Chapter 17: Raven

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Oh Buda, líbranos del mal...:

Tsuzuku:- ¿Qué rayos hacen todos aquí?- si Tsuzuku tuviese el poder de matar con la mirada, estaríamos muriendo lenta y dolorosamente.

Ryoga:- ¿Qué no ves?- me abrazó más a él- Salimos los tres a tomar algo- aún sonreía con malicia.

Koichi:- ¿Qué?-

MiA:- No digas estupideces- lo alejó de mí tirando de su brazo- Él salió conmigo y nos encontramos a Koichi aquí que venía a comprar algo, ¿no?- me miró seriamente.

Gracias MiA, juro que cuando me recupere, ese primer sueldo va a ir destinado a un altar para ti:

Koichi:- Si- lo miré con una sonrisa muy fingida- Vine a comprar un pastel para cuando volvieras y me los encontré a ellos-

Tsuzuku:- ¿Y eso que tiene que ver con que él te esté abrazando?- miró a Ryoga con ira.

Ryoga:- Ya, no seas así- su expresión y tono cambiaron rotundamente a uno de completa seriedad. Esto se ponía feo- Lo abracé porque me sentí feliz de verlo, ¿qué con eso?-

MiA:- Ryoga- tragué grueso.

Koichi:- ¿Y tú qué haces aquí Tsu?, creí que estarías...- le sonreí lo más que pude.

Tsuzuku:- Cállate-

Ryoga:- No le hables así, el chico te está hablando bien y...-

Tsuzuku:- ¡Tú también cállate!-

Dio unos cuantos pasos hasta quedar frente a frente con Ryoga y por instinto MiA y yo avanzamos para interponernos por si pasaba algo. Tomé a Tsuzuku del brazo suavemente sin tironear. Debía apaciguar esto de algún modo:

Koichi:- Tsu, por favor, ya te dije que no ocurrió nada-

Ryoga:- ¿Qué?, ¿vas a hacerme frente?- se miraron a los ojos, pero él no dejaba de lado esa actitud altanera que tiene para hablar, incluso para mirar a la gente.

MiA:- No seas imbécil-

Tsuzuku:- Te he dicho que no quiero verte cerca de él-

Ryoga:- Y yo te he dicho a ti que no tienes ningún derecho a decirme a quién puedo acercarme y a quién no. Es tu novio, no un objeto de tu propiedad-

Tsuzuku:- Me vale- levantó la voz- Es MI novio y no quiero que te acerques- el otro rió divertido.

Ryoga:- ¿Piensas dejar que controle tu vida así?- me dirigió la mirada.

Tsuzuku:- Yo no controlo su vida- lo empujó levemente haciendo que retrocediera- Solo quiero que se aleje de bastardos como tú que quieren aprovecharse de él-

MiA:- Tsuzuku basta- se puso entre ambos- Dejemos esto aquí por favor-

Tsuzuku:- ¿Y tú qué?, ya sé que vas a defenderlo. Pero tu enamorado no es ningún santito-

MiA:- ¡No digas tonterías!- pareció alterarse.

Yo ya no entendía nada, solo quería que cada uno mirase para el lado opuesto y dejaran de pelear:

Tsuzuku:- ¿Tonterías?- sonrió ladino- ¿Acaso no le has contado de tu afán por querer tirarte a Koichi?-

Ryoga:- Por supuesto que sabe. Sabe que estoy interesado en tu noviecito-

Koichi:- Ryoga- lo miré de mala gana- Te estás desubicando-

Ryoga:- ¿Yo desubicando?- puso cara de sorpresa- ¿No te parece que aquí el único desubicado es él?- miró a Tsuzuku- Controla tus amistades, te golpea, te manipular, ¿no te parece que eso es desubicarse?-

Tsuzuku:- ¡Hijo de...!- iba directo al rostro.

MiA/Koichi:- ¡Tsuzuku no!-

Lo tomamos de donde pudimos y lo apartamos del otro tanto como fue posible. La gente que pasaba nos miraba y murmuraba cosas.

Ryoga estalló en carcajadas:

Ryoga:- Por favor, ¡mírate!, eres lamentable- suspiró- En fin, me iré-

MiA:- Eso, vete y deja de estorbar- se miraron de mala gana.

Ryoga:- Tú vienes conmigo-

Sin decir más nada tomó a MiA del brazo y lo jaló con él llevándoselo. Solo pude escuchar algunas quejas de parte de él, pero luego lo siguió sin oponerse.

Miré a Tsuzuku de reojo, aún tenía esa mirada fría y aterradora:

Tsuzuku:- Vámonos, no habrá ensayo hoy-

Se dio la vuelta y se dispuso a caminar, dejándome solo y confundido en plena calle.

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MiA:- ¿Qué quieres?- paré en seco cuando ya nos habíamos alejado al menos tres cuadras.

Ryoga:- Vamos a mi casa- no podía ver su rostro estando detrás de él, pero por su tono de voz, adivino que está furioso.

MiA:- ¿Para qué?-

Ryoga:- ¿Te importa?- adiviné, cuando volteó se veía espantoso con esa expresión en su rostro- Cuando lleguemos lo sabrás, ahora vamos-

Lo solté con brusquedad cuando volvió a tomarme de la mano.

Solo nos miramos con detenimiento. Sé que pretende. Sé que quiere ir a su casa para desahogarse y luego hacemos que nada pasó.

Pero no puedo, yo no puedo hacer eso:

MiA:- No iré contigo-

Ryoga:- Oye, no estoy para tonterías-

MiA:- Yo tampoco- dije firmemente- Tampoco quiero meterme en tonterías. Y... que me gustes no significa que vaya a estar detrás de ti como perro faldero-

¿MiA qué estás diciendo?, acabas de confesarle abiertamente que te gusta, ¿qué mierda te pasa?:

Ryoga:- Ya veo- sonrió divertido- Me gusta que pongas resistencia-

MiA:- Me largo-

No dejaré que haga de mí lo que le venga en gana. No soy como Koichi.

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Koichi:- Tsuzuku, por favor, cambia esa cara-

Me suplicaba sentado frente a mí en la mesa del living. Estaba hastiado de oírlo repetir lo mismo una y otra vez, pero no tenía ganas siquiera de hablarle para pedirle que se callara:

Koichi:- Tsu-...- me levanté dando un golpe en la mesa lo cual lo asustó.

Sé que vino detrás de mí, pero entendió que no le haría caso cuando cerré la puerta del cuarto de mala gana. No insistió.

Cuando creo que las cosas no pueden ir peor, oh, sorpresa, siempre pueden.

No quiero pensar en nada, no quiero ver a nadie, no quiero hacer nada que implique estar despierto. Por tanto, voy a dormir ya que no puedo morir. Y mejor antes de que empiece a pensar cosas extrañas para auto sabotearme.

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"Perdona Meto, hoy no habrá ensayo, tuvimos un pequeño... problema. Luego te explico. Te quiero~"

Suspiré dejando el teléfono al lado mío en el sillón. ¿Y ahora cómo arreglo esto?, todo salió como la mierda. Se supone que iba a solucionar un tema y terminaron complicándose más cosas. Me pregunto que habrá pasado con MiA y Ryoga.

Volví a suspirar. Últimamente suspiro más de la cuenta.

Ahora todos estaban enojados con todos y yo aquí, como tonto pensando en cómo remediar la situación. No podrían haber aparecido en mejor momento esos dos.

Tal vez la única solución sería dejar que todo siguiese su curso y ver qué pasa, ¿no?

AnemoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora