorno de porcelana y flores contra la pared de un manotazo. Cerré los ojos fuertemente y con temor, porque a pesar de estar acostumbrado a este tipo de situaciones, el miedo nunca se va, nunca:

Tsuzuku:- Estoy harto de que siempre me quieras ver la cara de estúpido- masculló entre dientes mirando hacia otro lado menos hacia mí- Sé que todo el mundo lo hace, pero realmente me duele que tú también lo hagas, más que cualquier otro-

Así empieza todo. Con palabras agrias e hirientes, luego viene el griterío, y entonces los golpes, en el mejor de los casos nos "reconciliamos" antes de los golpes con algunos besos y palaras dulces para luego terminar teniendo sexo. Pero es solo ocasionalmente.

Solo es un episodio más, espero que acabe pronto:

Tsuzuku:- No creí que me darías la razón de esta forma tan cobarde, guardando silencio-

Lo que menos quería era darle la razón. ¿Pero valía la pena seguirle la discusión a sabiendas de que no me escuchará y hará caso a lo que le plazca?, no lo vi necesario, por eso me mantuve callado:

Koichi:- No quiero discutir Tsu- musité con miedo, porque realmente sentía miedo en cada centímetro de mi cuerpo.

Nuevamente un movimiento agresivo, el cuadro en la pared terminó arrojado en la otra punta del apartamento esparciendo el vidrio roto por todo el suelo.

Estaba más que nervioso. Quería escapar de algún modo, incluso en ocasiones he pensado el tirarme por el balcón. Cuando lo pienso estando tranquilo me resulta gracioso, pero en este momento me parece tan viable...:

Tsuzuku:- ¡Escúchame cuando te hablo!-

Instantáneamente sentí el picor del golpe en la mejilla, una bofetada certera que me había propinado por quedarme vagando en mis pensamientos:

Koichi:- Lo siento- no tenía ni el valor para mirarlo.

Tsuzuku:- ¿Qué de todo lo que has hecho sientes?, pero de verdad, sin mentir Koichi-

Koichi:- No prestarte atención cuando hablabas, porque fue lo que único que hice mal, Tsuzuku-

Tragué grueso, mala respuesta. Otra cachetada en el mismo lugar:

Tsuzuku:- Que sin vergüenza eres-

¿Yo sin vergüenza?, lo miré con sorpresa:

Koichi:- ¿Me estás jodiendo?- reí sarcástico. Me sacaba de mis casillas que él me calificara como sin vergüenza después de lo que era él.

AnemoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora